Mestalla vuelve a arder con Baraja: ni Barça, ni Madrid ni Atleti lo conquistan

Mestalla volvió a ser Mestalla desde el momento que Rubén Baraja tomó las riendas del Valencia Club de Fútbol. Las butacas vacías brillan por su ausencia desde entonces y el mejor ejemplo fue el partido ante el FC Barcelona que aglomeró a 46.492 personas, lo que fue el récord de la temporada actual. Y claro, con Mestalla así, el Valencia no falló.

No falló el Valencia ante el Barça, golazo de Guillamón mediante, como no falló ante el Real Madrid ni el Atlético de Madrid. Ante los tres rivales más importantes de la competición el Valencia de Rubén Baraja, pese a estar en horas bajísimas como club, ha obtenido siete puntos de nueve posibles. El año pasado un 1-0 al Real Madrid que valió media permanencia, esta campaña un brillante 3-0 al Atlético de Madrid y el vibrante empate a uno vivido en Mestalla en la noche del sábado.

"Yo me quedaría con todos los momentos previos a los partidos. El ambiente que había con la llegada del equipo. Esto es algo que a mí siempre se me queda en la retina. Estamos consiguiendo que Mestalla sea poderoso", aseguró Baraja en la rueda de prensa posterior al partido.

La magia de Mestalla todavía se mantiene y esa es la mejor noticia para un club que seguirá en horas bajas hasta que a Peter Lim le apetezca. La noche en el templo valencianista lo tuvo absolutamente todo: un homenaje, lona incluida, a la leyenda David Silva con su correspondiente saque de honor, un arranque tremendo donde los che merecieron adelantar, pero Iñaki Peña lo evitó y una dosis de sufrimiento que hizo más valioso si cabe el punto, gracias entre otras cosas a las paradas de Mamardashvili.

El Valencia se mantiene así a siete puntos de los puestos de descenso y poco a poco recupera la solidez en su estadio, de hecho es el equipo que menos goles ha encajado como local (cuatro). De hecho, esta campaña los che han concedido dos derrotas como locales, pero en ambas se marcharon ovacionados porque fueron dos buenos encuentros tanto ante Osasuna (cayeron en el último minuto) como ante la Real Sociedad (0-1) en un partido muy apretado.

Sin embargo, Rubén Baraja no se queda con los registros (únicamente), sino con las sensaciones: "Lo que más me ha gustado ha sido la comunión que he sentido con la afición, la gente ve que estos chicos dan todo lo que tienen y la afición se va a casa agradecida", expresó el Pipo.

Sobre los buenos resultados obtenidos ante los rivales 'top' de LaLiga, Baraja comentó lo siguiente: "Es verdad que la motivación es más alta ante estos rivales, por lo que te exigen ellos, tienes que jugar al 150%, estos partidos grandes son los que a todos nos gustan. Me parece importante que ellos jueguen sin complejos, desinhibidos, que sean intensos".