El Burgos de los récords ya es líder

No es noticia que el Burgos es noticia, porque así estamos catorce jornadas consecutivas, boquiabiertos por alguna de sus hazañas, en las que demuestra que sin chequera, se puede pelear en la parte alta de la tabla y ser el mejor de la categoría. Hoy le tocó a Las Palmas, que parecía que iba a subir en noviembre, y el próximo día será otro. La realidad es que tras un tercio de campeonato, el Burgos de Julián Calero y del "Cid Campeador" es líder, con una plantilla que ni de lejos se acerca al coste de la mayoría de rivales y con un director deportivo que, cuando jugaba, metía goles en todos los campos y ahora los hace de otra manera. Esta noche, Michu dormirá como un bebé.

Vivimos en una temporada diferente. Siempre puede ser el día en el que alguien se atreva a marcarle un gol a Churripi, pero la realidad es que el portero onubense está empeñado en poner su nombre en las páginas de historia de LaLiga. Ya sólo le faltan 61 minutos (acumula 1.215 imbatido) para alcanzar el récord que Abel Resino consiguió entre noviembre de 1990 y marzo de 1991. Más de treinta años de porteros que han pasado por la competición doméstica y que no han podido ni acercarse a la barbaridad que Caro puede lograr el sábado frente al Tenerife. Nuevo problema para Luis Enrique, que igual tiene que editar la lista de 55 preseleccionados y añadir al "Churripi de los récords" rumbo a Catar.

El secreto del Burgos pocos lo saben, pero lo que sí se puede percibir es que tiene todos los ingredientes para seguir creciendo. Lo primero que está haciendo del equipo burgalés un conjunto casi invencible, es que todos reman y ponen su granito de arena con la mirada puesta en el mismo objetivo. Y también me refiero a esa afición que hace que tiemble El Plantío cada minuto que juega su Burgos en casa. Lo de Julián Calero y el hambre que tiene de hacer historia da para una trilogía de cómo un entrenador debe transmitir su idea de juego, de tal forma, que hasta el utillero da todo lo que tiene para que cada concepto sea visible en el césped.

Se han juntado, además, todos los actores con ganas de reivindicación, con una identidad grupal clara en la que conocen a la perfección cuáles son sus puntos fuertes para escudarse en ellos y que todo salga rodado. Calero es el líder del líder de Segunda y ha implantado esa identidad a toda la ciudad, que siente el Burgos como algo suyo y cada cual ha adquirido un sentimiento de pertenencia, que es otro plus para sumar puntos. Cuando Julián Calero explica que sus jugadores son guerreros a la altura del Cid Campeador, busca elogiar para dar confianza y generar, de paso, una característica más a esa identidad tan trabajada. "Sigo pensando que Las Palmas es el mejor equipo de la categoría, aunque a veces te salen partidos torcidos y parece que eres peor de lo que eres. Nosotros hemos estado muy bien en la fase defensiva y de contención y hemos sacado contragolpes. Es increíble marcarles dos goles cuando nunca habían logrado marcarles este año en su casa. Es fantástico, es algo increíble y todo porque mis chicos han estado a la atura del Cid Campeador", reconocía en el postpartido.

Ha tenido que ser el día de todos los santos, en una jornada entre semana y dependiendo de otro resultado, pero al final ha pasado lo que tenía que pasar. El Burgos vuelve a ser el primero de la tabla de Segunda División, 21 años después. El 30 de septiembre de 2001, bajo las órdenes Quique Martín se colocaba líder al finalizar la sexta jornada de liga en el segundo escalón del fútbol español, tras ganarle 3-1 al Xerez en El Plantío. Adelantaba de esta manera al Atlético de Madrid, que tenía que conformarse con ser segundo esa jornada y la siguiente, en la que repitió liderato tras empatar frente al Jaén. Más de dos décadas han pasado y esto sí es noticia, aunque aún faltan muchos más titulares con el Burgos como protagonista. Por el momento, esta noche en Burgos, todos los santos van de blanco y negro.