El trabajo que no se vio de Corberán, se reunió en privado con Jesús Vázquez y Max Aarons: "No tenía dudas de que ibais a aprobar el examen"

El Valencia CF no solo ganó en el Santiago Bernabéu tras 17 años sin hacerlo, lo hizo siendo un equipo inferior al de otras campañas y sin poder contar además con tres de sus jugadores más importantes: Foulquier, Luis Rioja y José Gayà. Las ausencias de esos tres baluartes del equipo fue debate toda la semana especialmente debido a sus recambios: ni Jesús Vázquez ni Max Aarons habían jugado apenas con Corberán y su nivel generaba muchas dudas.

El técnico gracias a su método de trabajo había conseguido que tanto Jesús como Max se sintieran bien en los entrenamientos y se mantuvieran enchufados pese a sus escasos minutos, sin embargo jugar en El Bernabéu tras no haberlo hecho en semanas a nivel confianza es una presión extrema... Y ahí es donde hubo 'mano de entrenador'.

Carlos Corberán se reunió en privado durante la semana con Jesús Vázquez y con Max Aarons (primero con uno, luego con el otro), a ambos les avisó antes de tiempo -antes de que lo supiera el resto del equipo-, de que iban a ser titulares y les trasladó una confianza máxima. Fue una conversación cara a cara, de jugador y entrenador. Carlos les trasladó confianza, pero también responsabilidad, el partido no iba a dejar de ser una prueba para ellos y contaban con su apoyo, pero estaba en sus botas.

¿Qué pasó durante el partido? Si nos vamos a la banda de Jesús Vázquez su partido fue de un nivel muy alto, tan alto, que solo fue regateado en 2 ocasiones en los 90 minutos que duró el partido y eso que por su costado lo intentaron Mbappé, Vinicius, Rodrygo, Brahim y Endrick en los últimos minutos, que salió como un avión. Defensivamente ganó más del 50% de los duelos y la 'marca' que le quedó pendiente fue en el gol de Vinicius en el balón parado a segundo palo, donde por querer cerrar el centro del área con Mbappé, el brasileño aprovechó su espalda.

Pero esa confianza que trasladó Corberán algo debió remover en Vázquez, pues pese a tener enfrente a los 'bichos' que tenía, se atrevió a ir con todo en ataque. Tanto, que fue el tercer jugador que más pases dio en el último tercio del campo rival (11), solo por detrás de dos atacantes como Diego López (16) y André Almeida (16). Además consiguió con éxito dos regates y no le quemó el balón, de hecho según su mapa de calor pasó más tiempo en campo rival presionando y atacando, que en campo propio, y fue el defensa que más veces intervino en el juego, pues el equipo para sacar el balón priorizó el costado izquierdo.

El duelo de Max fue más discreto, por la sencilla razón de que se focalizaron más por el costado de Vázquez y él en ataque estuvo menos participativo. Eso sí, al acabar el partido Carlos Corberán, que como siempre marca distancias con el jugador, les dejó una frase sencilla, simple y cristalina que sirvió para reforzar la confianza de ambos: "No tenía ninguna duda de que ibais a aprobar el examen".