El colchón del Sevilla ante la crisis: Lukebakio, Badé y la cantera

El Sevilla celebrará dentro de ocho días otra Junta General Extraordinaria de accionistas, en la que se volverá a dilucidar su futuro. No será una asamblea que se centre en los aspectos económicos -el orden del día versa sobre el consejo y su composición-, pero seguro que esas dificultades que atraviesa la entidad salen a relucir en algún momento, por más que los dirigentes sí manejen un colchón ante esa crisis.

Nombres como los de Dodi Lukebakio, el mejor futbolista del Sevilla en esta temporada, Loïc Badé, por quien la Roma o el Aston Villa ya apretaron en anteriores mercados, o el de canteranos como Juanlu -su renovación se encuentra muy avanzada-, José Ángel Carmona, Kike Salas e Isaac Romero, asentados en el primer equipo, aparecen como posibles soluciones para cuadrar números antes del 30 de junio. La valoración de páginas especializadas como Transfermarkt, atendiendo a su última actualización, cifra en casi 175 millones de euros el valor de la plantilla del Sevilla, con la mitad de esos números recogidos en esos cinco futbolistas.

La mayor cotización corresponde a Badé, con 25 millones de euros, un precio de mercado en consonancia con lo que el Aston Villa puso sobre la mesa en enero; el siguiente sería Lukebakio, con 20 millones, que ha recuperado casi el doble de valor tras una temporada en la que se ha convertido en el mejor goleador del Sevilla. Por el belga también llegaron cantos de sirena de Arabia Saudí en enero, que finalmente no cristalizaron, pero que lo colocan también como un jugador con cartel para una venta milonaria.

Plusvalías completas dejarían los canteranos, que se han asentado como jugadores principales en los planes de Xavier García Pimienta, en otra labor importante del técnico en Nervión. El mejor valorado es Juanlu, con 12 millones de cotización, y que se encuentra a punto de cerrar una renovación que tampoco cerrará las puertas de una posible salida, aunque sí que se produjera en mejores condiciones para el Sevilla. También aparece José Ángel Carmona, por quien casi nadie apostaba en verano y que se ha asentado como lateral diestro, que fue incluido en la prelista de Luis de la Fuente y tiene un valor de 10 millones de euros. También tiene mercado Isaac Romero, tasado en 15 millones de euros pese a que su rendimiento ha bajado en este tramo de la temporada, o Kike Salas, asentado en el once titular y habitual de la Sub-21, a quien sólo le perjudica esa investigación aún sin cerrar del tema de las apuestas.

Ya en el balance contable presentado el pasado mes de enero, los dirigentes recogieron la necesidad de contar con 34 millones de euros de beneficios por traspasos para maquillar las pérdidas con las que cerrará el curso. El presupuesto de la entidad para la 24-25 ya preveía casi 20 millones en negativo contando con esas plusvalías en las ventas, de ahí que la dirección deportiva y los dirigentes tengan claro que primero habrá que buscar un traspaso antes de acudir al mercado.

El panorama también podría encontrar una ayuda en una clasificación europea, una cuestión que no se recogía en el presupuesto, pero que aún es real cuando faltan diez jornadas para acabar el campeonato. Aunque la derrota ante el Athletic ha supuesto un varapalo a esa euforia que generó el triunfo en San Sebastián, el Sevilla de García Pimienta continúa en la pelea europea, cuya clasificación podría suponer unos ingresos económicos no previstos que ayudasen a planificar el futuro.