La fórmula de Julián Calero para sacar del pozo al Cartagena: Una mochila de ilusión y "seguir, seguir y seguir" sin miedo al vértigo
El cuadro cartagenero sale del descenso cinco meses después y está invicto en la segunda vuelta.
![Julián Calero en el banquillo del Carlos Belmonte/LALIGA](http://s3.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202402/06/media/cortadas/juliancalero-R9wdyqjCdEFPf4XiXkFcMlN-1200x648@Relevo.jpg)
"Este equipo va a salir. Que busquen a otro porque este va a salir", sentenciaba Julián Calero en la rueda de prensa de su presentación con el FC Cartagena. El técnico madrileño acababa de aceptar el reto y aterrizaba en la ciudad portuaria con optimismo y "una mochila cargada de ilusión". "Cuando traes la mochila cargada de ilusión no te la tienes que guardar para ti, lo que tienes que hacer es abrirla para que la ilusión se transmita a todo el mundo".
A Julián Calero le gusta que se le entienda. Por eso tira de ejemplos y símiles como recurso para que su mensaje llegue a todos los rincones. Su mochila de ilusión venía también llena de trabajo y exigencia, con el objetivo de dibujar un paisaje libre de nubes, para lo que ya advertía que no iba a ser fácil. El Efesé recibió a su nuevo entrenador al finalizar la séptima jornada de LALIGA Hypermotion, con 3 puntos de 21 posibles y asentado en el farolillo rojo de la tabla.
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La evolución del mensaje de Calero
"Soy una persona muy visceral y, sin objetivos, me cuesta mucho más. Trabajo bien bajo presión, pero lo hago peor cuando tengo tiempo y estoy en relax. Necesito algo que me inspire, ver objetivos para ir hacia ellos", confesaba Julián Calero en una entrevista con Relevo en el mes de junio, cuando acababa de dejar el Burgos por su propio pie y no tenía un banquillo en el que sentarse a dirigir para la presente temporada. La motivación la iba a encontrar más adelante.
El objetivo del Cartagena le inspiró de alguna manera. Vio potencial y se lanzó a un barco que navegaba a la deriva para enderezarlo y "ponerle parches". "Ahora mismo el barco está haciendo aguas en algunas cosas y queremos parchear para que luego coja velocidad de crucero. Lo que tengo muy claro es que de estas situaciones no se sale solo, se sale trabajando mucho, teniendo a todos juntos y si sé que cuento con nuestra gente".
😂 La firma más 'random' de Julián Calero.
— Relevo (@relevo) December 14, 2023
Un aficionado le ha pedido que le firme su bocata de mortadela.
📽️ @FCCartagena_efs pic.twitter.com/cv1ak6FBaC
Así llegó Julián Calero, dejando claro que la paciencia sería la clave del éxito. Se presentó sin complejos para meter a su gente en el bolsillo, explicando de manera cotidiana cualquier problema que viera en el equipo. "Cuando tú vas en el coche, está lloviendo, hay barro y la situación no está bien, ¿qué es lo que haces? Le das al agua, pasas el parabrisas y empiezas a ver. Le das un poquito más al agua y empiezas a ver un poco más. ¿Hasta cuándo? Hasta que empiezas a ver de verdad". El equipo de Calero ha comenzado a ver con algo de claridad, pero no ha sido un camino de rosas.
El discurso del técnico fue moldeándose, convirtiendo la ilusión en exigencia y trabajando con la presión a flor de piel, como a él le gusta. "Por supuesto no voy a bajar el ritmo competitivo. Lo tenemos controlado con los GPS, hemos subido el nivel de intensidad a los mínimos de la categoría, todavía tenemos que subirlos más. Si no estás en los mínimos es imposible", comentaba tras una derrota en casa, haciendo crítica del estado de forma en el que se encontraban los futbolistas del Cartagena a su llegada.
