REAL MADRID

Fran García deberá salir: Ancelotti insiste en renovar a Mendy y pelear por Davies (u otro lateral)

El manchego asimila que, salvo giro inesperado, tendrá que buscar equipo. Hasta Miguel Gutiérrez le adelanta en las quinielas.

Fran García celebra junto a Ferland Mendy la histórica victoria ante el City. /GETTY
Fran García celebra junto a Ferland Mendy la histórica victoria ante el City. GETTY
Alfredo Matilla

Alfredo Matilla

Jugar en el Real Madrid está cada vez más caro y complicado. Una nueva prueba de esta realidad es que, pese a que Fran García ha dado un buen nivel cuando ha participado, que es internacional y que firmó un contrato hasta 2027 (con un salario de los más bajos de la plantilla), lo va a tener muy difícil para continuar vestido de blanco la próxima temporada. El lateral ya ha asimilado que el club tiene otros planes para esa demarcación y que, salvo giro inesperado porque no fructifiquen las operaciones que hay en marcha, va a tener que buscarse una salida si no quiere pasarse otro año sin protagonismo. Anoche, ante el Alavés en casa, con LaLiga en el bolsillo y pese a la goleada (5-0), no disputó de nuevo ni un solo minuto.

Las cosas han cambiado mucho en la demarcación que ocupa. Empezando porque Ferland Mendy le ha dado la vuelta a su situación como un calcetín y ahora ya nadie se atreve a descartar su continuidad. El francés tiene contrato hasta 2025 y el club le había puesto en el mercado sin disimulo en los dos últimos veranos empujado por sus continuos problemas físicos. Sin embargo, el hecho de que haya acabado con ese lastre debido a sus nuevas rutinas de entrenamiento y descanso, y que haya vuelto a ser clave en esta brillante temporada, ha llevado a la entidad a replantearse seriamente su renovación. Después de la final de Champions hay otra conversación pendiente con su agencia de representación, Fair Sport MNG, con el objetivo de tomar una decisión antes de la Eurocopa.

Carlo Ancelotti ha sido siempre su máximo defensor. De hecho, cada vez que alguien de la dirección deportiva pregunta al italiano por el defensa, siempre dice lo mismo: "Yo le renovaría ahora mismo porque es el mejor lateral izquierdo defensivo del mundo". Las estadísticas hablan por si solas en favor de un futbolista que ya pidió en su día alargar su contrato y que ahora estaría encantado de que sus deseos se cumplan para seguir junto a sus amigos Tchouameni, Camavinga y Mbappé.

Más allá de haber sido titular en la última final de Champions ganada al Liverpool en París en 2022 (1-0) y de que vaya a volver a jugar de inicio en Wembley, Carletto ha contado siempre con él en las grandes citas y recuerda en Valdebebas que si le dejan marchar habrá que hacer un desembolso mayúsculo para sustituirle. Hay muy pocos jugadores con su nivel en Europa y no quedaría otra que rascarse el bolsillo.

A Fran García, mientras, le ha dejado por momentos como tercera opción: cuando ha faltado Mendy, apostó por reconvertir a Camavinga. Y lo hizo por dos motivos principalmente: para solucionar la sobrepoblación de excelentes centrocampistas aprovechando la polivalencia y porque en el Metropolitano, en la única derrota de todo el curso ante el Atlético (3-1) en septiembre, Ancelotti comprobó que Fran es un magnífico futbolista en ataque pero que sufre más que otros defendiendo. Suma 1.596 minutos distribuidos en 30 encuentros y su participación ha ido claramente de más a menos. El staff técnico, eso sí, está encantado con su progresión, humildad, trabajo y con el hecho de que nunca pone mala cara y es un ejemplar compañero. Hasta el punto de que si se quedara no sería ningún problema.

Se avecina mucho movimiento

A falta de saber qué hace el Madrid con Mendy, porque hay quien sigue pensando dentro del club que se va a revalorizar en la Eurocopa y que llegarán buenas ofertas que no se deberían rechazar por un futbolista que en junio cumplirá 29 años, hay otro deseo del cuerpo técnico que condena indirectamente a Fran. Ancelotti quiere en ese puesto a otro jugador de las máximas garantías, y su preferido era, es y seguirá siendo Alphonso Davies. Por mucho que pronto regrese Alaba, que por otra parte sólo quiere ser central y así lo hizo saber, Carlo tiene claro que ahí en el lateral izquierdo es una las pocas zonas del campo donde existe margen de mejora.

El jugador del Bayern está en las oraciones del técnico desde hace mucho tiempo y ahora, que sabe que el acuerdo entre el Madrid y el canadiense está prácticamente cerrado desde hace tiempo, no quiere aflojar y conformarse con otra alternativa por el hecho de que Rummenigge y compañía se pongan duros. El problema es el precio del traspaso que propone el Bayern por un futbolista que acaba contrato en Múnich en 2025, alrededor de los 60-70 millones de euros, así que si algo alegró a Ancelotti del duelo de semifinales, más allá de otra vibrante remontada para la historia, es que Davies se saliera -golazo incluido- a ojos de todo el madridismo y de Florentino Pérez. El esfuerzo, quedó claro, merecería mucho la pena. Y la inversión no sería nada arriesgada con la de novias que tiene un jugador con tal futuro (23 años).

Con Miguel Gutiérrez en la recámara

Ante este panorama, que Fran García palpa a diario, quedan dos soluciones: que a sus 24 años salga cedido para poder reivindicarse y demostrar su valía o que sea traspasado y que el club blanco se reserve una opción de compra. Lo que tiene claro es que necesita jugar y, ya de paso, aprovechar su gran caché para ganar un sueldo más jugoso, sobre todo si elige salir al extranjero. Si ahora se va a quedar casi seguro fuera de la Eurocopa, después de haber sido convocado por De la Fuente para la fase de clasificación, es porque ha desaparecido de las alineaciones del Real Madrid.

De igual manera también ha perdido posiciones en los gustos de buena parte de la dirección deportiva. Más de un responsable de esta parcela ve más futuro a medio plazo en el Madrid a Miguel Gutiérrez. El Madrid tiene una opción de compra de 8 millones de euros por la revelación del Girona y no se descarta ejecutarla ya y dejarle cedido la próxima campaña en el equipo de Míchel para que coja experiencia en la Champions. Donde sí hay unanimidad es en la necesidad de que la plantilla no pierda el toque español. Si empiezan a salir jugadores nacionales, como Nacho y Ceballos, hay que valorar que se mantengan los que hay o lleguen otros nuevos. Ese es un clavo ardiendo al que se agarra Fran y el que da esperanzas a Miguel Gutiérrez.