Los secretos del 'no' de Parejo y el Barça: las 24 horas clave y una renovación con el Villarreal a punto
Relevo ha conocido las claves de un movimiento que nunca se dio.

El mercado estival arrancó con turbulencias en el Villarreal. El F.C Barcelona se lanzó a por Daniel Parejo, capitán general del submarino de Quique Setién, y el propio Dani estaba preparado para dar el salto definitivo en su carrera y ponerse a las órdenes de Xavi Hernández. Fueron muchas las noticias, los rumores y las informaciones que situaron a Parejo con la camiseta blaugrana. Sin embargo, de un día para otro se hizo el silencio. No se volvió a saber nada más de Parejo y quien acabó fichando fue Oriol Romeu. ¿Qué pasó? Relevo ha conocido al detalle la historia.
Todo nace en el mercado invernal de 2023. Por aquel entonces Xavi ya sondeó a Parejo y el mismísimo día 31 desde 'can Barça' trasladaron al jugador que si ofertaban por él, esperaban que diera el paso. Dani en ese momento dijo 'no' porque veía excesiva competencia en la medular y porque no quería dejar tirado al club amarillo a última hora. Pero emplazó a Xavi a firmarle en verano, cuando tendría muchas más facilidades. ¿Por qué más facilidades? Porque Dani, como avanzó Relevo en abril, tenía una cláusula que le permitía quedar libre del Villarreal.
Llegó el mes de junio y el Barcelona llamó a Parejo. Desde la entidad trasladaron al jugador que estaban muy interesados en contar con él y le pidieron que ejecutara la cláusula de su contrato que le permitía quedar libre. Parejo exigió que, para hacerlo, el Barcelona le ofreciera garantías de que le firmaría, pues como es lógico no quería rescindir con el Villarreal, club en el que está a gusto y feliz, y después quedarse en la estacada.
El Barcelona empezó a dar largas a Parejo, porque su plan A era Brozovic, mientras que el jugador llegó a tener apalabrados salario, años de contrato y todo con el Barça si finalmente se liberaba de su vinculación al Villarreal. Sin embargo, los días pasaban y los catalanes no traducían el acuerdo verbal a un contrato por escrito y ahí Dani empezó a meditar ese 'sí' tan rotundo que le había dado al Fútbol Club Barcelona.
Principalmente, porque la cláusula de Parejo para poder quedar libre concluía el 4 de julio de 2023, de modo que no tenía demasiado tiempo para poder ejercerla. Además, desde la entidad amarilla apremiaban a Dani a decidir y trasladarles si se iba o no para empezar a planificar su plantilla y Parejo, que le tiene un respeto enorme a la familia Roig, no quería tampoco marear al club.
Llegamos al 29 de junio y a las 24 horas decisivas. Ese día Brozovic firmó por el Al-Nassr y la llamada del Barcelona a Parejo llegó. Dani, algo quemado de la situación, exigió al Barcelona que en 24 horas quería tener su futuro resuelto, dicho de otra forma, antes del las 23:59 del 30 de junio quería que el Barcelona le ofreciera un contrato por escrito, solo así rescindiría con el Villarreal.
Pero el Barcelona no dio el paso y pidió a Parejo algo más de tiempo. Dani entonces trasladó que no iba a ejercer su cláusula de liberación y descartó ir al Barcelona. El Barça todavía podía comprar a Parejo, pues apenas le resta un año con el Villarreal, pero su presupuesto para esa posición era bajo (fichó a Romeu por 3,5M). Y Dani trasladó que ni él iba a presionar al Villarreal por una venta a mitad de julio cuando ya les había dicho que se quedaba, ni el Villarreal aceptaría una cantidad tan baja.
Al final, viendo los plazos en los que se desarrollaron las operaciones, no iba desencaminado Parejo al no confiar en que el Barcelona le contratara rápido, pues Oriol Romeu no firmó hasta el 19 de julio, fechas en las que Dani ya estaba en Suiza con el Villarreal.
Renovación a punto de caramelo
Así que salvo que el destino diga lo contrario, Parejo no cogió el tren a Barcelona en la que más que probablemente fue la última vez que pasó. El jugador tiene apalabrada la renovación en unas condiciones muy similares a las actuales: dos años fijos y uno opcional antes del cual las dos partes podrán separarse sin penalización alguna.
Parejo dijo en Relevo que "le queda la espinita de no haber jugado en un top europeo", pero también señaló que "en el Villarreal me siento como en casa". Al menos, la segunda de sus declaraciones podrá seguir viviéndola en territorio groguet.