El Sevilla y Diego Alonso se aferran al derbi. La necesidad de escalar en LaLiga y la visita del Betis llevaron al entrenador a focalizar las energías en el partido del domingo, dejando a un lado el duelo de Liga de Campeones ante el Arsenal. Un 'all in' en toda regla, atendiendo a ese lenguaje del mundo del juego. El encuentro en el Emirates Stadium, con apenas un disparo a puerta en el tiempo de prolongación, ya lo dice todo, pero el técnico tenía muy claro que iba a reservar a gran parte de sus jugadores principales pensando en LaLiga. Ni el deseo de los dirigentes o del propio Víctor Orta de competir al máximo en la Champions pudieron ante el baño de realidad que supone el momento actual del equipo.
Diego Alonso, sobre el derbi.
Jesús Navas, Soumaré -que se retiró lesionado-, Rakitic, Ocampos, Lukebakio, Mariano… Jugadores que fueron titulares el pasado fin de semana y que se encontraban en la convocatoria -Nyland y Acuña se quedaron en Sevilla por molestias- partieron desde el banquillo ante el Arsenal. El objetivo de pasar a octavos de Champions se reserva para las dos últimas jornadas ante PSV y Lens, donde el Sevilla apurará sus opciones ganando los dos encuentros... si antes ha enderezado el rumbo en el torneo liguero.
"Debe ser un punto de inflexión", apuntó el técnico sevillista sobre el partido ante el Betis. Los más de 1.700 aficionados presentes en Londres ya ofrecieron su veredicto nada más terminar el partido. O el equipo cambia su rendimiento por completo o las miradas pasarán del banquillo para centrarse en el palco. Y no sólo para su presidente, José Castro, que hasta ahora se ha llevado todos los cánticos por su responsabilidad como máximo dirigente, pese a que su intervención en el día a día del club sea cada vez menos relevante.
El despido de José Luis Mendilibar, atendiendo a los resultados como justificación, no ha servido de momento para revertir la situación. "Queremos hacer un proyecto con Diego Alonso", apuntó el vicepresidente, José María del Nido Carrasco, tras el partido, como horas antes había realizado el propio Orta con la comparación con Xabi Alonso. Pero la retórica se debe transformar en realidades sobre el césped, que el Sevilla se encuentra, hoy por hoy, muy lejos de todos sus objetivos deportivos.
La tregua de la grada sólo llegará a priori por el rival que acude al Ramón Sánchez-Pizjuán. Si algo une al sevillismo en estos duros momentos es el deseo de concentrar fuerzas para doblegar al Betis. Ya ocurrió en tiempos recientes, cuando hasta un más que discutido Julen Lopetegui acabó vitoreado tras vencer un partido de rivalidad. No le valió de demasiado al vasco, despedido meses después, pero ese mensaje ha sido captado también por Diego Alonso, que ha visto en el derbi su gran oportunidad para ganar tiempo.
Para el trascendental duelo del domingo, el cuerpo técnico sevillista está muy pendiente de Sergio Ramos, que se ha perdido los tres últimos partidos por las molestias en el sóleo, pero que está intentando recuperarse a tiempo. Quiere el camero disfrutar sobre el terreno de juego de su primer derbi tras el regreso a Nervión, de ahí que todavía no se descarte su presencia por más que la zona de la dolencia recomiende un paréntesis hasta ponerse al 100%. En el Sevilla nadie quiere perderse la cita ante el Betis, esa apuesta máxima para este nuevo proyecto en ciernes.
