SEVILLA FC

La intrahistoria de la llegada de Quique: la elección de Orta tras las peticiones del Comité de Dirección

La primera apuesta, más rupturista, fue un fracaso y provocó la destitución de Diego Alonso.

Quique Sánchez Flores dando instrucciones en Los Cármenes./EFE
Quique Sánchez Flores dando instrucciones en Los Cármenes. EFE
Alonso Rivero

Alonso Rivero

La victoria ante el Granada ha permitido al Sevilla coger cierto aire. El partido era vital porque los de Nervión llegaban en una situación crítica tras casi tres meses sin conseguir sumar tres puntos. Sin apenas tiempo para trabajar, Quique Sánchez Flores aportó sentido común y elevó en cierta manera las prestaciones de su equipo. Mucho se ha hablado sobre la elección del madrileño y la autoría de su fichaje. ¿Cómo se ha trabajado en Nervión las incorporaciones de los dos últimos entrenadores?

En el Sevilla existe un Comité de Dirección conformado por José Castro (presidente), José María Del Nido Carrasco (vicepresidente primero), Víctor Orta (director deportivo) y Fernando Carrión (vicepresidente segundo). Los dos primeros tienen un papel más decisivo. Entre todos ellos suelen tomar todas las decisiones que atañen a la entidad. Dependiendo de la cuestión, los directores de otras áreas participan del mismo para aportar sus impresiones.

Cuando se decidió destituir a José Luis Mendilibar, se determina buscar a un entrenador rupturista, más desconocido en nuestra Liga y que tenga hambre por crecer en el club. Esas son las directrices con las que trabajó la dirección deportiva encabezada por Orta que redujo las posibilidades a dos candidatos: Diego Alonso y Vitor Pereira.

El portugués, ex de Oporto, Al Ahli, Olympiacos, Fenerbahçe, 1860 Múnich, Shanghai Port, Corinthians y Flamengo, entre otros, pasaba por ser uno de los entrenadores en activo más laureados de Portugal. En su palmarés figuran cuatro Ligas, una Copa y tres Supercopas. El uruguayo había hecho carrera en América y venía de entrenar a la selección uruguaya en el pasado Mundial de Qatar. Como todos saben, Diego Alonso fue el elegido por el director deportivo y la apuesta fue un fracaso.

En esta ocasión, tras la lógica destitución del uruguayo, el Comité de Dirección quería un entrenador con experiencia en LaLiga, que hubiera trabajado en grandes clubes y que también hubiera trabajado en situaciones difíciles. Aunque en el seno del club había una corriente partidaria a la llegada de Diego Martinez, Orta apostó por Quique Sánchez Flores que, de momento, ha conseguido una victoria que eleva la moral de una plantilla desmoralizada. Veremos cómo sale la apuesta. Sólo es el comienzo y a la vuelta de la esquina el metropolitano, el último partido de un 2023 para olvidar.