Presa encuentra explicación a la indignación de la afición del Rayo sobre el cambio de estadio: "Habrá que ver si no tienen negocios en los alrededores"
El presidente del Rayo Vallecano habló en Radio Marca sobre los intereses del público con el nuevo campo.

Raúl Martín Presa ha hablado en Directo MARCA de Radio Marca sobre la actualidad del Rayo Vallecano. El presidente ha vuelto a hacer frente al sentir general de su afición sobre el ya famoso tema del cambio de estadio. Pese a que Madrid se ha comprometido a realizar una serie de arreglos en unas obras que ya han comenzado, no es suficiente para la directiva rayista. Estas remodelaciones no mejorarán la instalación como tal, sino que se centrarán en corregir una serie de desperfectos que incluso pueden llegar a ocasionar un accidente si no se subsanan. Sin embargo, la intención no es simplemente solventar estos contratiempos, sino poder crecer de la mano de un mejor recinto.
De ahí que se haya levantado una polvareda tremenda sobre el día a día rayista, entre una afición que, de forma generalizada, no quiere abandonar su estadio ni muchísimo menos Vallecas y un presidente que insiste una y otra vez en la construcción de un nuevo campo con más capacidad para que el Rayo pueda crecer y hacerse grande en Primera División. De momento, Raúl Martín Presa siempre ha insistido en que no quiere marcharse del barrio, sino que, en caso de que se construya un nuevo feudo, este siga allí, a solo unos kilómetros del actual Estadio de Vallecas. Un reclamo que los seguidores miran con recelo.
Entre tanto, las declaraciones públicas siguen llegando a cuentagotas. En este caso, en Radio Marca, Martín Presa se explaya: "Habría que ver si la gente que se queja de cambiar de estadio no tiene intereses privados o negocios en los alrededores". Una sentencia firme que viene a exponer cómo cambiar el estadio de localización haría mella a las decenas de bares de sus alrededores. Esos presuntos intereses habrían hecho eco, según el presidente, para condicionar el sentir general de los seguidores. Hasta el momento, hay una evidente tendencia de estos a defender con ahínco que su campo siga exactamente en el lugar en el que está.
"La idea es que se quede el estadio lo más cerca posible de donde está ahora el estadio. 300 metros. Se intentará menos de 5km que hay de distancia hacia la ciudad deportiva. Estamos trabajando en esa línea. Es una necesidad vital. El que necesita un transplante, si no, no vives. Será muy difícil. Es un órgano que te hace vivir. (...) Muchas veces en la sociedad la gente tiende a hacer lo políticamente correcto. Y muchas veces no es lo correcto. Hay que tener personalidad para hacer los correcto aunque sea lo políticamente político. Me lo transmitieron mis padres. A veces hacer lo correcto es jorobado", prosigue.
Además del estadio, Raúl Martín Presa también ha hablado de la reciente renovación de Iñigo Pérez, que ha prorrogado su vínculo con la entidad por una temporada más. El entrenador y el club postergaron la decisión hasta estos días porque el objetivo primordial era asegurar la continuidad en Primera División. Hasta entonces, mejor aguantar. Ahora que no es matemática la presencia del equipo en la élite, como está virtualmente lograda ya era momento de planificar la próxima campaña. Por el camino, hubo cientos de rumores sobre si quería marcharse a Osasuna o si su continuidad pendía de un hilo. Ahora, el presidente saca pecho: "Apostamos por Iñigo cuando no había entrenado todavía y está cumpliendo nuestras expectativas. Estábamos convencido de que continuaría".
“A mi madre no le dio un infarto gracias a la intervención de la Policía”
El presidente del Rayo Vallecano también lleva sufriendo en los últimos años una importante disparidad de opiniones con aficionados, peñas o la grada de animación Bukaneros. Este ha reclamado en más de una ocasión incidentes que jamás deberían suceder. Esta vez, sin poner nombres, habló sobre una escena desagradable que vivió en Vitoria: "Mi madre, que tiene 84 años, tuvo que vivir cómo unos energúmenos me pararon en un semáforo y me agredieron verbalmente. No le terminó dando un infarto gracias a la intervención de la Policía". Afortunadamente, el asunto se quedó en un susto.