REAL MADRID

Marruecos le ofrece a Brahim el caramelo de los Juegos... y el Real Madrid se lo puede quitar

En los JJOO los clubes no tienen obligación de ceder a sus jugadores. Si Marruecos le llama para París, el malagueño deberá negociar con el Madrid.

Brahim charla con Ancelotti al finalizar un partido. /GETTY
Brahim charla con Ancelotti al finalizar un partido. GETTY
Sergio Gómez

Sergio Gómez

"¿Qué le habrán prometido a Brahim para que se vaya con Marruecos?" fue el comentario más frecuente en las redes sociales poco después de que se conociera que el jugador del Real Madrid se decantó por la selección magrebí, cansado de esperar a España y hastiado de la fría actitud de la RFEF con él. El entorno del futbolista se limitaba a una palabra: "Cariño". Es decir, que se ha dejado querer por la selección que más le ha querido.

No es un secreto que la prioridad de Brahim era ir con España. Ya jugó con la Roja un partido con la Absoluta, ocho con la Sub-21, ocho con la Sub-19 y nueve en la Sub-17. Por lo tanto, la labor de la federación de Marruecos para virar la opinión del malagueño ha sido ardua, casi de desgaste. En este asunto, el poder de la sangre jugaba en contra de los Leones del Atlas, pues los vínculos del futbolista con la tierra son más bien blandos. Su padre nació en Melilla, su madre en Málaga y el lazo más directo con el país africano es el de su abuela paterna, marroquí.

Su caso, por tanto, nada tiene que ver con el de Achraf, por ejemplo. Por esa razón, la principal arma para convencerle fue la deportiva. Con España ahorrándose gestos con él, Marruecos fue con todo.

La federación presidida por Fouzi Lekjaa se reunió en varias ocasiones con Brahim y le explicó un proyecto con forma de caramelo: jugar como '10', la posición preferida del madridista; transformarle en icono mediático y uno de los puntales en la idea de Marruecos de instalarse entre las potencias; y, por supuesto, la 'promesa' de llevarle a los Juegos Olímpicos que se celebran este verano en París (del 24 de julio al 9 de agosto). Este punto tuvo cierto peso en el camelo, pues uno de los últimos sinsabores de Brahim con la Selección española fue quedarse fuera de los últimos JJOO. Ahí comenzó a resquebrajarse su relación con Luis de la Fuente, técnico que siempre le tuvo en sus planes en las categorías inferiores de Las Rozas.

Entre la fractura con De la Fuente y el papel del Madrid

El técnico riojano, después de perder en las semifinales de la Eurocopa Sub-21 contra Portugal, le borró de la lista de los Juegos de Tokio. Se llevó hasta ocho jugadores de aquella Selección (Álvaro Fernández, Mingueza, Cucurella, Óscar Gil, Miranda, Bryan Gil, Zubimendi y Puado), pero no al por entonces atacante del Milan, que en el Europeo fue titular en tres de los cinco encuentros y disputó 232 minutos. De hecho, De la Fuente no le volvió a llamar...

Luis de la Fuente da instrucciones a Brahim en la Eurocopa Sub-21.  GETTY
Luis de la Fuente da instrucciones a Brahim en la Eurocopa Sub-21. GETTY

Brahim Díaz tiene 24 años, pero la normativa permite que en la selección olímpica haya hasta tres jugadores mayores de 23. Marruecos le puso en los labios la seria posibilidad de estar presente en París junto con Achraf, lateral del PSG de 25 años. Ambos líderes de un grupo talentoso que integrarán, si no hay contratiempos médicos de por medio, futbolistas como Abde (22) o Eliesse Ben Seghir (19).

Esta fue una de las garantías de la federación al malagueño, aunque en el fondo se trató más de otro argumento para seducirle que de una realidad ya que en este escenario quien tendrá la última palabra será el Real Madrid. En el fútbol, los JJOO no están al amparo de la FIFA sino del Comité Olímpico Internacional. Es decir, los partidos no se consideran fechas oficiales del máximo organismo futbolístico. Esto implica que son los clubes los que deciden si ceden o no a sus jugadores; no tienen obligación. Así pues, en el caso de que sea convocado por Tarik Sektioui, Brahim, deberá negociar con el club blanco, que en esas fechas se encontrará en plena pretemporada y arrancando LaLiga.

El 'fichaje' del futbolista malagueño ha supuesto un alegría para el país y un refuerzo para la federación magrebí, que ve en esta operación un espaldarazo a nivel internacional, un efecto llamada para otros jóvenes que se vean en la coyuntura de decidir entre ambos países, un refuerzo de su imagen como semifinalista del último Mundial y un empoderamiento de cara a la cita de 2030, que organiza junto a España y Portugal.