Quique pasa de los rumores sobre el banquillo: "Sabía que venía a un club intervencionista y me parece espectacular"

Los resultados producidos esta jornada pueden provocar que una victoria ante el Mallorca le permita al Sevilla mirar el futuro de manera menos angustiosa. El club sabe de la importancia de estas dos próximas y por eso ha querido durante toda esta semana, transmitir cierta confianza en torno a la figura del entrenador de manera privada. Mientras tanto, la dirección deportiva sigue sondeando el mercado sin tener claro todavía cuál es el mejor candidato posible para el proyecto futuro.

"Ya vamos tarde. Estamos casi en mayo y lo normal es que hubiesen salido infinitos nombres de entrenadores y jugadores. Preocupación ninguna. Más allá del partido de mañana no veo nada", ha respondido cuando se le ha preguntado por las alternativas que maneja el club publicadas en Relevo.

Lo que sí es una realidad es que no ha existido una gran conexión entre la parcela deportiva y el cuerpo técnico. Al menos en los gustos futbolísticos, algo que evidencia los pocos minutos que han tenido los refuerzos invernales. "Clubes donde la conexión y la comunicación es fluida entre directiva, cuerpo técnico y dirección deportiva, se hacen equipos más creativos y mejores. Me advirtieron que venía a un club donde son intervencionistas y a mí me parece espectacular. Hasta que te conoces y entiendes, pasa un tiempo, pero yo hablo con ellos todos los días. Y eso es espectacular. Siempre es bueno que los dirigentes valoren bien tu trabajo", explicó cuando le preguntaron que valorara el trabajo de Víctor Orta.

De reojo, un derbi que puede insuflar alegría a una afición muy castigada por una temporada inaceptable. Eso sí, sin olvidar que ganando al Mallorca, se puede afrontar de manera menos angustiosa. "Espero que afrontemos el partido ante el Mallorca con ánimo de revancha, con máxima seriedad y todas las alertas posibles puestas. Este rival compite y si gana o pierde es por la mínima. Hace un fútbol de contacto. Confianza ninguna. No lo hemos hecho en ningún momento. Y ahora que estamos más lejos del descenso, queremos estar más lejos todavía. Es tan importante el partido de mañana que no hemos pensado en él. Nos vamos a empapar de lo que significa el derbi cuando acabe el duelo ante el Mallorca. Es importante cómo llegar. Si llegamos con una victoria y con la ventaja suficiente con el descenso, sería mucho mejor", ha comentado Quique.

El técnico madrileño sabe que están ante una gran oportunidad de poder demostrar algo más en el tramo final de LaLiga. Pensar menos en el resultado y mejorar el juego: "Estamos en la búsqueda de encontrar un territorio más sano y fresco para que los jugadores puedan sacar su talento, sin necesidades. Estamos más cerca y eso buscamos mañana. Es un partido que nos puede dar la seguridad de disfrutar del resto de la competición. Todas las victorias se disfrutan y son buenas. Las que más han sido en casa, delante de tu gente y habiendo ellos disfrutado. Todas nos gustan. Victorias como ante Atlético y Real Sociedad es un camino que queremos recuperar. Una versión de un Sevilla reconocible. Buscar ante los nuestros no sólo el resultado, sino con contundencia". Mucho en juego para él, pero también para una plantilla que sufrirá una profunda revolución el próximo verano.