MERCADO DE FICHAJES

El puzle del Girona en el mercado de fichajes: "Nuestra plantilla es un caramelo, pero sabremos solucionarlo"

El club catalán trabaja en confeccionar el equipo para debutar en Champions la temporada que viene.

Dovbyk, Yan Couto y Sávio no tienen garantizada la continuidad en el Girona. /GIRONA FC
Dovbyk, Yan Couto y Sávio no tienen garantizada la continuidad en el Girona. GIRONA FC
Lu Martin
Marc Mosull

Lu Martin y Marc Mosull

Tras el fiestón del Girona por las calles de la ciudad de los cuatro ríos para celebrar la mejor temporada de su historia y la clasificación para la próxima Champions League, buena parte de sus futbolistas se fueron de vacaciones; algunos como Aleix García -ya descartado por De la fuente- Tsygankov, Dovbyk o Savinho se concentraron con sus selecciones para preparar la Eurocopa y la Copa América. Pero en las oficinas de Montilivi no para la faena: Quique Cárcel y sus colaboradores en el área deportiva del club, apenas se cogieron un par de días libres tras el festejo, pues tienen muchas carpetas abiertas encima de sus mesas.

"Tenemos un puzle por hacer, pero sabremos solucionarlo", reconocen miembros del equipo de Cárcel, conscientes de que se viene un verano movidito en La Vinya. De momento, nada ha cambiado desde hace dos semanas, solo que las negociaciones tienen muchos frentes. En principio, el objetivo del Girona es traer un central, eso seguro. A partir de ahí, se tendrá que fichar en función de lo que se venda; y no son precisamente pocos los futbolistas gironins que han despertado el interés de otros clubs tras el magnífico curso de los de Míchel. Desde Montilivi lo tienen claro: "Ahora mismo, nuestra plantilla es un caramelo".

Uno de los futbolistas más cotizados del Girona es Aleix García. El centrocampista de Ulldecona tiene una cláusula de 20 millones y muchas novias; el primero que realizó una oferta por él fue el Bayer Leverkusen; incluso Xabi Alonso llegó a hablar con el él. También insinuó meses atrás su interés el FC Barcelona, pero hasta la fecha no ha movido ficha. En los últimos días, quien sí lo ha hecho ha sido el West Ham, que parece ser quien más números tiene de cazar la pieza. Lopetegui, entre otras cosas, es íntimo amigo de Míchel, así que ha seguido mucho a los rojiblancos y sabe que el mediocampista catalán es una perla pulida. De todos modos, el jugador de les Terres de l'Ebre no tendría ningún problema en quedarse en Montilivi para disputar la Champions, pues se siente importante y se sabe el epicentro del juego del equipo. De seguir, el club le mejoraría el contrato y le bajaría la cláusula de rescisión.

Media Europa suspira por los ucranianos

El verano pasado, el Girona desembolsó unos ocho millones para hacerse con el 70% del pase de Artem Dovbyk, el fichaje más caro de su historia y que ha terminado siendo Pichichi de LaLiga. Es evidente que se ha revalorizado, y, a día de hoy, nadie tiene claro si el león ucraniano seguirá metiendo goles en rojo y blanco porque su cláusula es de apenas 40 millones y media Europa acecha, en especial los clubes de la Premier.

Su compatriota Viktor Tsygankov vale diez millones menos y también tiene muy buenas ofertas. En su caso, además, el club entiende que es un futbolista al que podrían encontrar un sustituto de garantías de manera algo más fácil que en el caso del 9; no en vano, el gol es más caro y difícil de localizar. Pero en eso están, claro, los scoutings del Girona, dispuestos a encontrar oro debajo de una piedra, como han demostrado ya que son capaces de hacerlo. Ni el presidente ni los dueños de la entidad pierden los nervios, conscientes de que lo más probable es que el goleador vuele. "Pasará lo que deba de pasar, con la calma. Ya veremos", se le ha escuchado decir a Pere Guardiola.

Iván Martín es otro de los jugadores más cotizados, después de haber hecho una excelente temporada. El Villarreal puede recuperarlo pagando cuatro millones de euros; tiene margen hasta el 30 de junio para hacerlo. No está claro que el Submarino Amarillo lo quiera fichar para que juegue en la Cerámica, pero quizás sí para hacer negocio con él. Y ahí podría entrar el Athletic Club, ya que el centrocampista gironí es originario de Bilbao. Por el momento, todo está en el aire. Tampoco está claro que los campeones de Copa tengan mucha voluntad de ficharlo, porque de momento no han abierto boca.

Lo que sí tienen asumido en Girona es que tres de los cuatro jugadores citados hasta el momento -Aleix García, Dovbyk, Tsygankov e Iván Martín- van a salir; y en ese escenario trabajan desde La Vinya, en encontrar hipotéticos recambios de nivel para los que se marchen. Además de reforzar la plantilla, en el caso de realizar un traspaso grande, el club tiene previsto ampliar y mejorar los contratos de otros de los jugadores importantes del equipo, caso de Arnau Martínez, por ejemplo, cuyo vínculo con la entidad finaliza en 2025.

