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El fuera de juego semiautomático de Vinicius será una realidad en España el próximo año: "Ahora sufren trazando líneas... y eso les saldrá solo"

Sin el bloqueo de Rubiales a Mediapro, el concurso para ver quién lleva la tecnología VAR se hará público en los próximos días.

Imagen virtual del fuera de juego de Vinicius frente al Sporting de Braga./Hawkeye
Imagen virtual del fuera de juego de Vinicius frente al Sporting de Braga. Hawkeye
Sergio Fernández

Sergio Fernández

El fuera de juego de Vinicius frente al Sporting de Braga ha hecho renacer la polémica por el uso, o no, de tecnología semiautomática para arbitrarlos. Es cierto que quizá por última vez: la próxima temporada estará disponible en España. Y es una innovación porque otras grandes ligas como la Premier o la Bundesliga, no lo tienen. Es que además, en España, ya debería existir: LaLiga y la RFEF estaban de acuerdo en este punto, pero los planes tuvieron que retrasarse un año.

¿Qué pasó? En la RFEF de Rubiales había un veto (primero explícito y luego implícito) a que Mediapro fuese la encargada de la tecnología VAR. El concurso que elaboró la RFEF, con Andreu Camps y Rubiales todavía en sus cargos, hacía imposible que Mediapro pudiera intentar, en igualdad de condiciones, optar a dar ese servicio frente a la compañía actual, HawkEye. Los tribunales les dieron temporalmente la razón y el proceso se tuvo que detener... retrasando la implantación del fuera de juego semiautomático.

Ahora, ya en tiempos de la (medio) nueva Federación, ese concurso, menos excluyente, se hará público en pocos días. Y, sí, incluye de manera clara y explícita la tecnología del fuera de juego semiautomático. Fuentes consultadas por Relevo explican que hay tiempo suficiente para contar con él ya desde el inicio de la temporada 2024-25, en condiciones normales, si no median más factores judiciales externos.

Mejoras muy notables

¿Va a arreglar eso la polémica de los fueras de juego como el de Vinicius? Pues muy difícilmente. Porque sí: era fuera de juego. Con la cabeza y con la parte de la manga de la camiseta, la más cercana al hombro. Se supone que el VAR pita esos fueras de juego cuando lo que está adelantado es cualquier parte del cuerpo del delantero con la que sea posible marcar un gol.

"Ahora sufren un montón para trazar las líneas. Depende de dónde les pille la cámara, y la percepción de la persona que está viendo el vídeo. Con el semiautomático, no tienen que trazar nada: el sistema hace automáticamente la línea. Cada jugador está estudiado y trackeado constantemente por más de 20 puntos de su esqueleto. Así, definen al sistema automático en qué instante de tiempo quieren que trace las líneas (que es cuando sale el pase) y así los colegiados sólo tienen que ver la imagen que, además, es siempre mucho mejor", explican a Relevo fuentes arbitrales.

"La imagen está perfectamente en perpendicular de los jugadores. Con el VAR tradicional es más complicado porque tiene cámaras de TV y la del fuera de juego suele estar a la altura del área de penalti. No es tan buena como con él semiautomático, que siempre, sea donde sea la jugada, te ofrece una perpendicular perfecta", aseguran las mismas fuentes.

Ahora es un monopolio

El problema que hay ahora mismo con el fuera de juego semiautomático es que sólo Hawkeye puede desarrollarlo. Ninguna otra empresa, por el momento, puede implantarlo. Es la que estuvo en el Mundial, en la Champions, en la Supercopa española en Arabia (donde volverá a utilizarse en esta edición)... No hay más empresas que lo manejen.

Está por ver, cuando salga el nuevo (y más inclusivo) tender del VAR para la próxima temporada, si alguna empresa consigue ofertar, de forma realista y competente, este tipo de tecnología. Si no, será de nuevo HawkEye la que lo lleve a cabo, como en el resto del mundo.

'Armpit', es fuera de juego

"Pero es que es por dos milímetros", "es que nos estamos cargando el fútbol", "es que tenía medio pie solamente"... Las quejas son infinitas e interminables, casi siempre muy vinculadas a si la decisión arbitral favorece o no al equipo que te gusta. Pero la realidad es que en algún punto hay que poner un límite. Y, mientras UEFA, FIFA y la International Board estudian medidas más rocambolescas, de momento es lo que hay. ¿Qué es mano y qué no? La ilustración de abajo lo explica.

¿Qué es mano y qué no? Int.Board.
¿Qué es mano y qué no? Int.Board.

Las manos y brazos de todos los jugadores, incluidos los porteros, no están consideradas para pitar. En lo que al fuera de juego respecta, el Armpit (la parte de la manga más cercana al hombro) es lo que marca la posición inicial. Esa es la norma.

En España, hoy, habrían puesto la jugada de Vinicius y la habrían podido ver desde un par de ángulos diferentes, pero no desde la perpendicular perfecta. Y, entonces, habría entrado el árbitro VAR a decidir. Con las líneas trazadas, en un simple golpe de vista el que deja bien claro lo que ha ocurrido. Guste, o no. Sea por mucho o por poco. Vinicius no sólo tenía el armpit adelantado, sino también la cabeza. Fin de la discusión.

El locurón de Wenger: 'nada' es fuera de juego

Arsene Wenger, el mítico exentrenador del Arsenal, es hoy director de desarrollo FIFA. Tiene una idea que cuenta con el apoyo de muy poca gente en el mundo del fútbol: que el delantero pueda estar adelantado respecto al defensa, mientras que haya un punto, el que sea, en el que estén en línea.

La forma de explicarlo 'oficial' es bastante más poética: tiene que haber un haz de luz enfocado a los jugadores, si esa luz se interrumpe entre uno y otro, es fuera de juego. Si no, no. Es decir: que si un delantero gigante tipo Haaland deja el brazo atrás y roza con la yema de su dedo la mano del defensor, aunque parta con metro y pico de ventaja, no sería fuera de juego.

Está enfocado a favorecer al atacante y que los partidos tengan más goles. Aunque cuenta con una fuerte oposición dentro del colectivo arbitral, esta idea ya se está desarrollando en algunos campeonatos sub 15 y sub 17, aunque tiene muy difícil salir adelante.

Pase lo que pase las sospechas van a seguir. Seguirá siendo un acto de fe: hay que creerse que la imagen que vimos de Vinicius corresponde al momento exacto del pase, porque eso no lo vemos en tiempo real, con la imagen real. Ellos detectan la jugada y hacen la virtualización que ven encima de estas líneas. Pero va a ser imposible eliminar, al 100%, las suspicacias.