Courtois, que forzó para jugar contra Suecia, harto de las críticas en Bélgica
Los periódicos de su país natal insinuaron que se borró del último amistoso. Llegó a la concentración sobrecargado.

Thibaut Courtois está harto de la prensa belga. Esta semana, el portero del Real Madrid ha tenido que hacer frente a innumerables críticas por abandonar la concentración de la selección de Bélgica y volver a Madrid tras la disputa del partido de clasificación para la Eurocopa 2024 ante Suecia. Entonces, los medios de comunicación de su país natal insinuaron que se había borrado del amistoso contra Alemania, algo que le ha provocado un enorme malestar.
El belga ya forzó para defender la camiseta de su país en esta ventana internacional. Acumulaba una sobrecarga y decidió viajar pese a eso, para iniciar esta nueva etapa con Tedesco a los mandos sobre el terreno de juego. De hecho, fue titular y cerró la portería durante los 90 minutos. Tras la disputa del encuentro, la federación belga anunció que sufría "una pequeña distensión en el aductor" y, por ello, volvió a Madrid.
La realidad es que Courtois incluso ya tenía pactado con la federación regresar antes de tiempo. Es más, no merecía la pena forzar por un amistoso, sin ninguna consecuencia deportiva aun en la derrota. La sobrecarga, la acumulación de minutos y esa dolencia anunciada conllevaron lo ya previsto: el belga regresó a Madrid y comenzó a ponerse a tono para la disputa de la jornada liguera ante el Valladolid.
Pero la prensa belga no compartió la versión de los hechos y tendió a acusarle de no estar plenamente comprometido con el equipo nacional. De hecho, en un programa bromearon con la portada de la revista Vanity Fair que protagonizó con su pareja, por la que deslizaban que no podía acudir al partido. La realidad es que esas fotografías se habían realizado casi un mes antes, previas a la disputa de la eliminatoria frente al Liverpool.
El compromiso del portero es total. Pese a su sobrecarga, quiso acudir a la llamada de su país e ir de la mano con Tedesco en el primer duelo en busca del billete de clasificación para el Mundial. Además, ante Suecia, un partido decisivo y de los más complejos de su grupo. También mantiene una lealtad total con el Real Madrid, con el que no quiere perderse un minuto de aquí a que acabe la campaña. Por ello, tal y como estaba previsto, regresó, para recuperarse de sus problemas físicos y estar en plenitud para aportar su granito de arena por tres puntos que permitan a los blancos mantener alguna opción remota de conquistar el campeonato liguero.
Una práctica habitual
El sentir de Thibaut Courtois con los medios de comunicación de su país no es único en el vestuario belga. Otros muchos jugadores belgas han optado por no hablar con la prensa local, al ocurrir en más ocasiones episodios de este calibre. Pese a que continúan defendiendo la camiseta de Bélgica con orgullo, las críticas, en ocasiones injustificadas, les han llevado a estos límites. El último caso es el del portero del Real Madrid, que hizo todo lo posible para acudir a la concentración y jugar contra Suecia y se ha encontrado de rebote entre una maraña de comentarios negativos.