La sentida carta de García Pimienta al sevillismo tras su destitución: "El equipo, creedme, está muy vivo"

García Pimienta ha tomado la palabra por primera vez desde que fuese cesado como técnico del Sevilla FC. El catalán ha emitido un mensaje emotivo y sincero en su cuenta personal de X. El texto publicado está cargado de gratitud hacia el club, los trabajadores del mismo y, sobre toda una afición que, en sus propias palabras, "ha estado siempre ahí, apoyando incansablemente al equipo".

El técnico catalán, que ha visto su continuidad en entredicho desde hace unas semanas, se marcha sin rencor, con la convicción de haberlo dado todo y la esperanza de que el equipo pueda revertir la situación en las seis jornadas que restan. "El equipo, creedme, está muy vivo y estoy convencido de que el final de temporada será buenísimo", empezó en su carta de despedida.

Pimienta no ha querido dejar pasar la oportunidad de agradecer la confianza depositada por el club y ha definido como un "auténtico privilegio" haber trabajado en el Sevilla. Su mensaje, respetuoso y sentido, cierra un ciclo breve pero intenso en el que, a pesar de las dificultades, siempre defendió su idea de fútbol y mantuvo el compromiso con el vestuario.

Con su salida, el club ha decidido dar un golpe de timón y recurrir a un viejo conocido: Joaquín Caparrós, símbolo del sevillismo y figura clave en la historia reciente de la entidad. El utrerano se sentará de nuevo en el banquillo con el objetivo de reavivar a un equipo aletargado y encarar con determinación un tramo final de temporada que será decisivo para el futuro del club.

Caparrós, que ya vivió varias etapas en el club, representa la vuelta a los orígenes, a la pasión y al orgullo de pertenencia. Su llegada busca despertar la energía del vestuario y conectar emocionalmente con una grada que no ha dejado de creer.

El equipo, creedme, está muy vivo y estoy convencido de que el final de temporada será buenísimo, sigo sin tener ninguna duda.

Quiero agradecer al Sevilla FC haber confiado en mí y en mi staff. Haber podido trabajar con todos los recursos materiales y humanos de este gran club ha sido para nosotros un auténtico privilegio.

Gracias a todas y cada una de las personas que, en todos los ámbitos, trabajan para el club y que han compartido con nosotros, codo a codo, las alegrías y las dificultades de estos meses, son profesionales de altura.

Y finalmente, gracias infinitas a la afición, porque en tiempos revueltos ha estado siempre ahí, apoyando incansablemente al equipo y alentándonos a mejorar en cada uno de los partidos.

Haber sentido el Ramón Sánchez-Pizjuán como nuestro nos quedará grabado para siempre. Ha sido un honor.