BARCELONA - ALAVÉS

Kike García, el futbolista y vecino de Motilla del Palancar que amenaza al Barça: "Cuando viajamos por ahí es cuando nos damos cuenta de quién es"

A sus 35 años, el delantero es una de las grandes amenazas de un Alavés que este domingo se enfrenta al Barça en Montjuic.

Kike García celebrando un gol esta temporada con el Alavés. /Deportivo Alavés
Kike García celebrando un gol esta temporada con el Alavés. Deportivo Alavés
Isabel Pacheco

Isabel Pacheco

Cuando el fútbol le da un respiro, Kike García (Motilla del Palancar, Cuenca, 1989) hace siempre el mismo recorrido. Desde Vitoria, donde reside desde que en 2023 fichara por el Deportivo Alavés, el delantero se sube al coche y conduce casi seis horas hasta Motilla del Palancar. Con una población cercana a los 7.000 habitantes, en su pueblo Kike no es el actual máximo goleador español del campeonato liguero (9 dianas). Entre partidas de petanca, charlas con los mayores y pasar tiempo recogiendo aceitunas con la familia, el jugador es un vecino más.

"Cuando viene por aquí para nosotros no es un futbolista. Nosotros lo vemos como tal cuando subimos a verlo a Vitoria. Ahí, cuando viajamos a verle a algún sitio, es cuando nos damos cuenta de quién es y cómo la gente lo ve realmente. Pero cuando está con nosotros es simplemente Kike, uno más".

La confesión la hace José Amoraga, que sabe bien de lo que habla. Vecino y miembro de la directiva del Motilla CF, José es del mismo grupo de amigos de Kike García. Un año menor que el atacante, el fútbol les cruzó por el mismo camino hace ya bastantes años.

"A nosotros nos hace mucha ilusión que siempre tenga en la boca Motilla del Palancar. Es una persona muy humilde y cuando viene por aquí se comporta igual que cuando tenía 15 años. En el último Puente del Pilar, que hubo parón de selecciones, estaba por aquí y se vino a ver un derbi que siempre disputamos contra un pueblo vecino. Allí estaba él en las gradas, animando como uno más", cuenta José.

Partidas de petanca, recoger aceitunas y donación de camisetas

Con cuatro goles en los dos últimos partidos, a sus 35 años, Kike sigue peleando y luchando cada balón como si fuera un joven con ansias de demostrar. Esa pasión va intrínseca en su filosofía. "Como una estrella ya te digo que no me definiría. Me definiría como un tío que se lo deja todo. Que se deja el alma en cada partido, que luego puede estar más o menos acertado, pero soy muy fiel a mis principios: darlo todo, pelear, ayudar a mis compañeros a estar en la zona de gol, intentar meter goles...", confesaba el propio Kike durante una entrevista hace unos meses en Relevo.

La fama y el estrellato no van con él. Sabe de dónde viene y por eso, cuando vuelve a casa, sigue haciendo las mismas rutinas de siempre. "A mi padre le gusta el campo, se desestresa. Somos una familia trabajadora. Desde niño mis hermanos han estado trabajando y no se nos caen los anillos. Cada vez que voy al pueblo me gusta ir a recoger aceitunas. Lo hago superencantado porque somos cinco hermanos y nos lo pasamos bien, no nos aburrimos. Para mí es un orgullo seguir yendo con mis padres y con mis hermanos a hacer esa labor", contaba.

Kike García, sobre recoger aceitunas en el pueblo. Relevo

Nadie se sorprende. Ni tampoco cuando le ven jugando partidas de petanca con jóvenes y mayores. Kike es pura naturalidad y sus vecinos están encantados con un futbolista que también es el primero en tender la mano para ayudar al club donde dio sus primeros balonazos: el Motilla CF.

"A principios de temporada nos donó unas camisetas suyas del Alavés para cada partido de Liga. Nos preguntó que cuántas jornadas eran y nos las regaló. Lo que hacemos con ellas es que rifamos una antes de cada encuentro y la gente colabora. Kike es uno de nuestros mayores patrocinadores porque con esas camisetas sacamos algo de dinero para el club, que la verdad que nos viene muy bien", apunta José.

El pasado mes de junio, durante el pleno ordinario celebrado en Motilla del Palacar, se aprobó que el campo de fútbol 'El Carrascal', donde compiten los equipos de la localidad, pasara a llamarse 'Campo de fútbol Kike García'. En casa es un ídolo.

Que los partidos del Motilla no coincidan con los del Alavés

Tal es la expectación por el delantero, que los horarios de los encuentros del Motilla varían en función de a qué hora juega el Alavés. "Como yo soy el que pone los horarios, siempre intento que no coincidan nuestros partidos con los del Alavés. Si ellos, por ejemplo, juegan el sábado y nosotros también, si se puede, trato de mover el nuestro para el domingo", confiesa José.

El próximo rival del conjunto babazorro es el Barça. El domingo, a las dos de la tarde, los habitantes de Motilla del Palancar se sentarán delante del televisor para seguir el encuentro de su paisano. Independientemente del resultado, a más de 400 kilómetros de Barcelona, seguirán estando muy orgullosos de él.