REAL MADRID

La insistencia de Modric tiene premio: renueva un año más y será el primer capitán del Real Madrid

El centrocampista croata seguirá una temporada más en el club blanco.

Luka Modric junto a Florentino Pérez al anunciar su renovación./Real Madrid
Luka Modric junto a Florentino Pérez al anunciar su renovación. Real Madrid
June Lavín

June Lavín

Luka Modric y el Real Madrid seguirán de la mano la próxima temporada. Lo harán después de conquistar la Decimoquinta en Wembley. El centrocampista croata, que aterrizó en el club blanco en verano de 2012, vivirá su decimotercera campaña en el Santiago Bernabéu. La extensión de contrato llega con el curso ya finalizado, después de muchos meses de reflexión en los que el mediocentro ha sopesado pros y contras, consciente de que, en caso de continuar, lo haría con un rol secundario que también le ha acompañado este año.

La renovación de Modric llega después del adiós de Kroos. El alemán, con el que el croata ha compartido centro del campo en la época dorada el club, ha colgado las botas tras la Eurocopa. Pese a la marcha del teutón, que podía dejar entreabierta una vía para la continuidad del 10, el Madrid se mostró, en todo momento, próximo a la idea de que no siguiese. El club tenía tomada su decisión, basada en su política de apostar por los jóvenes y darles paso progresivamente.

El deseo de Luka estaba claro: quería continuar de blanco, aunque eso supusiera hacer un esfuerzo económico y 'repetir' el rol de suplente y líder de la unidad B que han marcado su 23-24. "El Real Madrid está por encima de cualquier jugador", dijo en la rueda de prensa previa a la final de la Champions que enfrentó a los blancos contra el Borussia Dortmund en Londres el pasado sábado. Aunque no se pronunció sobre una renovación que ahora ha terminado de coger forma, sí recibió cánticos que pedían su continuidad cuando la primera plantilla celebró la consecución del título de liga en Cibeles.

Modric habla en Cibeles tras la consecución de LaLiga.

Esta temporada, ya con un rol secundario ("me costó asumirlo", dijo en la COPE) y líder de la unidad B por la que Ancelotti apostó en el último tramo del curso, con el Madrid jugándose su presencia en la final de la máxima competición continental, Modric seguirá de blanco una temporada más. Su decimotercera campaña en el Bernabéu, desde que debutase en 2012, hace ya doce años, a las órdenes de Mourinho en la Supercopa de España.

Giro de guion... y Ancelotti no entiende nada

La temporada de Modric ha sido una montaña rusa en lo que a su futuro se refiere. El croata y el Madrid, a lo largo de esta campaña, han barajado todos los escenarios posibles. También Ancelotti, que no supo hasta hace unas semanas qué iba a ocurrir. En la ecuación también entró Kroos, aunque su adiós es ya una realidad y las negociaciones se produjeron de manera paralela. Cuando la decisión de despedir a Modric con honores parecía tomada, el croata insistió en continuar. Varias veces. Su insistencia fue, precisamente, lo que hizo al club blanco cambiar de idea. O, al menos, empezar a plantearse un escenario que no habían sopesado antes.

Además, Modric aceptó de buen grado revisar su contrato y cobrar menos, requisito indispensable para continuar de blanco. Contó con el apoyo de su familia, completamente instalada en Madrid. Otro de los aspectos importantes para el croata son sus negocios en la capital; el último de ellos, de pádel en Las Tablas. Después de doce años en el Bernabéu, el 10 prefirió realizar un esfuerzo económico importante (y que en el club valoran mucho) antes que malvivir en otras ligas de menor nivel. Así es cómo se ha fraguado su renovación cuando todos los caminos apuntaban a una salida.

La motivación de ser primer capitán

A la marcha de Kroos se suma también la de Nacho, primer capitán del equipo en la 23-24, que pone rumbo a Arabia Saudí, al Al-Qadsiah. Con la salida del central, finalizado un ciclo de 23 años, Modric asume el brazalete de capitán y el rol de futbolista experimentado encargado de facilitar la adaptación de Mbappé o Endrick. Sería, de nuevo, uno de los pesos pesados del vestuario, con la siempre difícil tarea de comandar una transición a la que ya se ha sumado Arda Güler. Precisamente la irrupción del turco (pueden llegar a compartir posición), con seis goles en las últimas jornadas, llevó al equipo merengue a pensar que la salida el '10' era la mejor opción. Algo que, finalmente, no ha ocurrido.

Modric, junto a Ancelotti y Kroos en el entrenamiento previo a la final de la Champions. EFE/Kiko Huesca
Modric, junto a Ancelotti y Kroos en el entrenamiento previo a la final de la Champions. EFE/Kiko Huesca

Pese a su cambio de rol, ya con menos minutos que otras temporadas, su ambición por seguir en la élite es lo que llevó al Real Madrid a cambiar de decisión. El croata, que cumplirá 39 años en septiembre, sigue viéndose capaz de sumar, de ahí que haya decidido hacer un esfuerzo económico que le permita continuar un año más con la casaca blanca, su decimotercero.

Vivirá su decimotercera temporada en el Real Madrid y buscará ampliar un palmarés en el que ya se encuentran seis Champions, cuatro ligas, dos Copas del Rey, cuatro Mundial de Clubes, cinco Supercopas de España y cuatro Supercopas de Europa.