El último y "agotador" capítulo Mbappé-Luis Enrique: cambio en el 64', 'carita' y al vestuario

Luis Enrique ha vuelto a sustituir a Kylian Mbappé. Esta vez no lo hizo en un partido cualquiera, sino en la visita al Olympique de Marsella, en el minuto 64, con 0-1 en el marcador y con el PSG en inferioridad numérica. El delantero francés no se tomó bien el cambio, como así reflejó su cara tras ver su dorsal en el cartel electrónico del cuarto árbitro. Al abandonar el césped, pasó del banquillo y se fue directamente al vestuario junto a Ousmane Dembélé.

El asturiano sigue realizando la gestión de la plantilla y de su estrella teniendo en mente otras competiciones. Con una ventaja cómoda en el liderato de la Ligue 1, no es la primera vez que Luis Enrique ha mandado al banquillo a Mbappé... o, directamente, no ha sido titular. Por ejemplo, contra el Rennes, en el Parque de los Príncipes, lo cambió en el minuto 65 a diez días de la vuelta contra la Real Sociedad. Antes de la ida frente al cuadro txuri-urdin ni siquiera saltó al césped pese a ser suplente.

Mbappé regresa a la actividad con su club después de una pausa internacional en la que fue utilizado en los dos amistosos con Francia ante Alemania y Chile y sin descansar un solo minuto. En los próximos días, el PSG se juega su acceso a la final de la Copa de Francia y los cuartos de final de la Champions ante el Barcelona.

Como era previsible, Luis Enrique fue preguntado por una nueva sustitución de Mbappé en el flash interview en Prime Video Sport France: "Es la misma música cada semana. Es muy agotador. Soy el entrenador y tengo que tomar decisiones cada día y cada semana. Voy a hacer eso hasta mi último día en París. Siempre intento encontrar la mejor solución para mi equipo, quizá me puedo equivocar, pero creo que he acertado".

Después de la anterior vez que lo hizo, en el descanso del Mónaco - PSG, el técnico español se expresó de distinta manera: "Es muy fácil de contestar. Antes o después, pronto o tarde, esto va a ocurrir y nos tenemos que acostumbrar a jugar sin él. Cuando yo considere oportuno, jugará, y cuando no, no jugará, como hacen todos los entrenadores con sus jugadores".

Este domingo, el PSG afrontaba su salida más complicada en liga de lo que restaba de curso. Y la saldó con un triunfo por 0-2 pese a jugar durante más de 50 minutos en inferioridad numérica. Benoît Bastien expulsó con roja directa a Lucas Beraldo (tenía amarilla) al borde del descanso en una decisión controvertida, al parecer un contacto lateral pese a utilizar el brazo y al tratarse de una situación muy lejana a portería, junto a la zona de banquillos. Todo ello motivó el enfado de Luís Campos, director deportivo de la entidad parisina, en el túnel de vestuarios.

En el inicio de la segunda mitad, y pese a la inferioridad numérica, Vitinha culminó un contragolpe del PSG. Poco después, eso sí, el OM perforó la meta de Donnarumma, aunque el colegiado lo invalidó por fuera de juego posicional de Luis Henrique delante del meta italiano en el momento del tiro de Veretout.

Sin Mbappé en el campo ni en el banquillo, el PSG no sufrió en demasía para mantener el resultado. De hecho, su sustituto, Gonçalo Ramos, anotó el 0-2, un tanto que celebró dirigiéndose a la hinchada rival, que lanzó objetos contra los futbolistas parisinos. El contraataque fue, de nuevo, letal, con asistencia de Marco Asensio.

Gigot, ya al borde del final, reclamó un penalti de Donnarumma, aunque el árbitro no atendió la petición del capitán del Olympique de Marsella. La victoria mantiene los 12 puntos de ventaja del PSG en el liderato cuando ya solo faltan 21 en disputa. Más de medio título conquistado en el Clásico... y en el Vélodrome.