De Marcos, un líder que predica con el ejemplo: "Sin tener el brazalete, todos nos acercábamos a él para pedirle consejo"

"No es una despedida, eh, no es una despedida". Óscar de Marcos, tras anunciar a sus compañeros que colgará las botas a final de temporada, se empeñó en hacerles entender que aún no se ha ido. Aún le quedan "tres meses increíbles" en los que seguirá comportándose igual que en estas 16 temporadas. "Hasta el último día quiero dar todo como lo he dado siempre", les dijo también. Nadie duda de ello en el grupo, tampoco en la entidad, ni por supuesto en una afición que le quiere y le considera una de las mayores leyendas rojiblancas por su compromiso con el equipo.

Tampoco quiere homenajes, pero es inevitable que algo se remueva este domingo, cuando por primera vez pisará San Mamés tras su anuncio. Habrá ovación y aplausos. Cada partido será especial por saber que va quedando menos para su adiós. Hace menos de un año, también por sorpresa, recibió el brazalete de capitán en el círculo central tras el partido en un anuncio de renovación emotivo y simbólico. Como ha sido casi todo en estos últimos años de carrera en los que ha tocado la gloria y se ha convertido en aún más histórico por alcanzar a Iker Muniain, a quien superará en partidos hoy ante el Valladolid.

¿Por qué es tan relevante la figura de Óscar de Marcos? Más allá de sus números y sus 16 temporadas en el equipo de su vida, quienes han compartido vestuario con él lo tienen claro: valores. Una palabra repetida por todos. "Solo puedo darte las gracias. Me ayudaste a mejorar como profesional, pero, sobre todo, a mejorar como persona, eternamente agradecido. Te echaremos de menos CAPITÁN, eres una LEYENDA" , escribió Oihan Sancet. Mikel Jauregizar o Unai Gómez hablaron de su legado. Dos jóvenes que crecieron viéndolo en el primer equipo y que le tienen como modelo. El mediocentro le suele escribir para preguntarle cualquier duda, futbolística o personal. Como compañero, amigo y referente.

"Me resulta muy, muy, complicado encontrar palabras para describir a Óscar", responde Iñigo Lekue en cuanto se le pregunta por su compañero y amigo. Ambos comparten vestuario desde 2015, cuando el lateral de Deusto ascendió a un primer equipo en el que De Marcos ya era muy importante aunque aún no portase el brazalete. "Es muy difícil hablar de la gente que quieres y admiras porque con palabras se dispersa todo lo que significa Demar y sus cualidades", se explica, antes de demostrar que solo era un miedo interno, porque le define con las palabras justas, medidas y pensadas. Con un paralelismo entre el De Marcos personal y el De Marcos futbolista.

"Creo que la mejor manera de describirle es a partir de la importancia que tienen sus valores para él: la amistad y la familia lo son todo. Y eso mismo lo ha llevado al vestuario del Athletic, en el que ha estado 16 temporadas y 560 partidos, con muchísimos compañeros y empleados, que a lo largo de todos estos años han sido su familia y sus amigos". De hecho, el único momento en el que De Marcos se emocionó en su discurso en Lezama fue al hablar de las relaciones personales que ha construido en este tiempo. "Él pone muchas veces esa amistad y esa familia por delante de él. Y eso a los chavales les hace seguirle porque ven que una leyenda como Óscar de Marcos pone por delante un montón de cosas antes que él".

De hecho, el propio Lekue personifica esa relación. Ambos son competencia directa en el lateral derecho, pero eso no impide que sean amigos. Leku es una de las personas más cercanas al capitán en el vestuario. Uno de los pocos que sabía que este miércoles anunciaría su adiós al resto de la plantilla y en quien De Marcos confía en absoluto. "Óscar se convierte en un líder simplemente por predicar con el ejemplo, porque sus valores pesan mucho en sus decisiones del día a día", insiste.

"Es el mejor ejemplo de una persona íntegra que he tenido como compañero. Para mí, su figura define a la perfección una frase que a mí me encanta: 'Somos lo que hacemos, no lo que decimos'", así le definía también Carlos Gurpegui para Relevo. El exjugador rojiblanco, de quien De Marcos heredó el '18' dejando el '10' para Iker Muniain, fue una figura clave para el lateral, que entendió en quién debía fijarse para convertirse en una referencia para el resto de compañeros. "Esto va de personas y es una cadena", dijo también el lateral este miércoles, convencido de que, al igual que él tuvo buenos ejemplos, él tenía que dejar un poso en el vestuario para que el Athletic siga siendo diferente.

"Sobre todo, es una persona que se gana el respeto y el cariño de la gente siendo como es, simplemente. Y eso tiene un gran valor en el mundo del fútbol", responde Dani García desde Atenas, donde está disfrutando del fútbol tras haber abandonado el Athletic el verano pasado. El mediocentro guipuzcoano llegó en 2018 a Bilbao y pronto entendió lo que significaba este vestuario, precisamente por ejemplos como el de Óscar de Marcos, a quien le une una gran amistad que se sigue manteniendo en la distancia y cada vez que vuelve a la capital vizcaína. "Sin tener el brazalete, la gente ya le pedíamos consejo a él. Porque los valores que él demuestra como persona te hacen acercarte a él porque crees que él siempre va a saber aconsejarte bien. Eso es lo más importante para ser capitán del Athletic pero, sobre todo, para tener el respeto y el cariño de tanta gente".

"Humildad, ser buen compañero, buen amigo...", enumera Dani. "Generosidad, trabajo, esfuerzo…", completaba Susaeta, quien tiene claro que "De Marcos es el Athletic". "Podría decir mil adjetivos, pero lo que lo resume es que es Athletic porque todos los valores que identifican al club los tiene él", explicaba el extremo, ya retirado hace años pero compañero durante diez años del jugador de Laguardia. "Sus valores son tan 100% Athletic que no se sabe la frontera de dónde acaba uno y empieza el otro. Durante tantos años se han moldeado para ser lo mismo y representa a la perfección lo que es este club", puntualiza Lekue. "Por eso, para la masa social rojiblanca representa tanto. Es una satisfacción y una gozada que la gente que no es del Athletic pueda entender lo que es el club a través de Óscar".

"Él le da tanta importancia a la amistad que eso hace que también todos quieran corresponderle a él y a los de alrededor. Por eso el vestuario del Athletic es como es. Por gente como él, como Balen, como Leku... Si todo esto se mantiene es porque él también tuvo ejemplos en Gurpegui, en Susaeta, en Iturraspe, que, además de ser unos jugadores de la leche, tienen unos valores increíbles", explica Dani García, que llegó a Bilbao sin ser rojiblanco de cuna pero que hoy es un apasionado de esta entidad.

El propio Dani García hizo unas declaraciones hace unas temporadas hablando del valor de ser un buen suplente. "Tienes dos opciones: venir todos los días con buen ánimo o pensar que el entrenador es muy malo y me tiene manía. Yo he optado por la primera. He tenido ejemplos durante toda mi carrera de lo que es un buen suplente y yo no me perdonaría que cuando deje el fútbol piensen de mí que era un mal suplente", dijo el mediocentro. Y eso mismo es lo que también destaca de Óscar. "Creo que es de las pocas personas y jugadores que en los malos momentos individuales no se le ha notado y siempre ha estado pensando en el equipo. Eso para mí es lo más importante. Que jugadores que llevan tantos años y están tan contrastados antepongan mucho más al equipo que a sí mismos, a mí me ganan. Y eso es lo más fundamental para ser un gran capitán".