Unzué y Míchel conversan sobre su Girona: "Me acuerdo de los entrenadores como tú que han pasado por aquí"
El comentarista de DAZN y el entrenador del Girona comparten un profundo y emotivo diálogo tras la victoria del equipo contra el Barça.
La grada sigue llena, porque el partido es importante, y Míchel se acerca a la posición de comentaristas para dar la entrevista de rigor. Le espera Juan Carlos Unzúe, que tiene pasado en Girona y es uno de esos sabios del futbol. Se escucha de fondo "Michel catalá", pero también gritos por Unzué. Ellos dos hablan con normalidad, sin teatro, con mucha verdad.
Arranca Michel la conversación en DAZN, recogiendo el testigo de la reportera Sandra Díaz Arcas. "Es increíble, llevamos 74 puntos, menos la barbaridad que está haciendo el Real Madrid… es un proyecto precioso, de gente que te deja trabajar. No tengo palabras, solo disfrutar del momento. Hoy se va a Champions ganando a un Barça que es el equipo al que hemos estado a la sombra y por un día estar encima de ellos seguro que los aficionados lo están disfrutando", explica el entrenador que ha llevado al club a la Champions.
La periodista le cuenta, como chivándose, que Unzué sí sabe por qué han ganado este partido. "Jugando espectacularmente y como dijiste antes, tratando que tus jugadores disfruten, hacer lo que hacíamos cuando éramos pequeñitos, coger la pelota y atreverse", dice el que fuera entrenador fugaz del Girona y una de las grandes personalidades del fútbol español.
Míchel sonríe, agradece y explica que ese, y no otro, es el objetivo: "Ese ha sido el reto todo el año, quitarte esos miedos de equipo pequeño, esos miedos de mirar el resultado, aunque tú y yo sabemos que nos van a echar por el resultado, es importante que el jugador mire cara a cara al rival, aunque sea un gran equipo".
Aprovechaba para ser magnánimo y conceder al Barcelona su tamaño: "es verdad que es un gran equipo y hasta el 2-2 han sido mucho mejores, nos ha costado un pelín de pierna la mentalidad esa de tutearles y nos ha costado, pero con el 2-2 nos hemos desatado".
Unzué retomaba la conversación recordándole que la casualidad deja de serlo cuando se repite en el tiempo. "No es el primer día, ni el segundo, ni el tercero que remontáis, y eso no habla solo de la fortaleza futbolística, sino mental, que es cierto que cuando estás en buena dinámica es más sencillo, pero lo habéis repetido muchas veces", le lanzaba a su compañero de profesión.
Míchel respondía con elogios, a Unzué y al club que le ha dado la posibilidad de tener una plantilla que ahora es de Champions: "Yo me acuerdo de entrenadores como tú que han pasado por aquí. Aquí la dirección habla de fútbol y eso permite que con el jugador crezca desde una idea, si el jugador ve dudas arriba porque los resultados no llegan… pero aquí no hay dudas y el jugador al final se siente seguro con una idea y eso es muy importante para nosotros y por eso el jugador lo lleva al límite independientemente del resultado".
La fuerza del proyecto
El exportero le daba la razón, trabajar en Girona es jugar con buenas cartas. "Yo lo que tuve la sensación el tiempo que estuve aquí en Girona es que el club por encima de todo quería cuidar a los jugadores al máximo y al staff para no tener ninguno de ellos la posibilidad de no dar su máximo rendimiento. La atención está en vosotros y en los jugadores, pero creo que es un buen día para decir lo que está haciendo el Girona y el trabajo que está haciendo", comentaba el ahora comentarista de DAZN.
Un proyecto victorioso pero, como recuerda el actual técnico del Girona, no sin lamentos: "Esto es un proyecto de club y yo he participado en estos tres años, en Segunda pasaron por muchos apuros, tuvieron dos golpes muy duros, siempre ha servido la leyenda de que Girona es inmortal, siempre se levantan", explicaba.
Pero no se quedaba ahí, la conversación era profunda y emotiva, el estado de salud de Unzué es precario por el ELA, y Míchel quiso darle su papel, que lo tiene: "Te hago partícipe de esto porque me has mandado muchos mensajes, y reconozco que todo lo que ha pasado por aquí nos ha hecho crecer, tengo la sensación de que eres un tío que valoras lo que hemos hecho".
La respuesta de Unzué era rápida y directa: "Sin ninguna duda, creo que no soy el único. Tenéis el respeto de toda la gente".
Eso es una de las cosas que más valora Míchel. "En la charla les he puesto solo la palabra legado, sabíamos que el Madrid iba a ganar la liga, solo han perdido un partido, sabíamos que están muy por encima del resto, pero hemos viajado a muchos sitios donde la gente ha dicho que ve nuestros partidos y eso para un entrenador es la leche, es la pasión que yo quiero transmitir a mis jugadores. Más allá de una camiseta, porque cuando tu equipo gana eres feliz, juegue bien o mal, pero si ves jugar a un equipo y dices 'juega bien, les voy a seguir…' Yo el jueves me puse a ver el Leverkusen y dije joder, esto es otro nivel, y veo el Leverkusen que ni tengo que analizarlo, sufrirlo, ni me interesa, pero lo veo y me gusta ver ese partido".
Ahí terminó el mano a mano entre ambos, la conversación siguió con un recordatorio, quizá el año que viene sí tiene que analizar al Leverkusen. Porque el Girona, como el equipo de Xabi Alonso, es ya un equipo de Champions.