Nico Williams y Lamine Yamal, la rara avis de los extremos de ahora que recuerdan a Neymar

El Barça y Laporta tienen un sueño este verano: juntar a Nico Williams y Lamine Yamal. Más que un deseo, parece ser una realidad. El club blaugrana da por segura la llegada del extremo del Athletic, siempre y cuando se solventen los problemas económicos. La gran relación y actuaciones de ambos futbolistas en la Eurocopa ha hecho levantar la ilusión entre el barcelonismo, que sueña con verlos vestidos de blaugrana en Montjuic haciendo esos bailes que tanto recuerdan a Neymar, su ídolo.

Nico y Lamine son una rara avis de los extremos de hoy en día. España se estaba acostumbrando a un tipo de bandas muy poco verticales, muy asociativos y que parecían un centrocampista más que no un delantero. Ejemplos de ellos son Asensio, Sarabia o Ferran Torres, futbolistas claves en el esquema de Luis Enrique en la España de antes de Nico y Lamine.

No tan solo en la Selección, sino en LaLiga con extremos como Raphinha en el Barça, Samu Lino en el Atlético que se ha reconvertido a carrilero o Fornals en el Betis, que es más un centrocampista tirado a banda que no un extremo. Incluso, en el panorama internacional, Grealish en el Manchester City sería un gran ejemplo. El inglés es un jugador que retiene mucho la pelota para asociarse con sus compañeros, pero que no tiene tanto uno contra uno y fue clave en el triplete que consiguió el conjunto inglés hace una temporada.

Sin embargo, el futbol de Nico y Lamine es alegre, divertido, vertical y de regate. Un futbol de calle. Un juego atractivo por el que vale la pena pagar una entrada para ir al estadio a verlos. Los extremos de la Selección no tienen miedo a nada. Si se equivocan, lo vuelven a intentar. Si la pierden, la quieren volver a tener. Y si aciertan, no paran. No tienen temor a fallar, un futbol que recuerda al de Neymar. Además, si se les suma a los bailes que hacen después de marcar un gol, ya parecen una calcomanía del extremo brasileño.

En varias ocasiones, Lamine Yamal ha reconocido que el mejor jugador de la historia es Leo Messi, pero su ídolo es Neymar. "Me hacía ir a ver los partidos y divertirme. A veces me salen sus regates de haberlo visto tanto", reconoció en una entrevista reciente al Mundo Deportivo. Mismas palabras que ha repetido a otros medios durante la Eurocopa.

Lamine émula los regates de su ídolo, de tanto verlos en vídeos y de sus recuerdos, de ir al Camp Nou a divertirse. Aunque esta Eurocopa ha dejado claro que no tan solo idolatra a Neymar por su forma de jugar, sino por sus bailes, dentro y fuera, del terreno de juego. Mismo ídolo que su amigo, Nico Williams, y se han encargado de demostrarlo en esta Eurocopa. El gol del 3-1 del extremo del Athletic ante Georgia nos dejó una de las imágenes del torneo. El baile, junto a Lamine, de 'Eu quero chu eu quero cha', una canción brasileña que ya bailaba Neymar en 2012.

Las muestras de admiración al actual jugador del Al-Hilal no se quedan ahí. Nico Williams hizo estallar la locura en España con el 1-0 en la final contra Inglaterra. Después de bailar con Lamine, celebró el gol emulando un mítico festejo de Neymar sacando la lengua y con las manos en la cabeza. "Es una inspiración para mí. Es un extremo que me gustaba ver de niño. Siempre intentaba imitar sus regates, aunque no me salgan muy bien. Es un ídolo", reconoció Nico tras ganar la Eurocopa.

El aura de Nico y Lamine es muy parecido al de Neymar. No tan solo por su fútbol, bailes y festejos, sino por el aspecto en las celebraciones. Los jóvenes extremos de la Selección celebraron el título de la Eurocopa en España con gafas de sol y gorra hacia atrás, un look que recuerda al propio Neymar cuando ganó el triplete con el Barça en 2015.

Neymar no se ha quedado atrás en toda esta historia. Después de conseguir la Eurocopa con España, el astro brasileño quiso felicitar a Nico y Lamine. El extremo blaugrana subió un post a Instagram con fotos de la final ante Inglaterra y Neymar le contestó con un emoticono de aplausos. Por su parte, a Nico le contestó el mismo post con un emoticono de la lengua hacia fuera junto a dos manos a sus lados.