FC BARCELONA

Muertos en el Camp Nou... diez años después del intento que acabó en los juzgados

Tras la polémica de 2013, el Barça abrirá ahora sí un columbario para 26.600 urnas. Exdirectivos cuentan a Relevo el anterior proceso.

Imagen del proyecto del nuevo Spotify Camp Nou. /FCB
Imagen del proyecto del nuevo Spotify Camp Nou. FCB
Alex Pintanel

Alex Pintanel

Que los estadios de fútbol sirvieran de columbarios, algo que ya sucede en el Atlético de Madrid, Espanyol y Betis, era inimaginable en los años 90, como ilustró el ex presidente del Betis, Manuel Ruiz de Lopera, en una famosa entrevista con Carlos Herrera. En ella relataba como un aficionado llevaba un pote de melocotón en almíbar de cristal a los partidos, y en él estaban las cenizas de su padre para que "vaya al fútbol cada domingo". "Como los de seguridad después ya no le dejaron entrar con el vidrio, lo metió en un envase de Puleva, y lo abrazaba cada vez que el Betis marcaba un gol", dijo Lopera entre las risas de los espectadores.

A Atlético de Madrid, Espanyol y Betis se les va a unir ahora el FC Barcelona. Será una de las novedades del nuevo Spotify Camp Nou. No es la primera vez que se intentó un proyecto de esta índole. Lo trató de arrancar el Barça de Josep Maria Bartomeu en 2013, pero no llegó a consolidarse y el caso acabó en los juzgados.

“Ahora vale todo. A nosotros se nos criticó con dureza”

El club catalán ha puesto en marcha el proyecto después de un intento fallido que acabó con polémica y que tuvo su resolución en los juzgados. Arrancó de la mano del exdirectivo Toni Freixa, que a través de su empresa de abogacía propuso a la compañía Giem Holding Unik SL, liderada por José Huertes, la construcción de un espacio memorial en el estadio azulgrana.

"El proyecto pasó por el departamento de marketing del club y se consideró una oportunidad muy interesante para obtener ingresos. Luego se aprobó en la Junta Directiva", explica a Relevo uno de los exdirectivos de la época y que vivió el caso de cerca. La idea nunca llegó a consolidarse. "El no tener unas perspectivas seguras sobre el futuro del Camp Nou hizo que el plan no prosperara", nos cuenta gente cercana a la operación.

La empresa encabezada por Huertes, incluso, cobró a algunos de los socios mientras se llevaba a cabo el proyecto y llegó a montar un espacio selecto en Barcelona mientras la idea seguía su curso. Tras varios tira y afloja, y a partir del referéndum de l'Espai Barça que se celebró en 2014, se paralizó todo.

"Es una muy buena idea. Cuando nosotros lo ofrecimos había dudas sobre el proyecto del Espai Barça. Actualmente con el estadio ya en construcción el producto es mucho más fácil de vender. Ahora sí que se puede comercializar", nos explica el exdirectivo. "Nos dijeron de todo, que cobrábamos comisiones. Se nos criticó mucho y se fue muy injusto con nosotros. Ahora nadie dice nada", añade.

El caso acabó en los juzgados y la empresa Giem Holding Unik SL se querelló contra el Barça, Josep Maria Bartomeu y Toni Freixa. En 2016 la Audiencia de Barcelona archivó el caso. "Sabíamos que no habíamos hecho nada ilegal. Nos lo trabajamos muy bien y fue una lástima que al final no pudiéramos seguir hacia adelante pero estábamos en un momento de inestabilidad que no ayudó a que el proyecto de los columbarios fuera una realidad", comenta el exempleado de la institución azulgrana.

“El rendimiento económico es a largo plazo”

De la mano de Coral Memorial, una empresa liderada por Rubén Tamarit, accionista principal de la compañía que intentó la construcción del columbario en 2013, el Barça ha vuelto a reactivar el proyecto. Solo genera beneficios. En el club ven una oportunidad inmejorable para aumentar los ingresos sin tener gastos.

"En nuestra época nos pagaron un millón de euros al principio y luego teníamos en mente un reparto de ingresos equitativo. Nos repartíamos el 50% de cada nicho. Ahora desconozco las cantidades que ha pactado el club pero seguro que no ponen ni un euro. La empresa es la que se encarga del servicio", valora el exdirectivo.

El RCD Espanyol es uno de los tres clubes de LaLiga que ya cuentan con un columbario en el mismo estadio blanquiazul desde 2010 a petición de los socios. "El negocio es a largo plazo. El rendimiento económico no es inmediato. Los precios de la urna individual oscilan entre los 2.000 y 3.000 euros y actualmente tenemos 60 urnas", explica un alto cargo de la entidad periquita a Relevo. 

El espacio que se situará en el nuevo Camp Nou tendrá una capacidad para 26.600 urnas funerarias en un espacio de 180 metros cuadrados. Los precios de los columbarios que comercializará el Barça oscilan entre los 250 y los 6.000 euros.