FÚTBOL

Alfonso Pérez más allá de polémicas: "Se fue en el AVE de las 3 y vuelve en el de las 5"… y su "fracaso" en el Barça

Se formó en la cantera del Real Madrid. Explotó en Heliópolis con su Betis y Serra Ferrer, y pasó sin pena ni gloria por el Barcelona.

Alfonso Pérez en un partido durante su etapa en el Barça. /GETTY
Alfonso Pérez en un partido durante su etapa en el Barça. GETTY
Alex Pintanel
Samuel Silva

Alex Pintanel y Samuel Silva

Alfonso Pérez Muñoz (26 de septiembre de 1972, Getafe) protagonizó la polémica de esta semana a raíz de su entrevista en El Mundo: "Obligaría a Guardiola y a las chicas de la selección femenina a besar la bandera española. No puede ser equiparable para nada el fútbol femenino y el masculino porque todo va en función de los ingresos que generes y de la repercusión mediática. Y ahí no hay comparación". Dos días después, el Ayuntamiento de Getafe retiró su nombre del estadio municipal del Getafe; y al día siguiente el exfutbolista intentó aclarar sus declaraciones: "No soy machista; tengo una madre, una esposa y una hija". Pero mucho antes de todo esto, Alfonso Pérez Muñoz fue un emblema del fútbol español, más allá de la polémica...

Alfonso Pérez, en su comunicado, sobre la polémica con Guardiola y la Selección española.

Criado en la cantera del Real Madrid, donde dos graves lesiones le impidieron asentarse plenamente en el primer equipo, Alfonso fue y es ídolo en el Betis. Considerado uno de los mejores delanteros de su historia, el getafense disputó más de 200 partidos con la camiseta verdiblanca en dos etapas, en la que dejó traspasos sonados, tanto el de su fichaje en 1996 -tras haber jugado cedido una temporada antes- como su posterior venta al Barcelona en el 2000 como su regreso final dos años más tarde. Alfonso fue un icono del fútbol español de la década de los 90. El mago de las botas blancas popularizó ese modelo de Joma que llegó a agotarse en las tiendas deportivas de la época y que incluso años más tarde sería motivo de pregunta tras su llegada al Barcelona.

"Quizá haya sido un talento que no ha sido valorado a la altura que tuvo. Era un crack, imaginativo, con medio amague ya sentaba a un defensa. Era un gusto verlo entrenarse, lo hacía como un principiante. Transmitía espíritu competitivo y ganador. Además de haber sido su entrenador, soy un admirador suyo", señala para Relevo Lorenzo Serra Ferrer, el primer entrenador del getafense en el Betis y que también sería hombre clave en el devenir de su carrera. "Era un futbolista por el que merecía la pena acudir a un estadio", añade Serra.

"No me sorprendió que fichara por el Barça. El Betis había descendido y Serra Ferrer ya lo conocía. Era una muy buena opción para el Barça", comenta Dani García Lara, gran amigo de Alfonso. Coincidieron en el Barcelona y en la cantera del Real Madrid. "Teníamos una buena competencia en el Barça. Alfonso era de los mejores delanteros de España con diferencia. Cuando era sub19 le iba a ver jugar cuando estaba en el Madrid Castilla y era el que más talento tenía cuando estaba en la cantera", afirma Dani García a Relevo.

"Por Alfonso merecía la pena acudir a un estadio"

Lorenzo Serra Ferrer Entrenador de Alfonso en el Betis y el Barcelona
Alfonso celebrando un gol en el Camp Nou dos años antes de fichar por el Barça.
Alfonso celebrando un gol en el Camp Nou dos años antes de fichar por el Barça.

«Se fue en el AVE de las tres y vuelve en el de las cinco»

"Nadie pensó que volvería tan pronto, volvió a los 15 días, vino a probar con nosotros y se llama Alfonso", lo presentó Manuel Ruiz de Lopera, que dejó otras perlas en esa presentación del delantero como nuevo jugador del Betis. Tras esas lesiones que le hicieron perder sitio en el Real Madrid, Alfonso llegó cedido al Betis en el verano de 1995. Tras una buena primera temporada, Lopera apostó por su contratación y abonó 1.176 millones de pesetas – unos 7 millones de euros- por Alfonso, su hermano Iván y Valerio al Real Madrid. "Se fue en el AVE de las tres y vuelve en el de las cinco", espetó el entonces máximo dirigente bético para presumir de ese fichaje de campanillas.

Alfonso en un partido ante el Real Madrid en la temporada 96/97.
Alfonso en un partido ante el Real Madrid en la temporada 96/97.

"Ya tenía pactadas esas cosas, ya sabes cómo llevaba Lopera las cosas que no te enterabas bien de las situaciones. Fue un jugador de lujo. Con el debido respeto a todos los futbolistas del Betis, Alfonso está entre lo más grandes de su historia", desvela Serra Ferrer. El tiempo les dio la razón y Alfonso completó una exitosa temporada 96-97, en la que anotó 25 goles con el Betis en Liga y sólo fue superado por Ronaldo (34). Precisamente, el Barcelona también dejaría al equipo bético esa temporada sin el título de la Copa del Rey, en una final disputada en el Santiago Bernabéu en la que Alfonso abrió el marcador y en la que acabaría entre lágrimas tras caer 3-2 en la prórroga. "Fue un futbolista con el que disfruté de verlo, entrenarlo y acompañarlo. Vivimos extraordinarios momentos. No sólo eran los goles sino el espectáculo que daba. Fue un gran futbolista y un gran deportista", resalta Serra Ferrer, que eleva la trascendencia que aquel Alfonso le dio al Betis: "Su llegada transformó al vestuario, al club y a la afición. Fue un subidón y la creencia de que se podían conseguir grandes cosas. Estaba el Betis entre los tres o cuatro primeros, en un momento en el que además de Barcelona, Real Madrid, Atlético o Valencia estaba también el Súper Depor, había mucha competencia".

