Los tres minutos de Álvaro Cervera en rueda de prensa que sacan los colores al arbitraje español: "Sin respeto no me voy a poner detrás de una pancarta"

"Estoy enfadado y se me nota enfadado". Esa es una de las frases que se pueden transcribir de la boca de Álvaro Cervera, cuando se le ha preguntado por el arbitraje que ha recibido su Tenerife en la derrota contra el Racing de Santander (2-1). A ese aviso le han seguido unos tres minutos de contundencia contra el colegiado del encuentro (Fuentes Molina) y la tónica de arbitrajes que viene sufriendo su club.

El entrenador del Club Deportivo Tenerife, ha comenzado pidiendo "respeto" a su club por parte de los árbitros, ya que, a su juicio, se han ido con una expulsión inmerecida y un gol en contra que debería de haber sido anulado por falta previa a Aitor Sanz de Karrikaburu.

"Pido a la gente de Tenerife, si puede, que vea el segundo gol. Lo digo así, públicamente. Que vea el segundo gol y pare, como yo he parado antes de subir a la rueda de prensa, cuando el jugador del Racing cae y vea lo que hace el árbitro. El árbitro se lleva el pito a la boca y va a pitar. No pita, y luego viene el segundo gol. Le llaman desde el VAR y no cambia la decisión. No sé vosotros, pero es una cosa que yo no he visto en mi vida. A nosotros nos ha pasado. No me estoy metiendo con nadie, solo estoy dando mi opinión", consideró sobre el segundo tanto recibido por parte del líder de Segunda División.

El técnico, criado en Santander, ha aseverado irse de El Sardinero "contrariado", ya que, en su opinión, últimamente todas las acciones dudosas les caen en contra, aunque cree que no hay "una persecución" contra su equipo. "Me voy contrariado porque no es la primera vez que nos pasa, si no es un penalti es una expulsión, o sino otra cosa. Me imagino que será muy fácil pitar contra nosotros", añadió en una de sus respuestas.

Para él, no hay respeto del estamento arbitral hacia su club. Eso sí, confiesa que no hay "una persecución, pero ves muchas cosas que no te agradan". Viendo la actitud de Cervera, la pregunta era casi obligatoria. "¿Es fácil pitarle al Tenerife?", lanzó un periodista en la sala de prensa.

"Hace dos semanas sacaron una pancarta para pedir respeto. No sé qué respeto. El respeto es para todos en el fútbol. Yo no me pongo en la pancarta si no se ponen en la mía", sentenció sobre la campaña que lanzó la RFEF y el CTA en contra del acoso al colectivo arbitral.

"Yo quiero respeto por mi equipo, por mi ciudad y mi club. Mientras no lo tenga no me voy a poner detrás de ninguna pancarta. Estoy enfadado y se me nota enfadado. El respeto en el fútbol es para todos, no para unas personas que van vestidos de otro color. Siento que hoy a mí no se me ha tratado justamente", zanjó en la sala de prensa. El propio club ha emitido un comunicado respecto al arbitraje.

El CD Tenerife quiere poner en valor el esfuerzo, la entrega y la actitud ejemplar de nuestro equipo en las últimas jornadas. Nuestros jugadores, junto a su entrenador y cuerpo técnico, han elevado notablemente su rendimiento y han demostrado, jornada tras jornada, que este escudo se defiende con orgullo, compromiso y ambición, y así lo harán hasta final de temporada.

Sin embargo, no podemos obviar que en las últimas jornadas hemos sido objeto de decisiones arbitrales que, de manera reiterada, han perjudicado al equipo. Errores que han tenido una incidencia directa en el desarrollo de los partidos y en nuestra lucha por alcanzar los objetivos. En un contexto más justo y con un criterio arbitral equitativo las últimas jornadas, hoy podríamos estar en una posición muy distinta.

El CD Tenerife exige al colectivo arbitral el mismo respeto que merecen todos los clubes. Respetamos el fútbol, respetamos a la competición y a sus profesionales, pero pedimos que esa misma consideración sea recíproca. La historia de esta institución y el esfuerzo innegociable de nuestro equipo deben ser tratados con la imparcialidad y el rigor que la competición exige.

Lejos de rendirnos, seguiremos luchando con más fuerza que nunca. Porque somos el CD Tenerife. Porque esta afición y esta isla merecen respeto. Vamos, Tenerife.