Míchel le sigue dando vueltas a la derrota en el Bernabéu: se arrepiente de su charla

Míchel sigue dándole vueltas a la derrota sufrida en el Santiago Bernabéu el pasado sábado (4-0). El técnico del Girona, que no pierde la sonrisa, lamenta haber añadido presión a sus futbolistas y ahora tiene claro que "si pudiera, daría otra charla" para afrontar el duelo con más garantías.

"El sueño continúa, pero la exigencia de ganar cada partido no es nuestra exigencia", dijo en Catalunya Radio. "El equipo está haciendo una temporada histórica. Cuando Barça y Madrid no ganan es un problema, espero que no sea así con el Girona. Si no perdemos ante el Athletic estaremos en muy buena posición, pero creo que más o menos hay que hacer 73-75 puntos para entrar en Champions", valoró.

Mirando al pasado más reciente, Míchel reconoció que tendría otras palabras para sus jugadores antes de medirse al Real Madrid. Quizá, el técnico del Girona apostaría por tensionar menos las horas previas. "Si pudiera, haría otra charla. Les dije que todos estarían pendientes de este partido, que estábamos en otra dimensión, que íbamos a ser capaces de jugar de tú a tú en el Bernabéu... Es verdad que con nuestra mejor versión podemos competir todos los partidos. Creo que haría una charla distinta".

Sin embargo, Míchel no se encoge y ahora ya admite que el objetivo de su equipo es "ir a Europa" porque así se lo han ganado. "Las críticas son buenas y las acepto. Soy muy consciente de mi responsabilidad", añadió el ex preparador del Rayo antes de ser preguntado por su futuro a partir del próximo mes de junio.

"Soy mejor entrenador gracias a este club. Quique Cárcel y el club han hecho que mi trabajo sea muy feliz, en otros equipos he tenido más problemas. Tengo contrato y estoy muy a gusto. Pienso que continuaré aquí. Estoy convencido (de ello)", sentenció Míchel, que tiene contrato con el Girona hasta junio de 2026.