REAL MADRID

La diferencia con el Barça es el "compromiso defensivo"

El Madrid volvió a hacer aguas en Girona. Esta temporada recibe casi un gol por partido; los culés, uno cada tres.

Militao jugó uno de sus peores partidos con el Madrid en Girona. /REUTERS
Militao jugó uno de sus peores partidos con el Madrid en Girona. REUTERS
Manuel Amor

Manuel Amor

"Entre el Barça y nosotros, a nivel de calidad, no hay 11 puntos de diferencia. Lo hemos demostrado". Ancelotti lanzó el mensaje antes de visitar Montilivi y su equipo le dejó en evidencia. Los cuatro goles de Taty Castellanos mostraron la flaqueza defensiva de un Madrid sin el rigor en el día a día que demuestra en las grandes noches. "El compromiso atrás es demasiado importante para tener éxito. Si no lo tenemos, este equipo pasa dificultades para ganar los partidos; si lo tenemos, los ganamos todos. Esa es la clave", resumió el italiano tras el choque.

Ancelotti y la clave del Madrid, el compromiso colectivo defensivo. EDICIÓN DE VÍDEO: SAMUEL SUBIELA

Su Madrid cimentó el doblete del año pasado en la seguridad y en unos registros defensivos impecables. A estas alturas de la temporada pasada, los blancos habían encajado 26 goles en 31 partidos (0,83 por encuentro) y el Barça 32 (más de uno por choque). Este curso los de Carletto no han empeorado demasiado las cifras (han recibido 28, solo dos más), pero se han topado con el crecimiento de un equipo azulgrana con números de récord pese al tropiezo de Vallecas: ¡11 tantos en contra en 30 jornadas! Si terminan LaLiga con menos de 18 se convertirán en el mejor conjunto defensivo de la historia de la competición. Y ahí, a pesar del parejo nivel de ambas plantillas, están los 11 puntos de diferencia.

Entre líneas, el italiano achacó a su equipo su menor nivel de concentración cuando el duelo, por la entidad del rival o la escasa trascendencia clasificatoria, no motiva lo suficiente a sus pupilos. Pasó en Girona, pero también ante el Villarreal (2-3 en el Bernabéu), cuando los blancos venían de golear al Barça en Copa; en Vallecas (3-2); o en Leipzig (3-2). Estas dos últimas citas enfadaron mucho a Ancelotti, que llegó a tirar de métricas (mostró al vestuario que habían recuperado menos balones, ganado menos disputas y cometido menos faltas) para repartir algún toque de atención tras las derrotas.

Modric, Kroos y Militao se lamentan en Montilivi.  REUTERS
Modric, Kroos y Militao se lamentan en Montilivi. REUTERS

El "compromiso" del que tanto habla el italiano es lo que exige a sus pupilos para no alejarse de los culés a cantidades vergonzantes. Hasta el Atlético del Cholo, con más dudas que certezas entre agosto y febrero, ha encajado seis goles menos que el Madrid. La última Liga en la que los madridistas presentaron cifras tan pobres a nivel defensivo fue la 18-19, con Lopetegui, Solari y Zidane en el banquillo. En la jornada 31 habían recibido ya 37 tantos… y al final acabaron a 19 puntos del Barça y a ocho del Atleti. A pesar de que el foco apunta a la final de Copa y a la Champions, en la caseta existe la sensación de que la situación no puede desmadrarse hasta llegar a esa distancia.

Los motivos de la caída

Cuando el escenario aprieta, como en la doble cita europea ante Liverpool y Chelsea, los blancos sí responden. A los blues los dejaron a cero en los dos partidos y contra los de Klopp también mantuvieron la portería imbatida en el Bernabéu, como en la semifinal copera que remontaron contra el Barça. No es casualidad que la mejor versión de los Carvajal, Militao y compañía haya llegado cuando se empiezan a oler los títulos. Y tampoco que el nivel baje (el brasileño jugó uno de sus peores partidos como madridista en Girona) cuando se siente que hay poco en juego.

Además, existen varios factores que confluyen para que el Madrid rinda peor, al menos en LaLiga, cuando se trata de defender. Courtois ha vuelto a su versión estelar, pero en el arranque de temporada sus estadísticas revelaban que no paraba tanto ni de forma tan solvente como la temporada anterior. Lógico, teniendo en cuenta que su 21-22 fue una de las mejores campañas de un portero en lo que va de siglo y que algunos dolores no le permitían estar al 100% físicamente. Este curso se ha perdido hasta siete partidos por lesión… y Lunin no es el belga. El ucraniano sufrió en Girona y no termina de convencer al cuerpo técnico.

Lunin, en Girona.  EFE
Lunin, en Girona. EFE

Además de ello, muchos de los tantos en contra de los blancos han venido de graves errores de colocación o lectura, por fallos en acciones a balón parado o por desconexiones en el seguimiento de los pares. Todo conduce al "compromiso" en el que tanto insiste Carletto. Los cuatro integrantes de la zaga apenas se repiten, y eso también pesa. Mendy ha faltado a la mitad de los encuentros, Rüdiger se adaptó tarde, Alaba bajó su nivel, Camavinga erró en sus inicios como lateral… Todos los problemas individuales y colectivos se acentúan cuando el plan del fin de semana no apetece demasiado. Cuando la fiesta es de gala, en cambio, nadie falla.