REAL MADRID

La Fábrica respira: triple 'manita', la vuelta de Pol Fortuny y la visita de Fede Valverde

Castilla, Real Madrid C y Juvenil A golearon este fin de semana en Valdebebas.

Pol Fortuny, con el Real Madrid./REAL MADRID
Pol Fortuny, con el Real Madrid. REAL MADRID
Rodra P

Rodra P

No está siendo un curso sencillo en la cantera del Real Madrid. Tras una temporada pasada ilusionante, en Valdebebas no se siente lo mismo este año. Casos judiciales, problemas de comportamiento y falta de brillo y resultados. Además, el Atlético de Madrid les supera en la tabla de filiales, en el Juvenil A, Cadete A, Infantil A y Alevín A. Este fin de semana fue un respiro para los blancos.

Una triple 'manita' en La Fábrica. El Castilla de Raúl goleó 5-1 al Murcia en casa, el Juvenil A de Arbeloa 5-0 (con gran partido de Iker Bravo) y el Real Madrid C de Pau Quesada, 5-1. Tres victorias que elevan a la cantera merengue, dirigida por Manu Fernández, y ya con Solari como director de fútbol. Las tres goleadas no fueron la mayor alegría que se vivió en Valdebebas esta jornada. Fueron los regresos de Pol Fortuny y Joan Mascaró.

Pol Fortuny (2005) volvió a competir con el Juvenil A tras 328 días de baja. Sufrió una grave lesión de rodilla la pasada campaña, y pudo retornar al verde en un momento emocionante. Arbeloa le devolvió al césped con el brazalete de capitán, y podrá ayudar a los suyos en el tramo decisivo de curso, con la Youth League y la Liga en juego (a siete puntos del Atleti).

Pol es uno de los mayores talentos de la cantera blanca, y ya lo demostró el último año en el Juvenil de Nico Paz, Gonzalo o Manuel Ángel. Este sábado también volvió Joan Mascaró, que enlazaba varios meses de baja, uno de los jugadores más queridos del vestuario de Arbeloa.

Antes del final del partido del Juvenil A contra el Adarve, una visita inesperada. La de Fede Valverde, que tras terminar el entrenamiento previo a su duelo contra el Sevilla, se dejó ver por el campo 7 de Valdebebas, siguiendo de cerca el triunfo de los mirlos blancos.

Las buenas noticias se alargaron también con la vuelta de Enzo Alves, el hijo de Marcelo, con el Cadete B del Real Madrid. El delantero blanco ha superado una lesión de crecimiento, causada por una pequeña fractura por estrés en la espalda, que no le había dejado competir a su nivel en lo que llevábamos de campaña. En diciembre decidió parar, y regresó el pasado fin de semana contra el Santa Ana.

Quedan los meses clave en La Fábrica. Y todo está en el aire. Las decisiones se toman en abril y mayo, con muchos fichajes sobre la mesa y el baile de entrenadores y ojeadores de cada año. También en las posiciones de mayor peso de la cantera.