FC BARCELONA

Jeffren, Pinto y aquel 5-0 al Real Madrid: "'Negro', cinco minutos, metes gol y vuelves"

El ex del Barça repasa su carrera en Relevo.

Jeffren celebra el quinto gol ante el equipo de Mourinho./AFP
Jeffren celebra el quinto gol ante el equipo de Mourinho. AFP
Jordi Cardero

Jordi Cardero

A Jeffren Suárez (Venezuela, 1988) se le iluminan los ojos cuando recuerda su paso por el Barcelona. Más de una década después de dejar el Camp Nou, es más consciente que nunca que lo que vivió como jugador del Barça no fue un sueño, sino un sueño hecho realidad. Su gol, el quinto ante el Madrid una noche de noviembre de 2010, convirtió una goleada en un partido histórico. Aún se lo recuerdan.

Nacido en Venezuela y criado en Tegueste, creció con un balón de amigo y bajo las leyes de la calle. Comenzó jugando en campos de tierra, los mismos en los que, ahora ya con césped artificial, Pedri empezó a pelotear. Jeffren recuerda que de pequeño iba al restaurante del padre de una de los joyas del Barça de Xavi. Tras pasar por múltiples países, ahora está en Tailandia. A los 35 años, piensa en el futuro, pero sobre todo vive el presente.

Cuenta Jeffren que su película favorita es En busca de la felicidad. Y como si en lugar de llevar de la mano al hijo de Will Smith hubiese llevado un balón, encontró la felicidad jugando a fútbol. Llegó con miedo a Tailandia, pero pronto dinamitaron sus inquietudes. No buscó un retiro dorado. "Yo no soy así. Esa mentalidad no me la inculcaron. El dinero es bueno. Pero no empecé a jugar a fútbol por dinero, sino por pasión. Y acabaré igual", explica.

Jeffren descubrió el fútbol en Tegueste, cuna también de Pedri. "Nos gusta el fútbol. En un pueblo pequeño, ¿qué vas a hacer? Pues jugar a fútbol. Jugábamos en la calle hasta que se iba la luz", recuerda Suárez, cuyos padres siempre se llevaron bien con Fernando, el de Pedri. El ahora futbolista del Lamphun Warrior sigue en contacto con Fernando, pero aún no ha coincidido con Pedri. Les define como "gente humilde que sigue siendo de pueblo".

Coincidió con Guardiola, Luis Enrique, Messi y Ronaldinho

Pocos futbolistas pueden decir que les han entrenado Luis Enrique y Guardiola y han compartido vestuario con Messi y Ronaldinho. "Tuve lo que todo el mundo soñaba", comenta Jeffren. Con Guardiola compartió vestuario la temporada del ascenso a 2ªB. "Aprendí mucho de él. En ese momento tenía una velocidad que no era normal, iba más rápido que la pelota. Me enseñó a controlar el ritmo", recuerda.

Guardiola siempre remarca que su primer éxito fue el ascenso con el filial blaugrana. Y una de las hazañas más complicadas. Jeffren le da la razón. ¿Es más complicado jugar en campos de Tercera División que en algunos escenarios de Champions? "Claro. Porque te enfrentas a jugadores con más de 30 años, en campos de césped artificial, pequeños...", explica.

"Hay campos de Tercera División más complicados que algunos de Champions"

Jeffren Suárez Exjugador del Barça

Luis Enrique llegó un año más tarde, como sustituto de Pep. "Mi etapa con él fue fenomenal. Era como un padre para mí. Aprendí mucho de su carisma. También de ser agresivo pero jugando bien al fútbol. Hay entrenadores que te dicen que seas agresivo y corras como un loco. Él te obliga a correr y al mismo tiempo potencia tu calidad", relata Jeffren sobre el exseleccionador.

Jeffren vivió los inicios de los dos últimos entrenadores en ganar la Champions con el Barça. Dos técnicos con misma forma pero distinto fondo. ¿Qué les diferencia?

