Álvaro Cervera: "Me gustan Guardiola y Simeone, pero me aburren sus sucedáneos"
El técnico mantiene una charla con Relevo muy sincera sobre sus ideas, que no prepara a sus futbolistas para disfrutar, su salida de Cádiz y Oviedo y su admiración por el Atlético.

Álvaro Cervera (20/09/1965, Malabo, Guinea Ecuatorial) se ha mostrado reticente para hablar públicamente porque cree que los protagonistas son los que están entrenando. Además, su salida del Cádiz, al que llevó de Segunda B a Primera, y del Oviedo, le dejó heridas durante un tiempo.
En Cádiz demostró que a veces la posesión está sobrevalorada y no es necesaria para ganar a Barcelona y Real Madrid, así que rehúye del elitismo, de "ese jugar bien con la pelota". De hecho, en Relevo reconoce que le aburre, reflexiona sobre los errores cometidos y lo que modificaría en un próximo banquillo.
¿En qué momento se encuentra después de las salidas de Cádiz y Oviedo?
Estoy en casa con mis hijos después de la mala experiencia de Oviedo. El primer año salió más o menos bien y en el segundo nos tuvimos que ir muy pronto. Estás un tiempo en el que dudas de todo, hasta de ti mismo. Ahora estoy más tranquilo.
¿Dudó mucho de sí mismo?
Se duda más después de un despido, te preguntas por qué, pero son dudas como en cualquier relación que se rompe y que se van poniendo en su sitio. Piensas mucho en el pasado.
Usted se caracteriza por ser muy directo en el mensaje, sin adornar el discurso de cómo quiere jugar. ¿Cree que eso en algún momento le ha podido perjudicar?
Puede ser, llevo mucho tiempo y a través de la palabra ahora no me voy a hacer otro estereotipo. Quizás si empezase intentaría engañar a mucha gente. Gente allegada a mí me dice que trate de cambiar el discurso. Yo pienso en evolucionar. Ser directo no significa que no debas cambiar, vas viendo el devenir del fútbol donde la gente está más preparada, aunque no me hace cambiar mi forma de pensar, sólo que hay que ir añadiendo cosas. Si no, no serías tú.
¿Existe demasiado elitismo con eso de jugar bien, por no decir mucha tontería con el tema de la posesión?
Hay cierto fútbol que me aburre y gana partidos, y no es que esté mal. Veo partidos que los quito a la mitad, son buenos y los admiro al mismo tiempo. Me aburre el pase atrás, la lentitud, el dar demasiados toques al balón. Aburrir no es que no dé resultados, me gusta la intensidad, una buena defensa, controlar el partido desde ahí y no desde el balón. No imaginé que el portero fuera tan importante, que jugara bien con los pies, pero se está llevando todo eso a un extremo... Guardiola me encanta y Simeone también, pero me aburren los sucedáneos de los dos. Junto a Ancelotti son los mejores, pero no me gustan sus copias.
En el Cádiz demostró que no hace falta tener la posesión para ganar a los grandes.
Tengo una idea y se la explico a los jugadores el primer día. No les pido lo que realmente no pueden hacer por sus características, somos bastantes sencillos en eso. A mí me gustan los buenos jugadores, claro, pero primo el grupo. Leía una entrevista a Pochettino aquí en Relevo en la que decía que fue una equivocación en París no haber jugado para Messi. Es verdad que Messi es Dios, pero normalmente no podemos jugar para uno.
Pero cuanto más tenga el balón, menos le atacan y más se defiende, ¿no?
Cuanto más tengas el balón, cuentas con más posibilidades de hacer daño si es que tienes jugadores con calidad. También cuanto más lo tengas, más opciones hay de que te equivoques. Tenerlo por tenerlo no sirve para nada. Se decía que con los cinco cambios a los entrenadores nos iba a dar más posibilidades, pero a muchos nos da más opciones para equivocarnos.
¿Tal vez ha estado demasiado condicionado por el rival, sin ponderar a su propio equipo?
No es que juegue en función del rival, sino que el lunes ya lo estoy analizando mucho. Cuál es su forma de sacar la pelota, de llegar a portería contraria, la combinación que mejor les sale…. En función de eso, hacemos nuestras cosas. Es muy importante eliminar las cualidades del rival. Hay entrenadores que no se fijan en el rival, y me parece perfecto, tienen sus habilidades. Yo vengo desde abajo y siempre me fijo en el rival para saber dónde hacerle daño. En cualquier cuestión de la vida, saber la táctica de tu rival es bueno para poder atacarle.
¿En Cádiz se le acabó pidiendo hacer un fútbol más ofensivo y alegre?
No lo recuerdo así. En Cádiz fueron casi siete años, allí la gente vio al equipo de Segunda B a Primera de una forma. Quizás algunos pensaron que luego teníamos que jugar diferente. A mí no me exigieron eso, en Oviedo quizás sí. Ahí sí llegué en una situación para salvar al equipo y al año siguiente, sí, tal vez no lo entendí bien y no fui capaz.
¿Qué fue lo que más le dolió de Cádiz?
De Cádiz no me ha dolido nada, todos tenemos un equipo de nacimiento. Yo me hice del equipo de mi vida de mayor, entrenándolo: el Cádiz. Me hubiese quedado allí toda la vida. Luego en las salidas son las personas, no es el club, y se comportan tal y como son en la vida.
¿Se enteró por la prensa de su despido?
Fue algo raro, de tener una relación diaria, de repente un lunes noche te llaman y te dicen que te pueden cesar, llamas y no te lo cogen y ya sabes que algo va a pasar. El comportamiento de algunas personas en según qué situaciones tú no lo puedes digerir.