"Alfonso está entre los jugadores más grandes del Betis"

Lorenzo Serra Ferrer Entrenador de Alfonso en el Betis y el Barcelona

Aunque su rendimiento no alcanzaría los registros de esa temporada, Alfonso continuó siendo un jugador de referencia en el Betis hasta el 2000. Con sus tiras y aflojas con Lopera, como casi todos los futbolistas de esa época, el delantero viviría dos experiencias contrarias en ese año que cambiaron su destino. Por un lado, y pese a goles antológicos como el que anotó ante el Barcelona con doble recorte a Bogarde, el Betis de Alfonso y Finidi acabaría descendiendo a Segunda, lo que generó un verano problemático. "Era impensable pensar en descenso con esos grandes jugadores que quedaban, pero a veces en el fútbol pasan cosas que no esperas", dice Serra sobre aquel descenso que vivió desde la lejanía de Barcelona, donde recaló tras salir del Betis en 1997. Precisamente, en ese estío y con la camiseta de la Selección, el atacante viviría un día inolvidable, sobre todo en aquellos años en los que La Roja no había llegado aún a los títulos. Alfonso se convirtió en el héroe de Brujas, con un gol casi sobre la bocina para doblegar a Yugoslavia y que la Selección se clasificara a los cuartos de final en la Eurocopa de 2000, en los que acabaría cayendo ante Francia.

De Heliópolis al Camp Nou pasando por una dura negociación

Pocas semanas después y tras nuevas polémicas con Lopera, Alfonso abandonó el Betis para fichar por el Barcelona, que pagó más de 2.000 millones por su contratación. La presencia de Lorenzo Serra Ferrer, el entrenador que mejor rendimiento le había sacado en el Betis, ayudó en esa decisión que materializó Joan Gaspart en una dura negociación con Lopera. "Teníamos informes favorables de Serra Ferrer y hablé con el presidente del Betis, que era uno de los mejores negociadores que había. Las negociaciones con él siempre eran complicadas. Era un hombre muy potente económicamente. Me costó convencerlo pero finalmente nos pusimos de acuerdo", explica el ex presidente azulgrana a Relevo. Gaspart dirigió a la entidad azulgrana desde el 2000 tras la dimisión de Josep Lluís Núñez y hasta 2003 cuando se marchó ante la gran crisis institucional que vivía el club. Gaspart también fue vicepresidente primero en la época de Núñez durante 22 años (1978-2000).

Pep Guardiola y Alfonso Pérez coincidieron en el Barcelona.  FCB
Pep Guardiola y Alfonso Pérez coincidieron en el Barcelona. FCB

La voluntad de Alfonso y la insistencia de Serra Ferrer resultaron determinantes. "Tenía claro todo lo que podía aportar. Él había recuperado la autoestima y la confianza en sí mismo. Tenía un nivel extraordinario y nos podía ayudar a hacer una plantilla más completa", señala Serra Ferrer sobre su llegada al Barcelona, donde al principio tuvo que lidiar con su pasado madridista. "No le afectó, era muy maduro, sino que fueron más los problemas físicos que le impidieron estar al 100% en una plantilla como la del Barcelona, donde había 2-3 jugadores para cada puesto. La suerte no le acompañó en esos momentos, no es al único futbolista que le ha pasado. Era uno de los grandes futbolistas del país", añade el ex técnico.

"La voluntad de Alfonso era la de jugar en el Barça. Le hacía ilusión jugar en Barcelona. Yo soy muy romántico y me lo creo. Luis Enrique también era madridista y vino al Barça feliz y contento", explica Gaspart que también matiza que "de niño no tienes ni la noción de querer ser futbolista profesional ni de querer jugar en el Barça".

"Luis Enrique también era madridista y vino al Barça muy feliz"

Joan Gaspart Presidente del Barça entre 2000-2003

¿Le costó a Gaspart convencer a Alfonso? "Antes hablabas directamente con el futbolista y en más de 30 años nunca he tenido que convencer a nadie para venir al Barcelona. Por encima de todo el futbolista tiene ilusión y pasión por un club como el Barça".

Alfonso Pérez pasando el reconocimiento con el Barcelona en el año 2000.
Alfonso Pérez pasando el reconocimiento con el Barcelona en el año 2000.

Su Betis para poner punto y final a su carrera

Tras un breve paso por Marsella, Alfonso regresó al Betis en 2002. "Es volver a mi hogar", indicó el atacante. "Para mí ha sido como un sueño en el que se me han cerrado los ojos y me he despertado otra vez aquí. Lo único bueno ha sido conocer una entidad como el Barcelona. Deportivamente, ha sido un fracaso", resumió el propio futbolista, que ya no alcanzaría tampoco la misma relevancia en el Betis. Precisamente, su última temporada como profesional fue de nuevo con Serra Ferrer como entrenador, aunque ya su rol fue residual e incluso se quedó sin jugar en la final de Copa del Rey de 2005, su único título en el equipo bético. "Lo tuve a él y a Denilson, dos grandes futbolistas a los que por circunstancias no pude tirar de su talento. Con la perspectiva del tiempo, imagínate lo que podríamos haber conseguido con ellos dos sin lesiones", concluye el de Sa Pobla, con un suspiro que devuelve a su mente a 'Filigrana, Alfonso', ese talento criado en el Madrid, que pasó por Barcelona pero que es historia del Betis.