El regreso de Sergio Ramos al Santiago Bernabéu entre mensajes con Modric y Lucas, entradas para su familia y la duda del homenaje
El defensa se ha ejercitado como siempre esta semana, aunque su reencuentro con la afición del Madrid, 1.456 días después sí será especial.
"De momento Sergio está viviendo la semana de la misma forma que siempre". Ésta es la respuesta que Relevo ha recibido de todos los sectores que conforman el Sevilla. Ni la dirección deportiva, ni los consejeros, ni sus propios compañeros, han notado síntomas evidentes que denoten que el partido de este domingo es especial, aunque la procesión del camero vaya por dentro. Sergio Ramos no quiere ningún despiste. Sabe que, si su figura era importante dentro del vestuario desde el mismo día que pisó suelo sevillano tras aterrizar su vuelo chárter, tras la salida de Fernando y Rakitic su experiencia y relevancia cobra una mayor importancia.
Pero, evidentemente, no es una semana más para el defensa. Aunque ha participado como uno más en los entrenamientos, con las mismas rutinas habituales que lo convierten siempre en uno de los últimos en abandonar la ciudad deportiva cada día, en el horizonte se encontraba el regreso al Santiago Bernabéu. Desde el 1 de marzo de 2020, en un Clásico que terminó 2-0, días antes de que la pandemia del coronavirus suspendiera la actividad en España y que provocaría el traslado del Real Madrid a Valdebebas, no se produce esa circunstancia.
Este domingo habrán transcurrido 1.456 días y casi cuatro años. Sergio Ramos se reencontrará con la que fue su afición durante 16 temporadas. 671 partidos oficiales con la camiseta madridista, en los que anotó 101 goles. Cuatro Champions, cuatro Mundiales de Clubes, tres Supercopas de Europa, cinco Ligas, dos Copas del Rey y cuatro Supercopas de España. 22 títulos que lo convirtieron en una leyenda del Real Madrid. Si parece que el club blanco le prepara un homenaje al camero como reconocimiento a esa trayectoria y dejando a un lado las rencillas que se produjeron con su adiós -aunque él a día de hoy lo desconoce-, para Sergio Ramos también era un día marcado en el calendario cuando decidió regresar al Sevilla. Acompañado de toda su gente más cercana, que ya adquirió sus entradas para acompañarlo en el estadio, el defensa tendrá ese homenaje de una afición que lo considera como uno de los suyos, por lo que también se ha preparado emocionalmente durante la semana.
Por eso quiere intensidad. A pesar de las dos victorias y un empate en los tres últimos partidos, su Sevilla necesita puntos que ratifiquen de forma definitiva que el peligro del descenso está olvidado. No ha desaparecido de su mente todos los sinsabores vividos en su regreso a su casa, donde desde el principio ha querido ganarse con rendimiento el perdón del sevillismo. También está presente, a lo lejos su continuidad, que tendrá los números que él quiere con un rendimiento elevado y qué mejor que hacerlo en un escenario que él conoce bien. Su deseo es que el Sevilla ofrezca una buena versión y que pueda plantarle cara al Madrid, aunque sabiendo que será un partido complicado.
"Me voy a sentir como en casa, seguro", ha asegurado desde la ciudad deportiva del club hispalense en una entrevista con LaLiga. "Son muchos años los que he pasado allí, viviendo los momentos más importantes de mi carrera. y tengo un recuerdo maravilloso de la gente, de la afición y de mis compañeros. Va a ser un momento único", confesaba el camero. Ya ha intercambiado mensajes con algunos de sus excompañeros con los que sigue manteniendo una excelente relación -Luka Modric y Lucas Vázquez, entre ellos-, pero, sobre todo, Sergio tiene en mente un día especial. Ese reencuentro con el Santiago Bernabéu, su otra casa, y con una afición que lo elevó a su santoral.