El Cartagena reacciona, pero vuelve a tropezar antes de Navidad
La mayor distancia que ha tenido cuadro cartagenero respecto a la salvación, la acarreó con Calero al frente. En las jornadas 15 y 16, el Cartagena llegó a estar a 9 puntos de salir del abismo. Precisamente, los empates ante Real Oviedo y Albacete de esas jornadas anticipaban la que iba a ser la mejor racha del nuevo Efesé, pero en ese momento, los albinegros tocaban fondo.
"Seguir, seguir y seguir" ha sido el lema de Julián Calero estos meses al frente del Cartagena. El equipo de la ciudad portuaria encadenaba tres empates y dos victorias, que le servían para abandonar el último puesto, pero él lo tenía claro: "Estamos en la UVI, nos acaban de quitar dos tubos y un medicamento a ver cómo reaccionamos, pero nada más". Tras esto y antes del parón navideño, los cartageneros volvieron a caer. Dos derrotas seguidas ante Burgos y Huesca dejaban tocados a los Soldados de Calero.
"El que no quiera venir, que no venga. Directamente. Yo quiero jugadores que quieran estar aquí y el que quiera un reto, aquí tiene un reto", apuntaba Calero tras caer en El Alcoraz y cerrar la primera vuelta como colista, a 8 puntos de la salvación. El Cartagena había vuelto a caer y afrontaba la segunda vuelta y el mercado invernal de fichajes con pocas garantías.
Julián Calero encuentra la llave
El parón navideño sirvió para "limpiar cabezas" y volver a la competición con aires renovados. El Cartagena era otro ya cuando rozó la clasificación a octavos de final de Copa del Rey frente al Valencia y corroboró su mejoría al arrancar la segunda vuelta, cuando remontó su encuentro crucial al Villarreal B (4-1). "En el descanso y ahora al final del partido tengo la sensación de, como ha hecho Rafa Nadal muchas veces, haber salvado una bola de partido. Hemos ganado este set, pero nos queda mucho por delante", comentaba Julián Calero tras levantar un 0-1 y tomar ese segundo tiempo como punto de inflexión.
La victoria frente al minisubmarino fue el principio de la mejoría. De la mano de un fichaje que pidió el técnico madrileño, Andy Rodríguez, el Cartagena ha vuelto a ser fiable en las áreas y peligroso en el balón parado. Venció en El Sardinero y confirmó su estado de forma en casa ante el Amorebieta, encadenando tres victorias consecutivas, que dejaban a los albinegros al filo de la salvación.
𝐒𝐞𝐠𝐮𝐢𝐫, 𝐬𝐞𝐠𝐮𝐢𝐫 𝐲 𝐬𝐞𝐠𝐮𝐢𝐫#ElDíaDespués https://t.co/dh7I6lxswO
— FC Cartagena (@FCCartagena_efs) February 5, 2024
El pasado sábado, el Cartagena salió del descenso tras llevarse un punto de Albacete. Suma 10 puntos de los 12 disputados en la segunda vuelta y tiene otra cara. "Llevamos muchos meses en el barro y sabemos manejarnos bien ahí. No nos pesa la clasificación ni ir detrás en el marcador. Es muy importante porque saber convivir con el vértigo en las posiciones de descenso es fundamental". El equipo de la ciudad portuaria llevaba cinco meses en descenso. Casi todo el tiempo siendo el último clasificado.
Cayó de pie desde el primer día y el entorno del club confió en Julián Calero para levantar el vuelo a través de sus famosos bocadillos de mortadela, a los que hizo referencia en Burgos. No es solo un técnico viral, es un líder de vestuario y de club. El optimismo y la ilusión que desprende su mochila se ha contagiado en toda la ciudad. "Final tras final y mirando al vértigo a los ojos, sin ningún miedo, porque si eres equilibrista y tienes vértigo vas a ir al suelo. Sin miedo porque es lo que pide la situación", acabó apuntando en el Carlos Belmonte, donde el Cartagena empieza a ver de verdad un paisaje sin nubes a través del parabrisas.