Una de esas noches que se clavan en el corazón de Florentino Pérez

El día con más focos de lo que llevamos de curso, la noche de mayor catástrofe para el Real Madrid. Todo el mundo vio cómo el Barça noqueaba al conjunto blanco en el Clásico, en su estadio y ante la mirada del público de cada rincón del planeta. Un 0-4 que sonroja las debilidades del cuadro de Carlo Ancelotti y eleva a su máximo rival, ya a seis puntos de distancia en Liga y favorito para los títulos esta campaña.

En el palco del Santiago Bernabéu el desastre del equipo merengue dolió especialmente. Sabían que era una cita clave en la temporada, un evento marcado en rojo en su calendario. El encuentro con mayor repercusión a nivel global, y el Real Madrid quedó retratado con una goleada. Una de esas noches que se clavan en el corazón de Florentino Pérez.

Lo que iba a ser una campaña de más éxitos, con una nueva Champions en sus vitrinas y el flamante fichaje de Kylian Mbappé, muta ahora en un período espinoso para el madridismo. Todo lo contrario que el Barça, ahogado en lo financiero y con la sombra de Negreira, pero con una plantilla que ilusiona, un entrenador que ha cambiado el panorama del equipo y una base clara en la cantera culé. Exhibieron su momento de forma en Champions contra el Bayern y este sábado en el Clásico. Otra vez aspirantes en Europa y con la Liga bien encaminada.

Los que conocen de cerca a Florentino Pérez saben que el 0-4 de este sábado no se le olvidará. Y hay asuntos del primer equipo que empiezan a impacientarle, con Carlo Ancelotti en el centro de la diana. La situación del italiano comienza a ser delicada. Si bien es cierto que mantiene el apoyo de la directiva, con la que guarda una gran sintonía, la debacle ante el Barça podría alterar el guion.

La derrota en el Clásico ha dañado el prestigio del club y veremos cómo afecta el golpe en estas próximas semanas. Un varapalo ante su máximo rival ya detonó despidos de entrenadores en el Real Madrid, como ya ocurrió en los casos de Benítez o Lopetegui, con Florentino como presidente. Con Ancelotti no se prevé ningún efecto inmediato, pero sí consecuencias.

En los pasillos de Valdebebas se cuenta que para Florentino Pérez hay tres eventos canónicos en cada curso: la final de Champions, los partidos contra el Barça y la gala del Balón de Oro. Justo este último va a coincidir con la crisis del Clásico, con Vinicius Júnior como protagonista.

Todas las apuestas dicen que el futbolista brasileño será coronado este lunes en París con un premio sagrado en el Real Madrid. El Balón de Oro luce de manera especial en el club blanco, y lo que iba a ser una fiesta ahora queda empañada con el drama de este fin de semana. Florentino, que siempre ofrece declaraciones en esta gala cuando alguno de sus jugadores recibe el galardón, mostrará su orgullo por Vinicius, hecho a sí mismo en Valdebebas, y tendrá que capear con la herida del Clásico en París.