El Rayo deja congelada la renovación de Iñigo y su futuro bajo el recuerdo de un gol mítico: "Si no es por Tamudo..."
Raúl Martín Presa dejó claro en DAZN que no gestionará la próxima temporada hasta no salvarse.

El Rayo sigue en la pelea por Europa, aunque prefiera no decirlo muy alto, por lo que pueda pasar. Y no deja de ser cierto por otro lado que sigue sin sellar la permanencia, pese a estar a dos puntos de la Conference League, con 37 puntos en su casillero, en novena posición y diez puntos por encima del Leganés con solo diez jornadas por disputar. El empate ante la Real Sociedad, y además con buenas sensaciones, volvió a dejar presente la impresión de que este equipo está para mucho más que para salvar la categoría y ya está, pero desde dentro insisten en no armar revuelo e ir paso a paso.
Aunque es cierto que las posturas son similares, tampoco responden exactamente al mismo patrón. Raúl Martín Presa, presidente de la entidad, representa la cautela más absoluta. Tanto que en escasos minutos de conversación con DAZN en la previa del partido, no hizo más que insistir una y otra vez en sellar la salvación lo antes posible. Pese a que los compañeros trataron de sacarle algo de información sobre si continuaría o no Iñigo Pérez en mitad de los rumores de su posible llegada a Osasuna, él se mantuvo firme.
"Noticias… Muchas veces se dice, pero nosotros estamos centrados en la salvación. Aquí parece que el equipo está salvado y los objetivos están conseguidos. Desde aquí hago un llamamiento y llevo diciéndolo a los micrófonos ya un tiempo… Estoy proyectando una puntuación de 42 o 43 puntos de salvación, como cuando bajó el Deportivo o el Villarreal. Todavía nos faltan puntos, hemos tenido la desgracia de haber perdido muchas piezas importantes. Hoy tenemos un equipo de circunstancias, también en el Bernabéu… Con jugadores del filial en convocatoria. Tenemos que tener los pies en el suelo y no pensar en otra cosa que no sea sumar los puntos necesarios. De lo contrario será muy negativo para nosotros", expuso el mandatario.
Un discurso tan rotundo y sin citar a Iñigo que llegó el turno de la repregunta, pero no iba a cambiar un ápice la perspectiva. "No es el momento de hablar de Iñigo. La gente lo que tiene que saber es que hay que salvarse, otra cosa es lo que quiera saber. En eso estamos comprometidos y la planificación de la próxima temporada se hará cuando sepamos dónde está el Rayo la próxima temporada, cosa que ahora desconocemos. Sería una prepotencia desmedida de nuestros valores y de lo que transmitimos. Recuerdo ya siendo presidente, en 2012, con 21 puntos por jugarse teníamos 40 y si no es por Raúl Tamudo en un descuento no nos hubiéramos salvado porque sumamos 0 puntos de 18. Hay que ser muy humildes y precavidos".
Aunque, eso sí, sin renunciar a la ilusión: "El sueño de Europa cuando estemos salvados. Entonces se hablará del sueño". ¿Pero comparte el vestuario y el entrenador esta posición tan conservadora? Iñigo Pérez tampoco se ha salido de la línea en ni un solo momento, por lo que la idea sí es la misma: "El primer objetivo no está conseguido. Es verdad que está ahí, lo tenemos cerca, en la palma de la mano y solo nos queda cerrar el puño". Aun así, el entrenador insiste en que eso no afecta en absoluto a los jugadores o que, al menos, desde que empezó la temporada les ha insistido en mantener siempre la balanza en equilibrio y no dejarse llevar ni por salvación ni por Europa ni por nada que se le parezca. Tanto es así que estas palabras, en especial la segunda, resultan hasta tabú para él.
Lo cierto es que a nivel sensaciones el Rayo Vallecano se encuentra en un gran momento de forma, aunque eso no es lo que marquen los resultados. Este mismo domingo, pudo salir victorioso ante un gran equipo como la Real Sociedad, pero se quedó por el camino gracias al gol final del canterano Mariezkurrena. También mereció más ante Sevilla, Barcelona, Villarreal o Real Madrid. Hasta Imanol Alguacil lo expuso: "El Rayo ha tenido menos puntos de lo que su juego está diciendo". Desde el banquillo de Vallecas siempre la cautela por delante. Iñigo reconoce no mirar el calendario, estar enfadado y confiar en el proceso: "Si tú mereces ganar mucho, acabas ganando".
La planificación, en stand by
Ahora que el final de curso se acerca, comienzan los rumores y es momento de rescatar para la próxima campaña a los jugadores más destacados del equipo. O al entrenador. En este caso, Iñigo Pérez acaba contrato el próximo mes de junio y aún no ha firmado su contrato. Esta misma semana, han salido informaciones, que no constan a este medio, de que el entrenador se marchará y ocupará el banquillo de Osasuna, uno de los clubes de su vida.
Presa, lejos de perder los nervios, insiste en su manera de trabajar, aun con los riesgos que esta conlleva. El presidente ha confirmado públicamente que no puede planificar la temporada hasta saber dónde estará el Rayo Vallecano para entonces. Dicho de otra manera, todo apunta a que hasta que el equipo no logre la permanencia en Primera División no empezará a gestionar renovaciones trascendentales como la de Iñigo Pérez o la del propio Óscar Trejo, goleador en la noche de este domingo. También toca gestionar la de Aridane (único central sano junto a Lejeune), Gumbau, Pathé Ciss, Embarba, Sergi Guardiola o, sobre todo, el trascendental Batalla.
Raúl Tamudo, siempre en la memoria rayista, es un buen aviso para comprender por qué en el barrio nadie quiere dar nada por sentado...