Quien lo hizo debutar con el primer equipo fue Rijkaard en un partido de Copa del Rey, la temporada que el Barça levantaría la segunda Champions de su historia. "Las primeras veces llegabas al vestuario cohibido, pensando en cómo reaccionarían los compañeros: Ronaldinho, Deco, Thuram... Y se portaron muy bien, no me lo esperaba así", relata. Ahora, sin embargo, cree que "los jóvenes llegan con aires de superioridad".

"Me dejé el pelo largo por Ronaldinho"

Jeffren Suárez Exjugador del Barça

Jeffren aprovecha la figura de Ronaldinho para recordar una anécdota con el brasileño. "De pequeño me dejé el pelo largo por él. Me llegué a hacer una foto con Ronaldinho. El problema es que me robaron el móvil y perdí la foto. Fue lo peor que me pasó en la vida", recuerda entre risas.

Si hay algo que instaló a Jeffren en la historia del Barça, más allá de ganar todos los títulos posibles, fue el quinto gol que le marcó al Madrid de Mourinho. "Ahí empezó una nueva rivalidad, muy distinta a lo que había sido hasta ahora y lo que es a día de hoy", comenta.

"Lo recuerdo todo como una película. Desde que salté al campo hasta que se acabó el partido. Nunca lo olvidaré", añade. A pesar de que ya había entrado Bojan -con Guardiola, muchas veces, el cambio era o éste o Jeffren-, Pep le llamó. El mensaje de Pinto fue una premonición: "'Negro', últimos cinco minutos, metes gol y te vuelves", le dijo el portero al autor del 5-0.

Un año después, se coronaría campeón del mundo. El Barça tuvo que remontar a Estudiantes de la Plata para hacerse con el Mundial de Clubes. Jeffren fue el tercer cambio de Guardiola. Entró a cinco minutos del final con un 1-0 en contra. "O era Bojan o era yo. Siempre era uno de los dos. Y pude entrar. Estábamos perdiendo y Guardiola me dijo: 'Abre el campo y a correr'. Empezamos a crear un montón de ocasiones y terminamos ganando. Se sufrió, pero sabíamos que íbamos a ganar. El Barça de ese momento era una locura", cuenta.

Jeffren celebra el empate de Pedro en el último minuto de partido. GETTY
Jeffren celebra el empate de Pedro en el último minuto de partido. GETTY

Han pasado más de diez años y Jeffren sigue con todos esos recuerdos tatuados en la memoria. "Yo empecé a jugar porque era -y sigue siendo con 35 años- lo que me hace feliz", expone. Aunque todavía no piensa en el retiro, sí que tiene decidido que quiere seguir ligado al mundo del fútbol. Allí, en Tailandia, es común la figura del entrenador-jugador.

"He tenido entrenadores buenos y entrenadores malos y sé qué tengo que hacer. Creo que también sabría llevar un vestuario", comenta. Piensa que la figura de técnico se empieza a incubar cuando uno aún juega. "Xavi, Iniesta y Busquets eran gente que iban por delante. Con Xavi ya sabías que sería entrenador. A Andrés también le veo, pero no sé si le gustaría. Y Busquets es un poco más cortado", añade. Si pudiera fichar a un futbolista para su equipo, tiene claro quién sería: Ronaldinho.

"Has jugado en el mejor equipo del mundo y la gente te dice que has fracasado"

Jeffren Suárez Exjugador del Barça

Los canteranos del Barça están obligados a tener que aprender a vivir con la presión. Se han colgado decenas de etiquetas al próximo Messi y se tiende a proyectar futbolistas que probablemente nunca lleguen a existir. Muchos terminan cayendo en el saco de juguetes rotos, víctimas de expectativas surrealistas. De ahí al fracaso, no obstante, hay un universo.

"Has jugado en el mejor equipo del mundo, con los mejores jugadores y en el mejor momento del club de la historia. Y la gente te dice que has fracasado. Yo no he fracasado. Sigo jugando a fútbol, que siempre fue mi sueño. Y cuando acabe pues se acabará. Fracasado es el que está en casa y ha dejado de hacer algo porque no le sale. A mí muchas cosas no me han salido en el fútbol, en algunos equipos no he jugado, pero vas a probar suerte a otro club. Esto es así. Yo seguiré hasta que el cuerpo diga basta", cierra.