BETIS 1 - SEVILLA 1

Kike Salas cumple la profecía familiar del whatsapp

El canterano avisó a media tarde en el grupo de whatsapp de que finalmente no sería titular. Su tío Víctor, presente en el estadio, le auguró minutos y gol.

Kike Salas celebra el gol que marcó para empatar el derbi. /EFE
Kike Salas celebra el gol que marcó para empatar el derbi. EFE
Alonso Rivero

Alonso Rivero

Llegar y besar el santo. Casi en su primera jugada en el terreno de juego, Kike Salas igualó el derbi. Con un testarazo imponente tras un saque de esquina, su especialidad. Poco hubiera apostado el central antes del partido a que podría tener ese protagonismo en el derbi. A eso de las siete de la tarde, el canterano le comunicó a sus íntimos por whatsapp que sería suplente tras conocer que Quique apostaría por Acuña como tercer central. "Tranquilo, que vas a salir y vas a marcar", le respondió su tío, Víctor Salas, que tenía plena confianza en su capacidad.

Sánchez Flores sobre Kike y la defensaLALIGA

Como si hubiera tenido una visión de lo que ocurriría después. Necesitaba el Sevilla un impulso a su partido tras la ventaja inicial verdiblanca y Quique apostó por adelantar a Acuña, lo que motivó la entrada de Kike Salas. Quizá también pensaba en esa capacidad de remate a balón parado. Pero lo que nadie podía imaginar es que a las primeras de cambio el defensa pondría las tablas en el derbi. Y con una celebración por todo lo alto con sus compañeros.

La sanción por acumulación de amonestaciones, que le impidió jugar ante el Mallorca, también lo sacó del once. La experiencia de jugadores como Acuña u Ocampos provocó que el entrenador sevillista tirase de galones y que Kike se quedase de inicio en el banquillo. Extramotivado pero esperando su oportunidad. Ya pudo llegar en el minuto 13, tras la lesión de Isaac Romero, cuando Quique lo mandó a calentar junto a Lukebakio, aunque finalmente fue el belga quien entró al partido por el lebrijano.

Al término del partido, el central canterano no quiso mojarse sobre las jugadas polémicas que han dejado cierto cabreo en la expedición nervionense. "No lo he visto bien. No sé si Lukebakio tenía la mano separada y poco se puede decir ante eso". Eso sí, tuvo palabras de cariño precisamente para su familia. "Para mí no hay nada más bonito que marcar en un derbi, es un orgullo desde niño. Pienso en toda la familia y en el trabajo que hay detrás. Es lo más grande", expresaba con una sonrisa.

Kike ha sido titularísimo desde la llegada de Quique al banquillo. Hoy le ha vuelto a dar la razón. Su crecimiento exponencial ha provocado que el club quiera volver a atarlo este verano y no contempla una salida a pesar de la situación económica de la entidad. Su familia en Morón sonríe. Su tío, ha visto cumplida su profecía.