La decisión de Chen Yansheng que cambió la historia del Espanyol: "Puado ha llegado a un acuerdo con el Real Madrid"

"Ha costado mucho. En el banquillo no he estado tan nervioso en mi vida", reconocía anoche Javi Puado, el héroe del ascenso del Espanyol con un doblete en apenas tres minutos que frustró el regreso del Oviedo a Primera 23 años después. El canterano perico, autor de todos los goles blanquiazules en el playoff -uno contra el Sporting en El Molinón y dos en la vuelta ante los carbayones-, ya es eterno para el club catalán.

Esta ha sido la mejor temporada goleadora de Puado, a veces un tanto algo irregular; a ratos querido y a rato criticado. "No creo que me haya sacado una espina. Yo intento ayudar al equipo, es verdad que como delantero te juzgan por los goles, pero el playoff ha salido bien para todo el mundo. He metido 16 goles y uno de Copa; estoy contento y orgulloso, y al que le guste bien… y ya está", comentaba el barcelonés tras su gran noche como blanquiazul, la más importante de la historia de Cornellà-El Prat.

Precisamente, el capitán perico estuvo muy cerca de salir del club catalán en verano de 2017 cuando jugaba en el filial. Tan cerca estuvo que David Gallego, técnico del Espanyol B, confirmó que se marchaba en rueda de prensa el 27 de agosto de aquel año: "Puado ha llegado a un acuerdo con el Real Madrid". Se iba a ir cedido un año al filial del club blanco, necesitado de gol, con una opción de compra de cuatro millones de euros.

Estaba pactado y Puado, como ha reconocido en alguna ocasión, "ya tenía las maletas hechas". Pero Chen Yansheng, propietario del Espanyol, vetó la operación a última hora, el día 31 de agosto. Habitual con el filial, el atacante catalán había hecho la pretemporada con el primer equipo, dirigido por Quique Sánchez Flores. Entonces el barcelonés tenía 19 años, acudía a las convocatorias de la selección española sub 19 y era uno de los futbolistas más prometedores de la cantera blanquiazul, siempre tan productiva.

El caso es que aquella decisión en 2017 de Chen Yansheng, cuando el mandamás chino se implicaba en el día a día de la entidad y visitaba con frecuencia Barcelona -no pisa la Ciudad Condal desde agosto de 2017-, cambió, en cierto modo, la historia del Espanyol. También de Javi Puado, que, a sus 26 años, ya suma más de una cuarentena de dianas con el primer equipo blanquiazul y que la temporada que viene volverá a ser capitán general de los pericos, en Primera División, y gracias a sus goles.