SEVILLA - BETIS

Los Biris se plantan en el entrenamiento del Sevilla y charlan con los jugadores antes del derbi

El grupo de aficionados más radical no pudo entrar en la Ciudad Deportiva y estuvo en la puerta.

Un grupo de aficionados Biris protesta en el Pizjuán./Maya Balaya
Un grupo de aficionados Biris protesta en el Pizjuán. Maya Balaya
Alonso Rivero

Alonso Rivero

La tensión en torno al Sevilla va en aumento. Y más en semana de derbi. Los malos resultados del equipo de Nervión -quitando la victoria copera ante el Quintanar el equipo no gana desde su victoria ante el Almería- y la proximidad del duelo ante el eterno rival ha provocado que el equipo se haya visto rodeado de fuertes medidas de seguridad en su última sesión de trabajo.

Un entrenamiento marcado por la presencia de los Biris alrededor de la Ciudad Deportiva del club hispalense. Una veintena de representantes del grupo de aficionados han dialogado con algunos jugadores de la primera plantilla durante cinco minutos. Luego los radicales se han marchado de los aledaños del recinto, ya que no ha podido acceder al interior del mismo por las medidas de seguridad adoptadas por el club.

"Hubo una charla con los hinchas del club. Le puedo decir que expresaron el sentimiento del aficionado del Sevilla. El grupo lo recibió bien y terminó en buenos términos, entendiendo las necesidades del aficionado y de nosotros de que esto vaya bien", ha señalado el propio Diego Alonso en la conferencia de prensa previa al derbi cuando se lo cuestionó sobre ese encuentro con los Biris.

Por segunda temporada consecutiva los resultados no están acompañando al equipo hispalense, que desde la salida de Julen Lopetegui no consigue enderezar el rumbo deportivo. Ni la salida de Monchi ni la llegada de Víctor Orta o el cambio de entrenador entre José Luis Mendilibar y Diego Alonso ha llevado tranquilidad a un club al que ahora mismo sólo separan cuatro puntos de la zona de descenso y que está último en su grupo de la Champions con sólo dos empates en cuatro partidos.

La permuta de inquilino en el banquillo no ha sido la solución esperada por la dirección deportiva, lo que también ha hecho aumentar la tensión en torno al equipo sevillista. Y encima ahora llega el Betis para medir la capacidad de un Diego Alonso que en seis partidos al frente del conjunto hispalense apenas ha sumado un triunfo y fue en Copa ante el Quintanar, equipo de Segunda RFEF.

"Debe ser un punto de inflexión", apuntó el técnico sevillista sobre el partido ante el Betis tras la derrota en Londres, donde los 1.700 aficionados desplazados ya emitieron su veredicto. Ahora la pelota está en el tejado de los futbolistas y el entrenador, aunque una derrota ante el eterno rival hará que las miradas pasen del banquillo al palco.