El Celta recupera a más de la mitad de aficionados perdidos en Balaídos
El conjunto vigués arrastra a 14.000 espectadores de media cuando juega como local, un 30% más que la temporada pasada.

El Celta está en el mejor momento de la temporada. Ha sumado diez de los últimos quince puntos en juego, lo que le ha permitido alejarse de la zona de descenso. El estado de ánimo de la plantilla es muy diferente al que tenían a comienzos de noviembre, cuando vivían su peor momento del curso, algo que ha contagiado a la afición. Este año, Balaídos ha recuperado a buena parte de los seguidores perdidos en la pandemia, algo necesario para el club.
Hasta que el COVID detuvo toda la actividad mundial en marzo de 2020, el estadio vigués acogía de media a alrededor de 17.000 personas en cada encuentro que el Celta jugaba como local. Los números, que estaban algo lejos de los que tenía a comienzos de siglo, habían incluso mejorado a las dos campañas anteriores.
La pandemia y una política de cara al abonado muy discutida por la afición provocó un desapego preocupante e hizo que el número de socios cayese de manera alarmante. La pasada campaña, la primera en la que los aficionados pudieron regresar a los estadios, la media de aficionados en Balaídos apenas superó los 10.000 por partido. Con los condicionantes de un estadio en obras y de que en los primeros encuentros de Liga había ciertas restricciones, el dato preocupaba en las oficinas de A Sede.

Por ello contrataron a Raúl Rivas, ya fuera del club pero que se esmeró durante meses en recuperar a buena parte de la masa social extraviada. Y lo consiguió. Los números de este curso son mucho mejores y la media de asistente ya rebasa los 14.000, un 30% más que en la campaña 21/22. Salvo en el duelo ante el Getafe, un lunes lluvioso, el estadio siempre ha tenido más de 13.000 personas dentro, superando ante Real Madrid y Atlético la barrera de los 15.000.
Este incremento, unido a la próxima apertura de la grada de Marcados tras casi dos años en obras, hacen que el club mire con optimismo al verano, donde celebrará su centenario y con el que espera poder atraer todavía más gente.