Además, están negociando la renovación de Juanpe, un futbolista al que consideran importante dentro del vestuario, por veterano, y del que se fían como complemento para la defensa. Tras ocho campañas en el Girona, es peso pesado y por ello el club le ha ofrecido prolongar su vinculación una temporada más. Lo lógico es que las conversaciones lleguen a buen puerto, pero, por ahora, las diferencias están en el tiempo y el espacio. Además, su rendimiento este curso, cuando ha jugado, no ha podido ser mejor.

De la defensa, en principio, desaparecerá Eric García, de vuelta a Barcelona tras la cesión. En Girona estarían encantados de la continuidad del de Martorell, pero atisban muy complicada la operación, que se intentará. Borja García y Juan Carlos, ambos capitanes, también terminan contrato el próximo 30 de junio. El portero es absolutamente fundamental en el vestuario y todo hace indicar que continuará. Borja García, que no ha jugado ni un minuto a lo largo de la temporada a causa de sus problemas físicos, cerrará su etapa como rojiblanco.

Míchel liderará al Girona en la Champions

En este encaje de bolillos, el que no se va a mover es Míchel Sánchez, la pieza más importante del rompecabezas gerundense. El vallecano tiene ofertas, pero también tiene contrato, y ya dejó muy clara su voluntad de seguir creciendo en el Girona y de disputar la Champions League en Montilivi. Es un reto personal.

El asunto Miguel Gutiérrez, canterano blanco, es parecido al de Iván Martín porque el Real Madrid puede recuperarlo si paga ocho millones de euros. Al Girona le encantaría seguir contando con él, pues lo considera uno de sus imprescindibles, pero el balón está en el tejado del club campeón de Europa.

Savinho y el resto de cedidos

Parte de los pilares del éxito del Girona no son propiedad del club, sino futbolistas cedidos que deben regresar a sus clubs de origen tras el término de la temporada. Sávio Moreira, por ejemplo, es del City Group, lo cual significa que su continuidad no depende de la entidad gerundense. Si por ellos fuera, el extremo brasileño se quedaría toda la vida en Montilivi; Míchel se ha cansado de repetir que "es el mejor jugador que ha entrenado nunca". No es descartable que juegue el curso que viene en el Manchester City.

Míchel, en rueda de prensa. EFE

Con Yan Couto, la cuestión es calcada a la de Savinho. "Estoy viendo con mis agentes qué voy a hacer con mi futuro", comentó hace unos días el lateral brasileño en la concentración de su selección. Pablo Torre, como Eric García, debe regresar a las filas azulgranas. Con Gazzaniga, Daley Blind, David López, Yangel Herrera, Portu y Jhon Solís no hay caso. Tienen contrato en vigor y, en principio, seguirán vistiendo de rojiblanco. La vinculación con Toni Villa, que volvió a jugar en abril tras 363 días de baja, finaliza en 2025.

Las posibles llegadas

Ya adelantamos en Relevo el interés del club en Ladislav Krejčí, central zurdo del Sparta de Praga. La operación rondaría entre los diez y los 14 millones de euros, pero ni mucho menos está hecha porque otros grandes clubs también andan tras el defensor checo. Mismo escenario que con Luciano Rodríguez, un delantero uruguayo, del que se ha dado por hecho su fichaje por 15 millones de euros procedente de Liverpool de Montevideo. De cerrarse cualquiera de las dos incorporaciones se convertiría en el más caro de la historia de la entidad.

Oriol Romeu sigue gustando mucho en Montilivi, pero el Barça pide dinero por él y el Girona no parece dispuesto a pagar para recuperarlo; no se puede descartar ningún escenario en este asunto. Por su parte, el Diablito Claudio Echeverri, fichado en enero por el City Group procedente de River Plate, también es una posibilidad en forma de cesión, pero, como en el caso de Savinho y Yan Couto, es una decisión que no depende del Girona y que vendrá condicionada por la nueva relación entre el club catalán y el Manchester City, y las restricciones que plantee la UEFA para que ambos compitan en la Champions. En relación al caso Aimar Oroz, también existe un interés real por parte del Girona en una de las perlas de la cantera rojilla.

De todos modos, hay alternativas y soluciones para todas y cada una de las casuísticas concretas, dado que la dirección deportiva tiene controlados jugadores para cualquier posición del campo que se deba reforzar o reponer, en función de las piezas del rompecabezas que se le caigan. El mercado será largo y si en el club que preside Delfí Geli reconocen que "la plantilla del Girona es un caramelo" también saben que en el departamento que lidera el "arquitecto" Quique Cárcel son especialistas en encontrar agua en el desierto. Así que dan por hecho que el puzle de este verano, como el equipo, también será de Champions.