Por qué los niños no pueden llevar una camiseta del Espanyol a Montilivi y sí una del Girona al RCDE Stadium

El encuentro entre Girona y Espanyol de la primera vuelta de LaLiga estuvo marcado por lo que sucedió en el césped, pero también en la grada y en los aledaños del estadio de Montilivi. En el verde, los de Míchel vapulearon a los pericos; en 27 minutos ya le habían metido cuatro goles a su rival, en un jornada "de vergüenza" para los blanquiazules que casi se lleva a Manolo González por delante y que acabó con un tenso cara a cara entre los aficionados desplazados a Girona y Fran Garagarza, y una reunión a medianoche en Sant Adrià organizada por La Curva para pedir explicaciones al club.

Pero antes de todo eso, en la previa del encuentro, se sucedió otro polémico episodio protagonizado por Gorka, un niño de cinco años. El pequeño aficionado blanquiazul, que, acompañado de su abuelo se disponía a acceder a la grada (no visitante), iba ataviado con la camiseta de su equipo. Y la seguridad privada del estadio de Montilivi le obligó a taparse la zamarra que llevaba puesta, al tiempo que le decía "me sabe mal, caballero".

En las imágenes, que corrieron como la pólvora a través de redes sociales, se ve como el menor tuvo que ponerse una sudadera negra encima para que no se viera la camiseta para acceder al recinto. La razón por la cual Gorka no podía lucir los colores de su equipo es porque el partido fue declarado de alto riesgo por parte del Comité Antiviolencia

Fue así, principalmente, por los incidentes que ocurrieron hace dos temporadas, cuando muchos seguidores pericos compraron entradas en otra ubicación que no fue la visitante y hubo altercados durante y al final del encuentro, incluso dos aficionados acabaron detenidos. Aquel fue el día más crítico de la "falsa" y sobrevenida rivalidad que enfrenta a gerundenses y pericos desde hace un tiempo.

Volviendo al episodio con Gorka, la norma dice que un partido de alto riesgo implica "sistema de venta de entradas, separación de las aficiones rivales en zonas distintas del recinto, control de acceso para el estricto cumplimiento de las prohibiciones existentes y las medidas previstas en el artículo 6 que se juzguen necesarias para el normal desarrollo de la actividad", de ahí que ningún aficionado perico, como era el caso de Gorka, pudiese estar en una zona que no fuera la grada visitante con simbología perica, pese a tener cinco años.

En el encuentro entre Espanyol y Girona en Cornellà-El Prat de este lunes 10 de marzo, los seguidores gerundenses podrán ponerse la camiseta de su equipo sin ningún tipo de problema; en la grada visitante o en cualquier otra zona del estadio. ¿Por qué? Pues porque las autoridades pertinentes no han considerado que sea un partido de alto riesgo y la reglamentación será la habitual que con el resto de jornadas en Cornellà-El Prat.