La libertad con asteriscos que le espera a Dani Alves después de salir de la cárcel
El brasileño afronta ahora su nueva vida hasta que salga la sentencia en firme y se agoten las opciones de un recurso.

Dani Alves, finalmente, ha depositado la fianza de un millón de euros en el juzgado y ha salido en libertad después de 14 meses (430 noches) detenido en la prisión de Can Brians de Barcelona. Al jugador brasileño, que fue condenado a cuatro años y seis meses por agresión sexual, le concedieron la libertad controlada si depositaba un pago acorde a su patrimonio e ingresos, que finalmente ha reunido después de encontrarse en una situación "delicada" de liquidez y tener que buscar otras vías. Su libertad, eso sí, tiene asteriscos hasta que la sentencia sea firme y ya no haga opción a más recursos, que en ese caso deberá cumplir el resto de la pena.
El jugador brasileño no solo ha entregado el millón de euros. Ha tenido que dejar allí sus dos pasaportes, tanto en español como el brasileño, ya que tiene terminantemente prohibido salir del territorio nacional. De hecho, el riesgo de fuga fue lo que llevó en su momento y antes del juicio a aplicarle la prisión preventiva, que ha durado 14 meses. Ahora los jueces entienden que este riesgo, una vez ha salido la condena, se ha aminorado, ya que los años que debe cumplir son menos que los que se le reclamaban en un principio tanto la Fiscalía como la acusación.
La libertad de Alves tiene otros asteriscos. El futbolista tiene prohibido acercarse a la víctima a menos de un kilómetro ni tampoco intentar comunicarse con ella. Por lo que deberá evitar vivir cerca de su domicilio ni frecuentar los lugares a los que ella acude. Asimismo, Alves deberá presentarse una vez a la semana en la Audiencia de Barcelona para firmar y demostrar que no ha abandonado el territorio nacional y todas las veces que se lo reclamen, ya que su libertad no es completa.
La sentencia en firme tardará al menos dos años tras los recursos
La abogada de la víctima explicó el pasado jueves en los micrófonos de Rac-1 cómo se encuentra su cliente ante esta situación: "Está muy indignada, muy desesperada y muy frustrada. El esfuerzo que hicieron muchísimos profesionales no ha servido para nada". Y abundó: "Estoy muy sorprendida y muy indignada. Se está haciendo una justicia para ricos. Tengo ganas de ponerme a trabajar. Es un escándalo que dejen en libertad a una persona que puede conseguir el millón de euros en nada".
Ahora mismo, el caso se encamina al Tribunal de Justicia de Catalunya y posteriormente al Tribunal Supremo, ya que ambas partes han presentado un recurso. Este proceso podría demorarse alrededor de dos años. La máxima pena de prisión provisional es de dos años, por lo que el brasileño estaba a diez meses de cumplirla. Ahora está en libertad con asteriscos mientras que decide la sentencia firma tras las apelaciones.