De Marcos, a un paso de hacer historia en Bilbao: "Me hace ilusión acercarme a mis ídolos"
El lateral del Athletic podría cumplir 500 partidos este sábado ante el Real Madrid, a un paso del top-5 de la historia rojiblanca.

Óscar de Marcos afronta su decimocuarta temporada en el Athletic Club. Convertido en segundo capitán, el de Laguardia tuvo muchas dudas en renovar por una campaña más, pero las intenciones de Ernesto Valverde y el club le acabaron de convencer para que siga compitiendo en el club de su vida, asentado como titular indiscutible en el lateral derecho y hombre de peso en el vestuario. "Cada año me va costando más tomar la decisión, pero el año pasado fue sorprendente hasta para mí porque me encontré muy bien y me ayudó a seguir". 43 partidos, dos goles y cinco asistencias fueron un balance de una gran temporada para el alavés.
La decisión, más allá de los réditos deportivos para el grupo, servirá también para que alcance una cifra redonda e histórica: 500 partidos como rojiblanco. Si no sucede nada extraño en estos últimos días antes de recibir al Real Madrid, De Marcos lo celebrará en un partido grande y con un San Mamés a reventar. "Son muchísimos partidos, cuando llegué y vi quiénes estaban en lo alto del ranking, eran todos ídolos y referentes. Ahora estoy cerca de ellos. He coincidido con muchos de ellos y acercarme me hace mucha ilusión", valoró en rueda de prensa.
En estos momentos es el séptimo jugador con más encuentros disputados en el club, únicamente superado por Markel Susaeta (507), Andoni Iraola (510), Joseba Etxeberria (514), Iker Muniain (535), Txetxu Rojo (541) y José Ángel Iribar (614). De esta forma, si no tiene problemas físicos tiene a tiro el top-5 e incluso si consigue un rendimiento tan regular como el curso pasado, podría llegar a dar caza a Rojo. "Eso es mirar demasiado adelante", dice, sin querer marcarse objetivos en este sentido.
De Marcos suma 499 partidos y está a solo 11 encuentros de entrar en el top-5 histórico. Si repite el rendimiento del curso pasado podría incluso alcanzar el pódium a final de temporada.
Llegó desde el Alavés en 2009 a una concentración en Isla Canela, con Joaquín Caparrós como entrenador y con apenas 19 años. Mirando atrás, reconoce que no se esperaba la carrera que ha conseguido construir y le es difícil explicar una clave para este rendimiento continuado. "He intentado ayudar en el rol que me ha tocado priorizando el equipo por encima mío. Quizá eso es lo que me ha ayudado, haber podido echar una mano en todas las posiciones, incluso fuera del campo".
Un camino que ha tenido momentos muy altos, incluso llegando a ser convocado con la Selección Española, aunque no llegó a debutar. Con el Athletic, ha levantado dos Supercopas, ha disputado cuatro finales de Copa y una de Europa League. Esta última competición, con Marcelo Bielsa, es uno de los mejores recuerdos para la afición y también para él. "El partido del Manchester allí fue inolvidable, también porque nos cambió la mentalidad de que podíamos competir contra cualquiera. Además, pude hacer el gol y por cómo se vivió todo es el mejor momento", destacó.
En cuanto al momento más duro, sorprendió al recordar la destitución de Eduardo Berizzo, sucedida en diciembre de 2018. Dejó de lado las derrotas deportivas y se centró en la salida del técnico argentino. "Diría que cuando le despidieron a Berizzo fue un momento muy duro para mí y el más delicado porque sientes esa responsabilidad y el no poder corresponderle. Todos queríamos ayudar pero no pudimos".
De cara a la nueva temporada, prefiere no pensar demasiado en su futuro ni anunciar con tiempo que será el último. Se centra en la receta de estas últimas temporadas, apurando los partidos y los entrenamientos como si fueran los últimos para después valorar su continuidad en el club. "Si tengo que echar la persiana, intentaré echarla con el trabajo realizado hasta el último día".
Objetivos grupales
A diferencia de la pasada temporada, en la que el club, con su presidente Jon Uriarte, Ernesto Valverde e Iker Muniain anunciaron el objetivo de clasificar a Europa de manera pública, este curso hay más prudencia. De Marcos admitió que él siempre piensa en conseguir lo máximo y en la posibilidad de regresar a competiciones continentales después de seis temporadas. "Entrar en Europa es algo que siempre tengo en la cabeza, intentaré ayudar a ello. Llevamos muchas temporadas quedándonos a un paso y si cada uno de nosotros mejora un poquito, quizá damos ese pasito que necesitamos. Ojalá que sea esta temporada".
Para conseguirlo, en su opinión es importante comenzar con buen pie para ganar "moral". No será sencillo, ya que los rojiblancos deben recibir a Real Madrid y Betis, además de visitar a Osasuna y Mallorca antes del primer parón de la temporada. No se fía de la mala temporada del conjunto blanco porque "es un equipo muy fiable", aunque avisa de que los comienzos de temporada en Bilbao, en San Mamés, son "siempre especiales y con muchas ganas de tener un buen partido".