El Espanyol acude a la justicia ordinaria por la omisión de imágenes en el gol fantasma de Griezmann

El RCD Espanyol ha decidido emprender acciones legales y acudir a la justicia ordinaria por el gol de Antoine Griezmann en el partido que los blanquiazules empataron a tres ante el Atlético de Madrid en el final de la pasada temporada. Lo hace tras el auto de los juzgados nº 32 y nº 47 de Madrid de este miércoles en el que se señalaba que existían imágenes distintas de las que se sirvió el VAR para confirmar el tanto que hacían dudar sobre su legalidad. "El árbitro VAR ofreció unas imágenes, pero había otras que hacían dudar sobre si el balón había entrado o no por completo en la portería", aseguró el juez.

"Entendemos que, ante la evidencia aportada de la omisión de imágenes en una jugada determinante para ese encuentro y para el desenlace clasificatorio de la temporada, es nuestro derecho y obligación defender los intereses de RCD Espanyol hasta las últimas consecuencias en este caso en el ámbito judicial", anuncia el club.

Esta fue una de las jugadas que los juzgados de Madrid citaban como determinantes para desestimar las denuncias presentadas por los exárbitros que fueron apartados de sus funciones en el final del curso pasado. De hecho, José Luis González González, árbitro VAR del Espanyol - Atlético de la 36ª jornada, no fue designado para ninguna de las dos últimas fechas del campeonato, a semejanza de Ignacio Iglesias Villanueva, VAR del Valencia - Real Madrid, encuentro en el que fue expulsado Vinicius en una acción donde el árbitro de campo, De Burgos Bengoetxea, no vio la secuencia al completo.

"Hoy sabemos que lo que sucedió en ese encuentro (la concesión de un gol al Atlético de Madrid que nunca debió subir al marcador) va mucho más allá de errores humanos entendibles en el ámbito deportivo", señala la entidad perica, que sostiene que podría haber llegado con opciones de permanencia a la última jornada.

En aquel encuentro del cierre del campeonato ante el Almería, los jugadores blanquiazules saltaron con camisetas negras y el público también protestó por ello. Lo hizo antes y durante el desarrollo del mismo, con lanzamiento de pelotas de tenis y balones de playa al césped, lo que obligó a interrumpir el partido durante unos minutos. Ahora, más de medio año después, el Espanyol va un paso más allá después de que un juez haya reconocido que las imágenes ofrecen dudas con el objetivo de "solicitar la reparación del daño causado".