LALIGA

Luis Campos cree que en el futuro se valorará positivamente su trabajo en el Celta

El portugués dejó su puesto en el club a finales de diciembre.

Luis Campos, antes de un partido./Getty
Luis Campos, antes de un partido. Getty
Óscar Méndez

Óscar Méndez

Hace más o menos un mes que Luis Campos y el Celta separaron sus caminos. El asesor deportivo portugués no terminó la temporada que tenía firmada tras el cambio al frente de la presidencia del club. Meses antes, Carlos Mouriño había dado un paso a un lado y cedido el testigo del club a su hija Marián, que no compartía el modelo deportivo que había impulsado su padre junto a Antonio Chaves. Ella valoraba una figura de director de fútbol que estuviera muy presente en el día a día y por eso se llegó al acuerdo para la salida del luso.

En sus casi dos años trabajando en Vigo, el todavía asesor deportivo del PSG cambió por completo la plantilla del Celta. Casi una veintena de jugadores llegaron al Celta entre el verano de 2022 y el de 2023, aunque los resultados no fueron los esperados. En su primera campaña en el club, los vigueses alcanzaron la permanencia en la última jornada tras ganar un Barcelona que ya era campeón. En esta segunda, el equipo ha ocupado puestos de descenso durante casi toda la primera vuelta y todavía está en una situación peligrosa en LaLiga.

Lo que empezó como un flechazo entre Campos y el club terminó con un divorcio traumático. Poco a poco algunos directivos (no el presidente ni el director general) fueron perdiendo la confianza en su gestión al frente de la dirección deportiva, aunque él solo ejerciera de asesor. La llegada de Marián lo precipitó todo. En su modelo de trabajo destacaban dos tipos de contrataciones: jugadores con experiencia y jóvenes con capacidad de revalorización. Los primeros no han dado el rendimiento esperado y los segundos, en muchos casos, todavía están verdes.

Sin embargo, desde el entorno del portugués siguen defendiendo su trabajo en Vigo y creen que el tiempo les acabará dando la razón y la afición terminará valorando muy positivamente su labor. Consideran que las apuestas que han hecho en los meses que han trabajado en la entidad darán sus frutos más pronto que tarde, lo que supondrá un beneficio deportivo a corto plazo y económico más a futuro. Además, cree que las contrataciones de hombres como Carles Pérez, Starfel o Unai Núñez, más veteranos, están bien realizadas.

Bajo la supervisión de Campos, el Celta fichó a unos desconocidos Williot Swedberg (cinco millones de euros) y Jorgen Strand Larsen (12) en 2023. Su primer curso en Vigo fue bastante discreto, aunque en esta segunda temporada si están exhibiendo mucho más nivel. El centrocampista sueco ha sido clave en dos de las tres victorias del equipo en Liga y el delantero noruego es el máximo goleador celeste en la competición doméstica. Por el ariete ya hay interés de otros clubes y puede ser la próxima gran venta de la entidad. Campos defiende que son dos fichajes que subirán su nota en Vigo, al igual que el de Douvikas.

Otros de los aspectos más criticados fueron las ventas realizadas, concretamente dos. Por un lado, la de Gabri Veiga este verano. Sin embargo, el portugués no tuvo poder de decisión en la misma, aunque sí en el hecho de no poder conseguir un sustituto de nivel en los últimos días de mercado. Si influyó en la salida de Brais Méndez hacia la Real Sociedad a cambio de 14 millones de euros, un precio que menos de dos años después se ha multiplicado tras su buen papel en Donosti (su valor de mercado según Transfermarket ha pasado de 18 a 40 millones de euros)

Desde el entorno del luso destacan su aportación a terminar con el 'Caso Denis Suárez, convenciendo al presidente de que lo mejor para todas las partes era finalizar con su estado de apartado y que saliese, aunque fuese a coste prácticamente cero. Y también por la creación de una oficina de asistencia al jugador para mejorar su día a día, además de desarrollar un área de nutrición. 

Siendo ya pasado en el club, solo el tiempo determinará si el paso de Luis Campos por el Celta fue positivo o negativo.