El patrocinio DANI y la sombra de Sánchez Llibre que nunca se ha ido del Espanyol: "Hay que dar gracias a Chen; la bola nos habría ahogado"

"La historia se repite. 30 años después, DANI vuelve a estar en el pecho de la camiseta del Espanyol", con estas palabras de Xavi Andreu, director de comunicación de la entidad blanquiazul, arrancó el acto de presentación del acuerdo entre el club catalán y la empresa Conservas DANI, el patrocinador más emblemático de la historia del Espanyol.

El logotipo de DANI lució por primera vez en la camiseta del Espanyol en la temporada 1994-95, convirtiéndose en el primer patrocinador moderno del club, así como el más longevo, pues hasta el 2000 siempre apareció en la parte frontal de la zamarra perica. Unos años después, en la 2003-04, la publicidad de la empresa de Vilassar regresó por un año. Y ahora lo hace por tercera vez, también con un contrato de una temporada.

No se desvelaron las cifras del acuerdo, aunque ambas partes señalaron que es una buena operación para todos. El presidente de la empresa Dani Sánchez Llibre (Vilassar de Mar, 1950), con su tono desenfadado y cercano habitual, explicó que el club hasta el momento no tenía ningún patrocinio para la camiseta y que aceptó la propuesta, aunque no pretende "hacer ningún tipo de negocio" con el Espanyol, cuya "situación no es tan buena como parece": "Yo dije 'firmemos por un año' y así Toni Alegre y el equipo de marketing tienen tiempo para buscar alguien que pueda entrar si paga más".

Se le entendió todo al empresario del Maresme, que bromeó incluso con el naming right del estadio, vacío desde la ruptura con Stage Front: "Yo como perico pondría hasta el nombre del campo, pero no puedo". Sánchez Llibre fue el verdadero protagonista de un acto, concluido con un piscolabis a base de conservas, que refuerza el vínculo histórico entre la entidad y la familia Sánchez Llibre. "No se entendería DANI sin el Espanyol ni el Espanyol sin DANI", dijo el director de marketing, Toni Alegre. Imposible resumirlo mejor.

La historia de Dani Sánchez Llibre con el Espanyol va mucho más allá de su patrocinio. Arrancó en 1992, cuando el empresario entró a formar parte de la entidad como consejero responsable del fútbol base perico. El club estaba en una "situación muy crítica" -"no sé si más o menos que ahora", puntualizó- y lo primero que hizo el directivo fue "firmar un aval de 500.000 millones de pesetas porque no se podía pagar ni sueldos ni agua ni luz", tal y como desveló el propio Sánchez Llibre.

En 1994, el presidente Perelló le ofreció la posibilidad de ser espónsor del Espanyol. A Sánchez Llibre se le hizo "una montaña", tuvo "miedo y respeto" en vincular su marca con el club, pero terminó aceptando tras convencerse por medio de unos "psicólogos". Una historia rocambolesca que dio origen a una de las publicidades más míticas de la historia de LaLiga y que fortaleció el lazo entre el empresario y la entidad.

El 26 de junio de 1997, Dani Sánchez Llibre se convirtió en el presidente de un Espanyol que era propiedad de la familia Lara Bosch y que vivía un momento muy delicado. Era un regalo envenenado. Solo entrar tuvo que comerse el marrón de firmar la demolición del estadio de Sarrià, emblema perico desde su construcción en 1923. Pero, con su cercanía y su "flor", se ganó al aficionado y se mantuvo en el cargo 14 temporadas, hasta 2011. La suya es la presidencia más longeva de la historia del Espanyol.

Entre medias, el Espanyol, acostumbrado a ser un equipo ascensor a principios de los 90, vivió la mejor época deportiva de su historia con dos títulos de Copa del Rey, ningún descenso, pese a que estuvo hasta en tres ocasiones al borde de bajar, y varias participaciones en Europa, incluido un subcampeonato de UEFA en 2007. "Mi mejor recuerdo es la final de la Copa del 2000, el gol de Tamudo. Hacía 60 años que no ganábamos un trofeo. En la media parte estaba afónico de la emoción y el miedo de que nos marcaran", comentó Sánchez Llibre. Su peor recuerdo es el fallecimiento de Dani Jarque.

El expresidente blanquiazul, que tuvo muchos detractores y al que se le achacó su gestión económica, es el principal responsable de que el Espanyol levantara un estadio propio a partir del 2003, que fue inaugurado en 2009. Y una ciudad deportiva, el vivero de futbolistas sin el cual no se entendería la entidad. Tanto el RCDE Stadium, cuya construcción endeudó a la institución hasta límites casi insalvables, como la Dani Jarque son el principal patrimonio de un club, del cual Sánchez Llibre y sus aliados fueron máximos accionistas a partir de 2009, cuando compraron el paquete de acciones a Lara.

En 2016, Chen Yansheng y Rastar Group adquirieron el 54% del Espanyol a Sánchez Llibre, Condal y sus afines, convirtiéndose en dueños del club. Desde entonces, a través de ampliaciones de capital y compra de participaciones a pequeños accionistas, el empresario chino ha alcanzado más del 99% de la totalidad de la propiedad de la entidad, cuya masa social ya ha verbalizado su descontento con la gestión actual.

Pero, ¿por qué se deshizo del club Sánchez Llibre? "La bola se hizo muy grande, con un estadio que yo creo que nos precipitamos y la gran suerte que tuvo el club es que un empresario chino se hiciera cargo de todo. He sufrido mucho por el Espanyol y sigo haciéndolo. Hay que dar las gracias a Chen de que se hiciera cargo del club porque teníamos una bola que nos hubiera ahogado", aseguró un Sánchez Llibre que tras vender sus acciones siempre ha seguido vinculado, de un modo u otro, a la entidad. Primero como asesor externo de Chen Yansheng, y después como patrocinador del fútbol base y, ahora, del primer equipo. Como hace 30 años. Su sombra nunca se ha ido del Espanyol.

"Yo le he comentado a Mao, que le diga a Chen que debemos seguir en Primera y nosotros le daremos esa pizca de suerte que tenemos, pero voy a estar al margen de pedirle fichajes. Yo no me voy a meter en temas deportivos", comentó el expresidente sobre la situación actual de una entidad que se asocia ahora con Conservas DANI, "una empresa ganadora", cuyo presidente, en su etapa como dirigente blanquiazul, siempre tuvo fama de ser extremadamente afortunado y salir airoso de todas las situaciones comprometidas.

"Calzón me decía que tenía una flor… Y ahora esa flor vuelve, como mínimo, no digo nada de Champions porque ya me cayeron muchas ostias en su momento", también expresó entre risas un Sánchez Llibre tan positivo como siempre, pese al delicado momento que atraviesa la entidad: "Cuando oigo a los pericos parece que estemos sentenciados… ¿Quién te dice que este año el Espanyol no será el equipo revelación? Llevar DANI ya es una ventaja".