Los días más oscuros de Danilo en Real Madrid: "Escribí en mi diario: es hora de dejar el fútbol; tenía 24 años"

Danilo todavía se acuerda de su etapa en el Real Madrid. No para bien, pero se acuerda: entre 2015 y 2017, el brasileño formó parte de la primera plantilla del conjunto blanco. La experiencia, sin embargo, no fue positiva. Ahora, a punto de jugar una Copa América 2024 en la que será el capitán de la selección de Brasil, Danilo ha recordado su trayectoria en The Players' Tribune. "Escucha, soy humano. No siempre he estado en mi mejor momento. Para ser aún más sincero, durante mi primera temporada en el Real Madrid estuve deprimido", confiesa.

El lateral brasileño no fue capaz de cumplir con las expectativas que generó su fichaje desde el Oporto. "Estaba perdido, sintiéndome inútil. En el campo no podía hacer un pase de cinco metros. Fuera del campo era como si no pudiera ni moverme", recuerda sobre esos meses en los que fue titular de forma regular por las lesiones de Carvajal. En su primera temporada, Danilo jugó 31 partidos, aunque apenas alcanzó los 25 en la segunda.

"No me veía como Baianinho, el hijo de Baiano (así llaman a mi papá). Me veía como Danilo, el 'fichaje de 31 millones de euros', el defensa más caro que el Real Madrid había comprado en ese momento", explica Danilo, que había estado cuatro años en el Oporto. "Mi pasión por el fútbol desapareció y no veía salida. Quería volver a mi casa en Brasil y no volver a jugar al fútbol nunca más".

De entre sus recuerdos más negativos hay uno que sobresale por encima de todos. En octubre de 2016, el Real Madrid se enfrentó al Alavés. Y así lo recuerda Danilo en sus propias palabras: "Theo Hernández me robó el balón y centró para que Deyverson marcara. Aún así ganamos 4-1, pero fue un error que no se puede cometer en el Real Madrid. Nunca olvidaré llegar a casa esa noche y no poder dormir. Escribí en mi diario: creo que es hora de dejar el fútbol. Yo tenía 24 años", reconoce.

En más de una ocasión, el Santiago Bernabéu reaccionó a sus errores con pitos, con murmullos, con dudas. "¿Qué parte de mí estaba sintiendo realmente la presión? ¿El chico que había sido una revelación como lateral derecho en el Porto? ¿O el chico de Bicas que de repente fichó por el equipo más grande del mundo? La respuesta fue clara. Siempre serás el niño que llevas dentro".

En sus peores momentos apareció un compañero de equipo. Otro brasileño de la primera plantilla, Casemiro, que se interesó: "No le dije a nadie lo que estaba sintiendo. Casemiro intentó ayudarme, pero me "tragué el sapo", como se dice. Y siguió haciéndose más grande. Después de unos meses de sufrimiento, comencé a ver a un psicólogo y él realmente salvó mi carrera", reconoce.

Dos años después de llegar a Madrid, Danilo fue vendido al Manchester City por una cantidad muy similar a la que le compraron. En la Premier League sólo estuvo dos años porque los citizens acordaron un intercambio por Joao Cancelo, por lo que Danilo fichó por la Juventus en 2019, donde es uno de los capitanes.

En la extensa carta de Danilo, también tuvo espacio para valorar la nueva generación de jóvenes de la selección brasileña. Entre todos ellos, Endrick es el alumno predilecto, que se incorporará al Real Madrid en verano. "Creo que todos podríamos aprender algo de los más jóvenes, como él. Mira lo que hizo contra Inglaterra. Casi no sabía cómo hablarle mientras desayunábamos en el hotel. Me sentí como su tío".

En la previa de aquel partido, Danilo sabía que su joven compañero estaba dispuesto a dar el salto. Pero cuando marcó ni siquiera se acercó a él. Se lo impidió el cansancio y la necesidad de echar un trago de agua al banquillo. Pero Endrick quiso reconocer a su capitán: "Vino a abrazarme como un niño divirtiéndose en el parque". Danilo decidió entonces darle una lección: "Después del partido, como capitán, tuve que ser honesto. Le dije: 'Endrick, estuviste increíble, pero deberías haber marcado el segundo gol, hombre". Un agobiado delantero respondió: "Danilo, ya ni siquiera sabía lo que hacía". Ese discurso del jugador de la Juventus representaba el espíritu que ahora quiere instaurar en el equipo nacional.

Tanto que hasta sorprendió a sus propios compañeros, que, al abandonar el césped, le preguntaron: "¿No crees que fuiste demasiado agresivo? Fue simplemente un amistoso". Danilo incluso se enfadó, respondió que no con rotundidad y expuso cuál sería desde entonces su mentalidad: "Mira cómo juegan otros equipos contra nosotros, cómo atacan con dureza a nuestros atacantes. Nunca hay indulgencia. Esta es una lección difícil que creo que hemos aprendido".