Un hotel, una fotografía y una llamada crucial: la historia del no fichaje de David López por el Betis

La historia de David López es una de aquellas aventuras poco comunes en el mundo del fútbol. Viajamos al verano de 2016, a finales de agosto y a pocos días de cerrarse el mercado de fichajes. David cumplía su segunda temporada en Nápoles y, tras perder protagonismo, tomó la decisión de marcharse y volver a jugar en LaLiga. Ese era su deseo. Betis y Espanyol le seguían desde hacía tiempo. Especialmente los periquitos. David jugó una temporada en el conjunto catalán antes de cambiar de aires a Italia. Lo repescó el por aquel entonces director deportivo del conjunto blanquiazul, Óscar Perarnau. Una temporada a las ordenes de Javier Aguirre fueron suficientes para dar el salto a Europa.

Tras tomar la decisión de abandonar Nápoles, López viajó a Sevilla para cerrar su fichaje por el Real Betis con permiso del cuadro partenopeo. El Espanyol entró en escena más tarde. El jugador, que estuvo una semana en la capital andaluza, superó incluso las pruebas médicas. Solo faltaba la firma. El acuerdo era total y el traspaso se iba a cerrar en 3,5 millones de euros más variables.

Los seis días del futbolista en un hotel de Sevilla fueron tensos y de muchos nervios. "Había un principio de acuerdo y autorización para que viajara para el reconocimiento médico. Con el jugador aquí, se empezaron a hablar de las formas y las garantías de pago", explicó el director deportivo del Betis en aquella época Miguel Torrecilla. Y a partir de aquí todo se torció.

El jugador catalán incluso se fotografió con Torrecilla en Sevilla. Estaba todo cerrado, pero el Betis se cansó de esperar y de las peticiones económicas del Nápoles, que decían no tener garantías suficientes. El papel del controvertido presidente de la entidad italiana Aurelio De Laurentiis y la presión que ejerció sobre la situación cambió el escenario por completo.

"Las garantías fueron revisadas hasta por un notario y se ponía en riesgo incluso parte del ingreso televisivo. Si no cumples con los pagos, LaLiga Santander retiene parte de los derechos por televisión para dárselos al Nápoles", añadió Torrecilla. Así se rompió un fichaje que estaba visto para sentencia. David, incluso aprovechó esos días en Sevilla para buscar piso a la espera del traslado definitivo.

Ante este panorama entró rápidamente el Espanyol y dos personas fundamentales. En el aeropuerto de Sevilla camino de Italia, David recibió la llamada de Ramon Robert, el consejero delegado de los blanquiazules desde enero de 2016 hasta enero de 2018. Oscar Perarnau, exdirector deportivo de la entidad y amigo del futbolista, también ayudó a cerrar su vuelta a Barcelona. Además, los blanquiazules ofrecieron 4,5 millones de euros, por los 3,5 del Betis, lo que acabó por convencer a De Laurentiis.

"Estaba en el Nápoles y quería salir. Había estado en conversaciones con el Espanyol pero Quique quería traer a los suyos. Estuve en Sevilla, viajé, hice la foto en el aeropuerto y pasé el reconocimiento médico. Estuve una semana, busqué casa. Pero el del Betis me dijo que se rompía por las formas de pago. Me fui para Barcelona, y estando en el aeropuerto de Sevilla me llama Ramon Robert y se desencadena todo", relató en su día el propio futbolista.

Este domingo, el defensa volverá a cruzarse en el camino del Betis con la camiseta del Girona. Un partido especial por lo que puedo haber sucedido. Además, según ha podido saber Relevo, en años posteriores la entidad de Heliópolis volvió a intentar, sin éxito, el fichaje de David López.