La remontada del Racing y de Jordi Mboula, la perla de La Masía sin 'ADN Barça'

La llegada de José Alberto López al banquillo del Racing ha cambiado la cara del equipo, que ya transita por la categoría de plata fuera del descenso y empieza a sumar victorias importantes e involucrando a nuevos rivales para la lucha por la salvación. En Santander había miedo a repetir lo vivido en la última participación en el fútbol profesional, en la que fue colista y acabó a 18 puntos de la permanencia, en la temporada 2019-2020, pero esos errores del pasado, parecen estar superados. De hecho, actualmente ya iguala (en 29 jornadas) la puntuación total de aquella campaña (33 puntos).

No es para menos. Antes de la llegada del técnico asturiano, el Racing encadenaba cinco derrotas consecutivas, se situaba en la quema, a dos puntos del colista y era el equipo que menos goles marcaba (10 goles en 20 jornadas). Para sumarle más calidad al efecto de José Alberto, hasta ese momento, Jordi Mboula no había anotado ningún tanto con el equipo racinguista. Había mucho trabajo por delante y la mano del entrenador se iba a empezar a notar.

En su primer encuentro al frente, el Racing venció (0-3, con el primer gol del año de Mboula) a un Cartagena que rozaba el playoff, mostrando una gran eficacia ofensiva, presionando arriba la salida de balón y dejando entrever que el cambio de juego y mentalidad estaba comenzando a producirse. Desde entonces, los cántabros han sumado 15 puntos y han anotado 13 goles (en las 9 jornadas en las que está José Alberto López), con un nombre propio, que está destacando en la parcela goleadora. Ahora Jordi Mboula ya ha marcado seis tantos y es el máximo realizador del equipo.

"Le hemos cambiado alguna cosa que tanto él como nosotros sabemos qué cosas son y está funcionando. Lo más importante es que Jordi es un jugadorazo y que tenemos un arma muy importante con él y nos está dando lo que le pedimos. A nivel defensivo está muy comprometido y a nivel ofensivo, ese trabajo y ese posicionamiento que le pedimos, le ayudan a estar mejor ubicado. La pena es que no ha hecho el 'hat trick', que se lo merecía", destacaba el técnico del Racing sobre Mboula tras su doblete ante el Andorra la última semana.

Jordi Mboula necesitaba ese cambio para dar el salto definitivo en su faceta goleadora, que le permitiera ser jugador franquicia de un equipo. Desde que salió de La Masía, nunca ha tenido tanto protagonismo anotador y en estos momentos está potenciando sus puntos fuertes de la mano del crecimiento que le está mostrando José Alberto López. Mboula es un extremo potente y rápido, con llegada, que está terminando de pulir su finalización en Santander.

Salió del Barça rumbo a Mónaco, tras haber compartido vestuario con los Cucurella, Mingueza, Carles Pérez o Abel Ruiz y después de anotar un gol 'maradoniano' en la UEFA Youth League frente al Borussia Dortmund, que a punto estuvo de ser finalista entre los nominados al Premio Puskas, pero su estancia en Can Barça estaba cerca de terminar.

"A principio de año me dijeron que no tenía ADN Barça para renovarme muy bajo. Ese año fue bien y tras el gol al Borussia, de repente tenía ADN Barça. Entonces yo ahí ya tenía decidido que me iba porque contaba con buenas propuestas, que me ilusionaban. Nunca tuve una propuesta seria para quedarme allí y me fui", comentaba Jordi Mboula en su canal de YouTube en una charla relajada sobre su salida del Barça.

"Al final me fui al Mónaco. Acababa de ser campeón de Francia y semifinalista de Champions. Iba a entrenar con Falcao, Mbappé y Lemar", comentaba en esa charla el actual futbolista del Real Racing Club, cedido por el Mallorca, que llegó a debutar en Champions League con el Mónaco ante el Atlético de Madrid. Cerca de cumplir 24 años, el extremo más fiable de José Alberto está resurgiendo y demostrando con goles que su consagración en el fútbol profesional pasa por El Sardinero.