La lesión no cierra ninguna puerta a Ansu Fati, el nueve que se imagina Flick

Orlando.- Un mes atrás, el Barcelona decidió darle una oportunidad a Ansu Fati. El canterano haría pretemporada con el resto de sus compañeros y a medida que avanzase agosto se estudiaría su situación. El canterano hizo borrón y cuenta nueva y empezó con buen pie en los primeros pasos del proyecto de Hansi Flick, que trazó un plan específico para él y hasta le probó lejos de la banda.

Pero a cuatro días de viajar a la gira que se presentaba como su gran oportunidad, el club comunicó que una lesión en el pie derecho le impide viajar a los Estados Unidos. Ansu notó una molestia pero no le dio demasiada importancia. No quería ni plantearse la posibilidad de tener que parar. Cuando los médicos lo examinaron, era más 'grave' de lo que en un principio pareció. No para preocuparse a medio plazo, pero lo suficiente como para no cruzar el charco.

El día que el Barça abrió unos minutos el entrenamiento a la prensa, los jugadores hicieron la parte inicial física en grupos de tres o cuatro jugadores. Ansu, en cambio, lo replicó acompañado de preparadores físicos. Nada fuera de lo planeado para él. El staff de Flick lo cuida y, como con el resto de sus compañeros, lo aprieta a nivel físico. En el vestuario han notado un cambio importante en esta materia.

Además, el nuevo entrenador le probó en una posición que no es del todo desconocida para él, como delantero centro. Y todo esto, con un Vitor Roque actualmente sin dorsal. El club publicó un vídeo en el que se le veía haciendo una sesión individualizada presionando al portero y haciendo ejercicios de finalización. Las clases como delantero fueron más allá de eso. En clave comunicativa, el club lo cuida, ha sido de los jugadores con más presencia en redes sociales durante los primeros días de pretemporada.

No es algo azaroso. Los que le conocen y los que fueran sus formadores coinciden en que Ansu necesita sentirse arropado para rendir bien. Necesita sentir la confianza de cuerpo técnico. Es por ello que aceptó salir cedido al Brighton cuando la operación con el Tottenham, un año atrás, estaba en la fase final. Roberto De Zerbi le llamó personalmente para convencerle a escasas horas del cierre de mercado. Acostumbrado a vivir con la familia en Barcelona, en Brighton tuvo el reto de estar lejos de ella. Futbolísticamente, la cesión no fue productiva.

La gira de Ansu el año pasado dejó muestras de un paso adelante, aunque al final terminó saliendo. La cerró con un buen gol contra el Milan. Tiene la palabra del club de que tendrá una oportunidad, aunque la lesión cambia el decorado. Sin opciones de mostrarse en la gira, le queda por delante el Trofeu Joan Gamper antes de iniciar LaLiga. En agosto, antes de que se cierre el mercado, el Barça se enfrentará a Valencia, Athletic, Rayo y Valladolid. Su futuro todavía es incierto. No hay nada descartado.