El llamamiento de Laporta no funciona: Montjuïc registra con diferencia la peor entrada

La peor entrada en el Estadi Olímpic Lluís Companys para uno de los mejores Barça de la temporada. Una paradoja en la fría noche en la Montaña Mágica, la casa de Joao Félix en un partido de reivindicaciones y de goles ante su exequipo, un Atlético de Madrid que se movió al ritmo de los azulgrana buena parte del encuentro. Apenas pudieron disfrutarlo 34.568 espectadores, con suma diferencia el registro más bajo de lo que se lleva de curso: la anterior marca estaba en 38.194 del partido de Liga ante el Athletic Club (1-0). De hecho, el Clásico femenino de hace unas semanas registró mayor entrada (38.707).

El presidente del club azulgrana, Joan Laporta, ya había realizado un llamamiento el sábado para que los socios no fallaran y el resto de aficionados se animaran a comprar una entrada, señal de las pobres previsiones que se barajaban. "Tenéis una cita con los jugadores, que están deseando de ofrecer un gran ejercicio futbolístico y la victoria", dijo en la Ciudad Deportiva Joan Gamper después de visitar el último entrenamiento de los de Xavi Hernández. El precio de las entradas, que oscilaba antes del encuentro entre los 89 y los 219 euros, y el hecho de que los socios tenían menos descuentos que anteriores fechas, fueron las causas de una entrada pobre.

Hasta el momento, la entidad azulgrana se mostraba satisfecha con la respuesta de los aficionados y la media de espectadores en el Estadi Olímpic, que rozaba los 42.000, con picos como el Clásico (50.112), el encuentro ante el Betis (45.055) o incluso el del pasado martes ante el Oporto jugado también a las 21:00 (43.533), ayudado por la presencia de unos 3.000 hinchas del club portugués. Pero la atractiva visita del Atlético, vital para los azulgrana por la clasificación y las victorias del Girona y del Real Madrid, no ha podido levantar el interés esperado.

Mientras en la Tribuna y en el Lateral había un buen aspecto y apenas se veían butacas libres, en la zona de los Goles es donde aparecieron los vacíos, y eso que la afición del Atlético de Madrid pobló una de las pastillas superiores, lo que también originó una 'guerra' de cánticos personificada en el propio Joao Félix, aplaudido y coreado por el equipo que disfruta ahora de su cesión, el Barcelona, y silbado por el que sigue manteniendo sus derechos hasta 2029, el Atlético. Hubo otras confrontaciones, como en el famoso minuto 17 cuando los cánticos de "Independencia" fueron contrarrestados al final por un tímido "Viva España" procedente de la hinchada rojiblanca.

Con tal de hacer más atractiva la visita al Estadi Olímpic, teniendo en cuenta su enclave, el club avanzó hace una semanas que estaba adecuando una Fan Zone con bares, música y otro tipo de entretenimientos que se inauguraría este diciembre, concretamente el próximo fin de semana ante el Girona, en otro encuentro que será una prueba de fuego por la Liga y que se disputará también el domingo a las 21:00 horas.