Imanol Alguacil da un tirón de orejas a la afición y hasta a su hijo: "No puede ser que estén sufriendo por ser cuartos"

Imanol Alguacil compareció en rueda de prensa en Zubieta con un tono muy reivindicativo. Incluso algo molesto por la sensación que hay en San Sebastián con el equipo y con el sufrimiento por la pugna europea. El entrenador guipuzcoano está cansado de hablar de otros equipos y pidió que la gente valore el mérito de sus jugadores, que han llevado al club a ocupar posiciones de Champions League durante la gran parte de la temporada y que sigue luchando por ese ambicioso objetivo. "No puede ser que la gente esté sufriendo", dijo, poniendo a su hijo como ejemplo de esa manera de pensar entre los aficionados.

"No puede ser que llegue a casa y que me diga mi mujer que mi hijo no celebró el gol del empate contra el Rayo y sí el segundo gol. No puede ser, la gente está sufriendo estando cuarto. No puede ser. O que nos alegremos más, como ayer mi hijo, por el gol del Sevilla que por nuestra victoria. No lo entiendo. Ayer estaba enfadado en casa porque no lo entiendo", comentó en su primera intervención en castellano, preguntado por la buena situación clasificatoria tras ganar al Rayo y los pinchazos de Betis y Villarreal en la última jornada.

"Entiendo que tiene un gran mérito lo que está haciendo el equipo. No podemos cambiar de humor porque ganemos un partido o porque perdamos otro. Es un momento de disfrute por todo lo que nos están dando estos jugadores y no entiendo que estén (los aficionados) sufriendo", insistió. "Más que disfrutar de ver la clasificación, hay que disfrutar de lo que está haciendo el equipo y lo que trasmite".

"No sé dónde vamos a acabar. Los años que he estado yo hemos acabado con 56 puntos y dos años con 62. Y ahora tenemos 54. Joder, me da pena que haya gente, aficionados como mi hijo, que no disfruten de la victoria contra el Rayo. Nos lo tenemos que hacer mirar. Si algo ha demostrado este equipo es que somos ambiciosos y por eso estamos donde estamos", volvió a reivindicar Imanol, en la previa a visitar al Betis en un partido que será clave en la lucha por la cuarta posición.

Los donostiarras aventajan en seis puntos al cuadro sevillano y en siete al Villarreal, una renta muy positiva para las últimas ocho jornadas, pero el entrenador prefiere evitar el tema clasificatorio porque es "el cuento de nunca acabar". "Claro que son puntos importantísimos, pero es que estoy convencido de que si ganamos, la semana siguiente estaremos diciendo que ahora sí que sí esta es la gran final. Cuando queden tres partidos a ver dónde estamos y por qué objetivo estamos luchando".

Sin quitar la razón a Imanol sobre el mérito de sus jugadores a los largo de toda la temporada, el choque de mañana entre el Betis y los donostiarras se presenta como una final por la Champions. Un reto para los txuri-urdin, que no han sido capaces de ganar un partido lejos de San Sebastián desde mediados de febrero y que solo han sumado 5 puntos de los últimos 18 a domicilio.

Quizá por ello, y sobre todo porque los sevillanos son el principal perseguidor en la carrera por la máxima competición continental, Imanol parece que no haría ascos a un empate. "Sabiendo de la dificultad que tiene porque el Betis tiene una gran plantilla y un gran entrenador, un estadio que se va a caer, queremos los tres puntos. Pero según vaya avanzando el partido igual te digo que bendito el punto que podamos sacar".

Lo que descartó fue cualquier sentimiento de revancha ante un Betis que les ha eliminada dos veces en las últimas ediciones de la Copa del Rey y al que solo han podido superar en una ocasión de los últimos ocho enfrentamientos. "No me importaría que mañana nos metieran 4 y perder el partido (en el pasado reciente ha habido dos resultados de 4-0 a favor de los andaluces) si al final de temporada estamos por delante de ellos y en Europa", lanzó Imanol.