Antes de trabajar en una tienda de deportes, Jérémy Mathieu era un 'extraterrestre' en el vestuario: "No hablaba nada e iba a su bola"

El exfutbolista Jérémy Mathieu (Luxeuil-les-Bains, Francia, 1983) trabaja en una tienda de deportes situada entre Aix-en-Provence y Marsella, como encargado de la sección de fútbol. El galo, que se retiró en 2021 después de dos años jugando en el Luynes Sports, en las categorías regionales de Francia, combina el nuevo trabajo con su formación como entrenador. La imagen del exdefensa en redes sociales cautivó a un montón de curiosos que se acercaron hasta la tienda para fotografiarse con el ex del FC Barcelona.

"Me metí un gol en propia puerta con el Barça ante el Villarreal. Era un córner y no veo que llegue el balón, rebota en mi pecho y se mete en la portería. Después, todos los periodistas españoles me aplastaron, como si lo hubiera hecho a propósito", reveló hace unos años Mathieu en una entrevista en L'Equipe. "No quería ir al Barça. Cuando se me acercó, era capitán en Valencia, estaba disfrutando de mi vida allí y me preguntaba: ¿voy a pulir el banquillo en Barcelona?", recordó.

Estuvo tres temporadas en Can Barça. "Era una persona peculiar", reconocen en el club. Llegó en 2014 procedente del Valencia. Le fichó Andoni Zubizarreta. "Es un jugador con experiencia y polivalente", destacó. Podía jugar en el lateral zurdo o de central. Conquistó siete títulos como azulgrana -dos ligas, una Champions League, tres Copas del Rey, una Supercopa de España, otra Supercopa de Europa y también un Mundial de Clubes-.

Compartió vestuario con futbolistas de una calidad extraordinaria. Disfrutó desde dentro de la MSN -Messi, Suárez y Neymar-, y aprendió de Xavi, Iniesta o Piqué. "Me han sorprendido esas imágenes de Mathieu en la tienda de deportes, pero dice mucho de él", cuenta a Relevo Jordi Masip. El exportero, compartió caseta con el galo. "Era muy buena gente. Siempre me trató muy bien. Era tímido y hablaba poco en el vestuario, pero cuando lo hacía nos reíamos. Era un buen tipo, no se quejó nunca y siempre fue un buen profesional. La verdad es que tengo muy buen recuerdo de él. Era muy buena gente", subraya.

"Es un buen personaje. Compartí vestuario con él, pero no hablaba nada. No hablaba bien el español ni se relacionaba con mucha gente. Me sorprendió que hubiera sido capitán del Valencia. En los entrenos era como muy relajado. Iba bastante a su bola. Era muy tranquilo y nunca daba la sensación que se estuviera jugando el puesto", reconoce a este medio Sergi Samper. Con el canterano coincidió en el Barça. "Lo que es verdad es que era muy buen tío. Nunca ponía ninguna mala cara ni hacía ningún mal gesto, pero nunca llegué a tener una conversación con él", añade.

A pesar de su fama de excéntrico, el galo fue importante en sus dos primeras temporadas en Barcelona. El primer curso marcó cuatro goles, uno de ellos ante el Real Madrid, que sirvió para asegurar la Liga. En su tercer año perdió protagonismo. No acabó bien con Luis Enrique Martínez. "Tal vez trabaja así. No, no sé por qué, creo que así es como funciona Luis Enrique. Fue así para nosotros en el Barça y al final lo pasé mal", explicó el francés en una entrevista en Bein Sports Francia.

"Era él quien me quería y nos reunimos en secreto para acordar el fichaje. Es un entrenador que no te habla mucho y no te da demasiada confianza. Juego mucho con confianza y, a veces, jugaba partidos importantes y luego estaba en el banquillo. Así que, en realidad, necesitaba continuidad. Eso es lo que no entendía. Pero nunca me explicó por qué. Tal vez no tuvo tiempo, no lo sé...", reveló Mathieu sobre su relación con el técnico asturiano.

Tras su paso por Barcelona, el futbolista francés se marchó al Sporting Club de Portugal. Estuvo tres temporadas. Antes de fichar por el Barça por 20 millones de euros, jugó cinco años en el Valencia, donde se convirtió en un jugador capital para los 'ché'. Eso le permitió cumplir su sueño de vestir de azulgrana.