¿Se siente ansioso por entrenar?
No, ahora me planifico el fin de semana porque los lunes ya sé los partidos que voy a querer ver el fin de semana y veo algunos que sé que no me van a gustar pero que voy a aprender.
Usted dijo en una entrevista aquello de «nosotros no hacemos lo que queremos en el campo». Explíqueme esa reflexión, por favor.
Salvo algunos equipos, pocos y de élite, nadie hace lo que quiere en el campo. De las cosas que tú planteas, luego te salen dos o tres. Normalmente no haces lo que quieres, sino lo que puedes. Salvo los grandes que llevan el partido hacia donde quieren.
Muchos defienden que lo importante es que el futbolista disfrute. ¿Uno de su equipo lo hace?
No, ni lo preparo para que disfrute. El jugador rinde más cuando disfruta, que le gusta tener la pelota y le vas a sacar más rendimiento. También conozco a jugadores que disfrutan robándolo, incomodando al rival, haciendo pocos toques para llegar a la portería contraria. Hay de todo. Los partidos de Guardiola los veo todos y parece que yo soy lo contrario y no. Lo que pasa que también me gusta ver cómo sufre contra un equipo como el Liverpool, un equipo de empuje, de presión. Están a años luz de mí, pero estoy más cerca que el de Klopp. Para llegar a lo de Guardiola es el número uno, pero todos los entrenadores ganan y pierden.
¿El vestuario del Cádiz estaba mucho con usted, verdad?
Estuve mucho tiempo y creo que sí hicimos una familia, lo recuerdo así. Con los que empezamos al principio, los Garrido, José Mari, Salvi, Álex, etc. Siempre quedarán en mi recuerdo. Cuando vuelves a reencontrarte con ellos es como ver a un familiar o un amigo del alma.
¿Cuál es el jugador más 'listo' que ha entrenado?
Jon Ander Garrido. Jugando piensa como persona y no como futbolista, sabe sus limitaciones y ha llegado a jugar en Primera. Eso requiere una inteligencia fuera de lo normal.
¿Le dolió más la salida del Oviedo?
Las salidas siempre son tristes. En Cádiz llevaba mucho tiempo y era un cambio de vida. Como persona dolieron las dos.
¿Qué partidos le apetece ver este fin de semana?
Normalmente veo al Cádiz por cariño. Lo veo como aficionado. Al que más me gusta ver es al Atlético. Al Girona lo he visto algún partido porque me interesa saber cómo se da esa racha de resultados. Lo que propone Míchel este año le está saliendo extraordinariamente bien. Hay cosas que no me gustan tanto, pero que le salen bien. Tiene un buen trato de balón, con un delantero bueno. Me llama mucho la atención y me hace pensar lo de Daley Blind como central zurdo, que suele liarlas de traca, pero tiene un buen trato de balón, pero no es muy contundente. Una de las claves creo que es que para proponer un juego de balón lo lleva a todos los extremos del campo, no sólo con los mediocentros o con el mediapunta. Me gustaba enfrentarme a esos equipos que, si los estudias bien, se les puede hacer daño. Aunque también te lo hacen ellos a ti.
¿Cómo ve al FC. Barcelona?
Creo que por historia está obligado a jugar de una manera muy característica, y necesitas una siempre de futbolistas muy concretos para ello. En este tipo de equipos, que te falte uno o dos no es tan importante como en otros. El Madrid por su forma de jugar parece que no lo nota.
¿Por qué al Madrid le afectan menos las bajas?
Porque juega a otra cosa. Es capaz de jugar a todo. Es un equipo más completo, capaces de defender en su propio campo y luego te atacan con posesiones largas. Hay pocos equipos que sepan hacer eso. El que más me gusta es el Atlético de Madrid. Parece que el año pasado Simeone estaba en duda y ha vuelto a encontrar una forma en la que no son cinco defensas, sino que al menos uno es extremo, Griezmann que no es ni mediocentro ni delantero, Saúl lo ha traído y está siendo de titular, a Koke le ha dado otra vida… Es el equipo del que más cosas aprendo. Voy a mirar mucho el Villarreal porque Marcelino es un entrenador muy top y le va a dar un toque especial con el que van a ganar, no sé qué es.
Después de lo aprendido, ¿qué le gustaría aplicar en un proyecto?
Lo primero es tener jugadores que cuando le explicas lo que quieres hacer, tengan miradas cristalinas. Que les guste lo que propones es lo principal. Sí es verdad que hay que darle una vuelta de tuerca a lo que hemos hecho y que cuando los jugadores quieran algo más, ser capaces de dárselo. Añadir algunas cosas según lo que te pide el equipo, sin olvidar que lo que quieren es ganar. Buscar la manera de que cuando no ganas, tener más mecanismos para volver a conseguirlo. La gestión de grupo me ha ido siempre fenomenal, aunque me voy haciendo mayor. Siempre que haya buenas personas de por medio, hay buena sintonía entre las dos partes. Reconozco que me era más fácil antes. Anoche hablaba con un jugador que tuve, lo hacíamos de forma fluida. Me es más complicada mantenerla con un chaval de 20 años, con el que es más difícil hablar de ciertas cosas que no sea fútbol.
Cuando le contacté en septiembre para realizar esta entrevista no quería hablar.
Yo estoy ahora en un segundo o tercer plano, no soy protagonista, no es nuestro momento, sino el de los que están entrenando. Espero que la próxima entrevista sea cuando esté en algún equipo.